/ martes 28 de septiembre de 2021

Científicamente Comprobado

Es verdad que me gustaría seguir usando esta expresión que siempre pretendía dar un argumento de suficiente peso, especialmente en las evidencias, en las demostraciones, en la argumentación y en particular, cuando se trataba de algún conocimiento nuevo (al menos para los que participaban de alguna discusión... cualquier discusión medianamente académica.)

Era inevitable referirse al argumentador, al autor de la teoría, a quien produjo el planteamiento, especialmente si se trataba de un científico con quien se tuvo la oportunidad de convivir, de ser su discípulo... mínimo de ser su alumno.

Tratándose de ciencia no es posible dejar de lado al científico, al investigador, al maestro que ha ocupado parte de su vida en demostrar, en descubrir, en desvelar, en construir... es lo cotidiano del quehacer científico.

Donde no ha dejado de ser vigente y se comprende sin mayor argumentación que sin el aporte de los científicos el desarrollo de una nación tiene serias dificultades y pocas posibilidades de fortalecer los indicadores de desarrollo y crecimiento en el bienestar de sus ciudadanos.

La crisis por la que está pasando la administración del trabajo científico del país hace que los comentarios anteriores pasen por un aire de nostalgia, de romanticismo, en cierto modo de irrealidad, es decir, ya no es una prioridad proponer las estrategias del trabajo científico del país, tampoco lo es aportar los criterios para las prioridades en las acciones de ciencia, tecnología e innovación que tanto urgen ante las crisis sanitarias, económicas, de competitividad-país…

Las prioridades del poder ejecutivo, de la directora del CONACYT, de quienes proponen el trabajo científico del país están enfocadas a instrumentar la procedencia de las denuncias, los amparos y las órdenes de aprehensión de un grupo de científicos acusados de lavado de dinero, de manejo de fondos de procedencia ilícita, de peculado.. Por decir lo menos. Es decir, el tratamiento que se le debe dar a un delincuente, narcotraficante, político defraudador… exactamente lo que no se hace con la delincuencia organizada es lo que se está promoviendo por la directora de Conacyt contra integrantes del Foro Consultivo de Ciencia y Tecnología AC.

Desde la demanda presentada el 10 de Julio 2020 presentada por Rosenda Cruz, apoderada legal de CONACYT, contra una treintena de científicos vinculados al Foro de Consulta creado desde 2002 y siempre vinculado presupuestalmente al ejercicio del consejo de ciencia y tecnología.

La fiscalía federal, la de Gertz Manero, en un mes le ha puesto los nombres y apellidos para que la acusación deje de ser contra quien resulte responsable y ha solicitado las órdenes de aprensión y para poner la “cereza del pastel” el presidente de México agrega que los, científicos ofenden a su pareja en las redes sociales…

Así de lamentable... esto es lo sustantivo en la agenda de ciencia y tecnología de nuestro país desde la óptica de la burocracia del gobierno de la República…

Por si fuera importante para el común de los mexicanos, el presupuesto de 2021 en los conceptos de ciencia y tecnología es el más bajo en los últimos veinte años, ha reducido sus asignaciones en un 35% con relación a 2014 y al referirnos al gasto corriente del consejo y de todos los centros de investigación que se encuentra integrados al sistema.

Los centros que hacen labores de ciencia básica dependen principalmente del presupuesto asignado a CONACYT como la unidad responsable del gasto, de ahí se suministran a todos los fondos sectoriales, mixtos, institucionales, becas, sistema nacional de investigadores, proyectos y convocatorias especiales.

Desaparecen programas, plazas, becas, etc. En una disminución de 23% entre el presupuesto 2019 y 2020.

Pero hoy los temas del CONACYT están en el pleito por quien decide cómo se ejercen los recursos administrativos; la inversión para el desarrollo de la ciencia, tecnología e innovación tendrá que esperar a que termine el régimen del chisme mañanero, los pleitos de lavadero, los adjetivos para la pareja del presidente, el obsequio de las órdenes de aprensión contra los científicos por delitos que no tienen libertad bajo fianza…

Desde los propios centros de investigación tiene sentido plantearse un enfoque que supere la triple hélice que ya es un concepto tradicional y que no comunica la urgencia de la vinculación con el mundo productivo, el que compite en los mercados internacionales y es demandado de velocidad de respuesta. Sociedad, Medio Ambiente, gobierno, inversión privada, investigadores... son actores insustituibles en la agenda de investigación, ciencia, tecnología e innovación.

Dejar de ver a las universidades por el origen de los recursos de gasto; públicas o privadas, para verlas como fuentes de generación de proyectos productivos, de corto y largo aliento, investigadores asociados a sectores productivos resolviendo necesidades de desarrollo y regeneración del medio ambiente, ecosistemas que ofrecen soluciones para hacer sociedades competitivas y generadora de oportunidades, especialmente a nuevas generaciones que por ahora ven con frustración estar en la antesala de las ciencias aplicadas ante un gobierno que no tiene la talla para generar lineamientos estratégicos de alto desempeño y mejores condiciones de trabajo productivo de los científicos.

Lo alentador es saber qué hay científicos mexicanos con talento y niveles de formación capaces de conducirse a pesar de la administración de los recursos públicos; en la medida que vean en los sectores productivos a sus mejores aliados tanto nacionales como internacionales... en tanto termina el desgaste que produce tratar con un gobierno que no sabe que no sabe y que no entiende que no entiende.

Hasta la próxima PROSPECTIVA.

