/ miércoles 16 de diciembre de 2020

Agua que no has de Beber, Cotízalo en la Bolsa

Desde la clase de geografía de miss Conchita en primaria, todos sabemos que el agua, ese bien preciado para aquellos que no lo tienen o un commoditie más para políticos prepotentes como Samuel García, se acaba, o por lo menos se ensucia.

La falta de agua potable aún afecta a 748 millones de personas en el mundo y más de 2500 millones de personas carecen de acceso a servicio de saneamiento. Pero esto ¿qué tiene que ver con la planeación y el territorio de todos? Si la mitad de la humanidad vive en ciudades y pronto seremos más del 60%, el crecimiento urbano con todos los servicios que este demanda son apremiantes para todos.

Las ciudades del futuro y para muchos ya las del presente no pueden ser sostenibles si no garantizan un acceso al agua potable y un saneamiento adecuado. Y pues bueno, el agua llegó por fin al sistema capitalista que tanto amamos cuando se trata de comida rápida y moda y tanto disgusta cuando vemos la diferencia entre los más pobres y los más ricos. A partir de la semana pasada el agua comenzó a cotizar en el mercado de futuros de Wall Street, por lo que ahora el precio del agua fluctuará así como el petróleo, el oro o el trigo.

El índice Nasdaq Veles California Water Index con el ticker NQH2O se basa en los precios de los futuros del agua en California que ya cotizaba en 486 dólares por un poco más de un metro cúbico.

Especulaciones o protecciones ayudarán o perjudicarán el futuro de este bien que es clave para la vida, California fue la punta de lanza, debido a la gran escasez dentro del estado americano, sin embargo el futuro apunta a que cada vez veamos este tipo de acciones en las bolsas de todo el mundo. Algo que se tendrá que revisar seguramente desde un panorama legislativo federal y que se aplique en cada uno de los organismos descentralizados a nivel local o regional, porque el agua en México no se vende, en realidad lo que se cobra es el servicio de hacerla llegar limpia a cada uno de los hogares.

Y es que tiene todo el sentido del mundo que el agua cotice en bolsa. Aunque la medida es sólo para una parte de California y es un mercado de futuros para asegurar el precio del agua en una fecha determinada. Hoy en día no sólo la industria agroalimentaria, ganadera o la industrial están interesados en tener un precio fijo durante todo el año de este insumo, las nuevas apuestas caerán en particulares y deberían, los gobiernos de considerar entrar en este tema a futuro, no muy lejano por favor.

Las ciudades como ya lo he dicho no sólo tienen una demografía acelerada exponencialmente, también un decrecimiento pronunciado de este insumo, es decir es casi proporcional lo que crece en población una ciudad a lo que disminuye sus recursos hídricos. El bajío tiene mucho por revisar con industrias de todo tipo que pelean con los habitantes por el uso del agua, en el territorio de todos.

Desde la clase de geografía de miss Conchita en primaria, todos sabemos que el agua, ese bien preciado para aquellos que no lo tienen o un commoditie más para políticos prepotentes como Samuel García, se acaba, o por lo menos se ensucia.

La falta de agua potable aún afecta a 748 millones de personas en el mundo y más de 2500 millones de personas carecen de acceso a servicio de saneamiento. Pero esto ¿qué tiene que ver con la planeación y el territorio de todos? Si la mitad de la humanidad vive en ciudades y pronto seremos más del 60%, el crecimiento urbano con todos los servicios que este demanda son apremiantes para todos.

Las ciudades del futuro y para muchos ya las del presente no pueden ser sostenibles si no garantizan un acceso al agua potable y un saneamiento adecuado. Y pues bueno, el agua llegó por fin al sistema capitalista que tanto amamos cuando se trata de comida rápida y moda y tanto disgusta cuando vemos la diferencia entre los más pobres y los más ricos. A partir de la semana pasada el agua comenzó a cotizar en el mercado de futuros de Wall Street, por lo que ahora el precio del agua fluctuará así como el petróleo, el oro o el trigo.

El índice Nasdaq Veles California Water Index con el ticker NQH2O se basa en los precios de los futuros del agua en California que ya cotizaba en 486 dólares por un poco más de un metro cúbico.

Especulaciones o protecciones ayudarán o perjudicarán el futuro de este bien que es clave para la vida, California fue la punta de lanza, debido a la gran escasez dentro del estado americano, sin embargo el futuro apunta a que cada vez veamos este tipo de acciones en las bolsas de todo el mundo. Algo que se tendrá que revisar seguramente desde un panorama legislativo federal y que se aplique en cada uno de los organismos descentralizados a nivel local o regional, porque el agua en México no se vende, en realidad lo que se cobra es el servicio de hacerla llegar limpia a cada uno de los hogares.

Y es que tiene todo el sentido del mundo que el agua cotice en bolsa. Aunque la medida es sólo para una parte de California y es un mercado de futuros para asegurar el precio del agua en una fecha determinada. Hoy en día no sólo la industria agroalimentaria, ganadera o la industrial están interesados en tener un precio fijo durante todo el año de este insumo, las nuevas apuestas caerán en particulares y deberían, los gobiernos de considerar entrar en este tema a futuro, no muy lejano por favor.

Las ciudades como ya lo he dicho no sólo tienen una demografía acelerada exponencialmente, también un decrecimiento pronunciado de este insumo, es decir es casi proporcional lo que crece en población una ciudad a lo que disminuye sus recursos hídricos. El bajío tiene mucho por revisar con industrias de todo tipo que pelean con los habitantes por el uso del agua, en el territorio de todos.