/ domingo 3 de julio de 2022

El Agua

“El agua y la tierra, los dos fluidos esenciales de los que depende la vida, se han convertido en latas globales de basura” .Jacques Cousteau.

El crecimiento de la población mundial y la necesidad de producir energía manejable para la industria de movimiento, de donde parte toda la línea de producción y su variedad de ramas, desde la alimentaria hasta la más sofisticada elaboración de artefactos electrónicos o la ciencia aeroespacial, obligó a utilizar más y más combustibles fósiles no renovables, primeros responsables de la polución atmosférica y causa principal del calentamiento global, hechos que activaron el chispado para encender el interés en el desarrollo de fuentes de energía limpias y duraderas –eólica y solar- para producir electricidad, elemento esencial de la energía manejable que cito antes. Todo ello es en favor de la vida y la salud de quienes poblamos, reino vegetal y reino animal, los continentes y los mares del globo terráqueo.

Con diferente enfoque, la ciencia coincide con la Biblia sobre lo primero que tuvo que formarse o crearse para que hubiera vida. En el primer libro del Pentateuco, el Génesis del Antiguo Testamento del libro más leído de todos los tiempos, nos da cuenta que las primeras creaciones de Elohim-Yave- primer nombre de Dios en el citado texto, fueron el fuego (la energía), el aire y el agua, sin esos tres elementos es imposible imaginarse la existencia de los seres vivientes.

Otra coincidencia es lo inanimado con lo animado, (lo que tiene alma según Aristóteles).

Mientras el 70 por ciento del planeta está constituido por agua, nuestro cuerpo es también 70 por ciento del vital líquido, variable según la edad de los individuos que va del 60 en adultos mayores al 80 por ciento en los bebés. Por otro lado, los vegetales entre más tiernos, su contenido líquido es mayor que la planta o árbol que alcanzó la madurez o árbol viejo.

El aire y el agua son los elementos naturales que hacen habitable la vida de nuestro planeta y que permitieron la aparición de la vida. Los científicos en el tema nos dicen que todos los seres vivos provenimos del mar, de tal manera que “el ciclo del agua” que estudiamos en la secundaria (evaporación, condensación, precipitación, -lluvia-, recolección o infiltración) es la que garantiza nuestra supervivencia.

La escasez de lluvia en el norte del país es solo un lunar de lo que acontece en el mundo. La ONU señala que un 40% de la población en 80 países tienen escasos recursos líquidos.

Pobreza, explosión demográfica y deterioro de los ecosistemas son, entre otras las causas.

Agreguemos la mala calidad del agua de ríos, lagos y reservorios naturales o artificiales contaminados por desechos y basura producida por el hombre. Mantos acuíferos subterráneos que se explotan irracionalmente (Celaya… mmm) por demanda de la industria, métodos de riego agrícola obsoletos, desperdicio del agua en el hogar, redes hidráulicas urbanas en malas condiciones y un largo etcétera nos hacen cavilar que será del futuro no muy lejano.

Resaca. La emblemática palma que le dio nombre una glorieta del Paseo de la Reforma en la CDMX, según información, comenzó a mostrar signos de enfermedad hace 15 años. Yo creo que enfermó y murió de tristeza por lo que sucede en el país, pues coincide la fecha con los 48 días de plantón que sostuvo AMLO en esa avenida.

flokay33@gmail.com

“El agua y la tierra, los dos fluidos esenciales de los que depende la vida, se han convertido en latas globales de basura” .Jacques Cousteau.

El crecimiento de la población mundial y la necesidad de producir energía manejable para la industria de movimiento, de donde parte toda la línea de producción y su variedad de ramas, desde la alimentaria hasta la más sofisticada elaboración de artefactos electrónicos o la ciencia aeroespacial, obligó a utilizar más y más combustibles fósiles no renovables, primeros responsables de la polución atmosférica y causa principal del calentamiento global, hechos que activaron el chispado para encender el interés en el desarrollo de fuentes de energía limpias y duraderas –eólica y solar- para producir electricidad, elemento esencial de la energía manejable que cito antes. Todo ello es en favor de la vida y la salud de quienes poblamos, reino vegetal y reino animal, los continentes y los mares del globo terráqueo.

Con diferente enfoque, la ciencia coincide con la Biblia sobre lo primero que tuvo que formarse o crearse para que hubiera vida. En el primer libro del Pentateuco, el Génesis del Antiguo Testamento del libro más leído de todos los tiempos, nos da cuenta que las primeras creaciones de Elohim-Yave- primer nombre de Dios en el citado texto, fueron el fuego (la energía), el aire y el agua, sin esos tres elementos es imposible imaginarse la existencia de los seres vivientes.

Otra coincidencia es lo inanimado con lo animado, (lo que tiene alma según Aristóteles).

Mientras el 70 por ciento del planeta está constituido por agua, nuestro cuerpo es también 70 por ciento del vital líquido, variable según la edad de los individuos que va del 60 en adultos mayores al 80 por ciento en los bebés. Por otro lado, los vegetales entre más tiernos, su contenido líquido es mayor que la planta o árbol que alcanzó la madurez o árbol viejo.

El aire y el agua son los elementos naturales que hacen habitable la vida de nuestro planeta y que permitieron la aparición de la vida. Los científicos en el tema nos dicen que todos los seres vivos provenimos del mar, de tal manera que “el ciclo del agua” que estudiamos en la secundaria (evaporación, condensación, precipitación, -lluvia-, recolección o infiltración) es la que garantiza nuestra supervivencia.

La escasez de lluvia en el norte del país es solo un lunar de lo que acontece en el mundo. La ONU señala que un 40% de la población en 80 países tienen escasos recursos líquidos.

Pobreza, explosión demográfica y deterioro de los ecosistemas son, entre otras las causas.

Agreguemos la mala calidad del agua de ríos, lagos y reservorios naturales o artificiales contaminados por desechos y basura producida por el hombre. Mantos acuíferos subterráneos que se explotan irracionalmente (Celaya… mmm) por demanda de la industria, métodos de riego agrícola obsoletos, desperdicio del agua en el hogar, redes hidráulicas urbanas en malas condiciones y un largo etcétera nos hacen cavilar que será del futuro no muy lejano.

Resaca. La emblemática palma que le dio nombre una glorieta del Paseo de la Reforma en la CDMX, según información, comenzó a mostrar signos de enfermedad hace 15 años. Yo creo que enfermó y murió de tristeza por lo que sucede en el país, pues coincide la fecha con los 48 días de plantón que sostuvo AMLO en esa avenida.

flokay33@gmail.com