José Gerardo Mosqueda Martínez,

Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato

gmg@gerardomosqueda.com.mx gerardomosqueda/ mosquedagerardo

Es verdad que me gustaría seguir usando esta expresión que siempre pretendía dar un argumento de suficiente peso, especialmente en las evidencias, en las demostraciones, en la argumentación y en particular, cuando se trataba de algún conocimiento nuevo (al menos para los que participaban de alguna discusión... cualquier discusión medianamente académica.)

Era inevitable referirse al argumentador, al autor de la teoría, a quien produjo el planteamiento, especialmente si se trataba de un científico con quien se tuvo la oportunidad de convivir, de ser su discípulo... mínimo de ser su alumno.

Tratándose de ciencia no es posible dejar de lado al científico, al investigador, al maestro que ha ocupado parte de su vida en demostrar, en descubrir, en desvelar, en construir... es lo cotidiano del quehacer científico.

Donde no ha dejado de ser vigente y se comprende sin mayor argumentación que sin el aporte de los científicos el desarrollo de una nación tiene serias dificultades y pocas posibilidades de fortalecer los indicadores de desarrollo y crecimiento en el bienestar de sus ciudadanos.

La crisis por la que está pasando la administración del trabajo científico del país hace que los comentarios anteriores pasen por un aire de nostalgia, de romanticismo, en cierto modo de irrealidad, es decir, ya no es una prioridad proponer las estrategias del trabajo científico del país, tampoco lo es aportar los criterios para las prioridades en las acciones de ciencia, tecnología e innovación que tanto urgen ante las crisis sanitarias, económicas, de competitividad-país…

Las prioridades del poder ejecutivo, de la directora del CONACYT, de quienes proponen el trabajo científico del país están enfocadas a instrumentar la procedencia de las denuncias, los amparos y las órdenes de aprehensión de un grupo de científicos acusados de lavado de dinero, de manejo de fondos de procedencia ilícita, de peculado.. Por decir lo menos. Es decir, el tratamiento que se le debe dar a un delincuente, narcotraficante, político defraudador… exactamente lo que no se hace con la delincuencia organizada es lo que se está promoviendo por la directora de Conacyt contra integrantes del Foro Consultivo de Ciencia y Tecnología AC.

Desde la demanda presentada el 10 de Julio 2020 presentada por Rosenda Cruz, apoderada legal de CONACYT, contra una treintena de científicos vinculados al Foro de Consulta creado desde 2002 y siempre vinculado presupuestalmente al ejercicio del consejo de ciencia y tecnología.

La fiscalía federal, la de Gertz Manero, en un mes le ha puesto los nombres y apellidos para que la acusación deje de ser contra quien resulte responsable y ha solicitado las órdenes de aprensión y para poner la “cereza del pastel” el presidente de México agrega que los, científicos ofenden a su pareja en las redes sociales…

Así de lamentable... esto es lo sustantivo en la agenda de ciencia y tecnología de nuestro país desde la óptica de la burocracia del gobierno de la República…

Por si fuera importante para el común de los mexicanos, el presupuesto de 2021 en los conceptos de ciencia y tecnología es el más bajo en los últimos veinte años, ha reducido sus asignaciones en un 35% con relación a 2014 y al referirnos al gasto corriente del consejo y de todos los centros de investigación que se encuentra integrados al sistema.

Los centros que hacen labores de ciencia básica dependen principalmente del presupuesto asignado a CONACYT como la unidad responsable del gasto, de ahí se suministran a todos los fondos sectoriales, mixtos, institucionales, becas, sistema nacional de investigadores, proyectos y convocatorias especiales.

Desaparecen programas, plazas, becas, etc. En una disminución de 23% entre el presupuesto 2019 y 2020.

Pero hoy los temas del CONACYT están en el pleito por quien decide cómo se ejercen los recursos administrativos; la inversión para el desarrollo de la ciencia, tecnología e innovación tendrá que esperar a que termine el régimen del chisme mañanero, los pleitos de lavadero, los adjetivos para la pareja del presidente, el obsequio de las órdenes de aprensión contra los científicos por delitos que no tienen libertad bajo fianza…

Desde los propios centros de investigación tiene sentido plantearse un enfoque que supere la triple hélice que ya es un concepto tradicional y que no comunica la urgencia de la vinculación con el mundo productivo, el que compite en los mercados internacionales y es demandado de velocidad de respuesta. Sociedad, Medio Ambiente, gobierno, inversión privada, investigadores... son actores insustituibles en la agenda de investigación, ciencia, tecnología e innovación.

Dejar de ver a las universidades por el origen de los recursos de gasto; públicas o privadas, para verlas como fuentes de generación de proyectos productivos, de corto y largo aliento, investigadores asociados a sectores productivos resolviendo necesidades de desarrollo y regeneración del medio ambiente, ecosistemas que ofrecen soluciones para hacer sociedades competitivas y generadora de oportunidades, especialmente a nuevas generaciones que por ahora ven con frustración estar en la antesala de las ciencias aplicadas ante un gobierno que no tiene la talla para generar lineamientos estratégicos de alto desempeño y mejores condiciones de trabajo productivo de los científicos.

Lo alentador es saber qué hay científicos mexicanos con talento y niveles de formación capaces de conducirse a pesar de la administración de los recursos públicos; en la medida que vean en los sectores productivos a sus mejores aliados tanto nacionales como internacionales... en tanto termina el desgaste que produce tratar con un gobierno que no sabe que no sabe y que no entiende que no entiende.

Hasta la próxima PROSPECTIVA.

José Gerardo Mosqueda Martínez,

Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato

gmg@gerardomosqueda.com.mx gerardomosqueda/ mosquedagerardo

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