El discurso popular del socialismo que atrae por su oferta extensa de programas de asistencia social para los grupos llamados vulnerables, convierte a éstos grupos en votos cautivos (para no decir en “esclavos modernos”) para que éste socialismo pueda seguir perpetuándose en el poder, éste es una de las formas de trabajar de éste sistema que premia a los que sólo esperan recibir y castiga a los que quieren trabajar y responsablemente ahorran.
Pongámoslo más claro, existen tres instituciones importantísimas en una sociedad: la familia, la iglesia y el gobierno civil. El gobierno y la iglesia consumen economía, sólo la familia produce capital para mantener a los hijos y la economía de una sociedad.
En un sistema socialista, donde el gobierno tiene un rol paternalista que provee salud, empleo, educación, etc., todo esto tiene un costo y el gobierno civil al no crear economía depende de lo que le pueda quitar a la familia, así que entre más grande sea un gobierno, necesitará quitar más a la familia, de tal manera que la institución que termina más afectada es la familia, lo que resulta irónico, porque en vez de proteger y cuidar a la única institución que produce la economía termina ahorcándola.
Las palabras de Federer resultan del todo ciertas: “Cuando los ciudadanos le permiten al Estado poseer sus propiedades y redistribuir sus riquezas, pierden el incentivo de crear, inventar y trabajar duro, ya que no lo estarán haciendo para su beneficio individual. Eso dará por resultado un descenso de la producción, aumento de la pobreza y una dependencia creciente al Estado (1).”
De lado opuesto, las sociedades se desarrollan mucho mejor sin un gobierno controlador, con un gobierno que sólo tiene funciones muy limitadas, como por ejemplo: proteger al productor del capital, a los emprendedores que tienen forma de innovar, entre algunas funciones más, que sólo son específicas y muy limitadas.
Estas funciones limitadas de un gobierno civil fueron parte de los valores bíblicos que sentaron la base del desarrollo de EUA, y que permitieron a ese país, ser un país limpio, moderno, seguro, tener el nivel de vida más alto del mundo, pero décadas de perder éstos valores bíblicos en sus familias, en sus iglesias, en su educación, en su política, en su economía, lo han llevado a adoptar más y más el sistema socialista, con todas sus regulaciones locas de un gobierno controlador, llevando a ese país a parecerse más y más en todos sus problemas a cualquier país del tercer mundo.
En el siguiente artículo me gustaría abordar la pregunta realizada por uno de los amables lectores que ha venido siguiendo éste tema. A todos ustedes queridos lectores, gracias por darse el tiempo para leer éstos temas.
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Artículo escrito por: Alejandra Pimentel Sánchez. Licenciada en Ciencias de la Familia.
Referencias:
(1) Federer, W. (2011). Change To Chains -6000 Years Quest for Control- (Cambio a Cadenas -6000 años en la búsqueda del control-). St Louis : Amerisearch.
