“Mirar la Guadalupana es recordar que la visita del Señor pasa siempre por medio de aquellos que buscan su palabra”. Papa Francisco
La fe mueve montañas y la Fe produce milagros. En la fiesta nacional conmemorativa de las apariciones de la virgen del Tepeyac se induce a promesas, perdón y agradecer favores divinos por intervención de la Virgen de Guadalupe.
Culminan peregrinaciones, costumbres devotas que se realizan desde tiempos ancestrales como en la India en prácticas del hinduismo o budismo. En nuestra era, por el número de peregrinos destacan las peregrinaciones a la Meca, siendo esta uno de los cinco pilares de la religión islam. La Kaaba que establece como mandamiento obligatorio ir al menos una vez en la vida, establecido en el Corán donde se menciona la filosofía e importancia del peregrinaje.
En la época precolombina de nuestro territorio, el lugar más atrayente por la creencia de ser el lugar donde residían los dioses que protegían la humanidad, fue Teotihuacán, visitado aún después de que sus edificios fueran ya una ruina.
La llamada Conquista trajo consigo la religión cristiana católica y según algunos defensores de las culturas prehispánicas el catolicismo fue una imposición con el objetivo de “conquistar” a nuestros antepasados indígenas.
Hace algunos años en una visita a nuestra ciudad, del Dr. Jaime Morera, miembro titular del Seminario de Cultura Mexicana, además de impartir una Conferencia sobre las “Capillas abiertas” mostró interés y lo llevamos al templo de la Merced donde nos indicó que la imagen que se venera es ese lugar es, posiblemente la primera que trajeron los españoles a la Nueva España. Una representación que en España goza de inmensa veneración, casi como a la misma virgen del Pilar cuyo centro de culto está en la Catedral Basílica de Zaragoza.
Pero tal parece que a los mexicas no les era atrayente el culto a una virgen blanca como lo es nuestra señora de la Merced. Entonces, las apariciones de la virgen de Guadalupe hicieron el milagro, una virgen morena que fue capaz de convertir al indio al catolicismo y establecer la religión predominante hasta la fecha.
La Virgen de Guadalupe ya existía cuatro siclos antes de las apariciones en el Tepeyac. Se trata de una pequeña imagen tallada en Cedro, de tez morena que data del siglo XII durante la dominación árabe en España. Guadalupe, nombre que emana del árabe Wädi al-lub, que se traduce como ”rio de lobos u oculto” cuya sede está en el Real Monasterio de Guadalupe en Extremadura, una majestuosa edificación a la que acuden peregrinos en tal cantidad que solo las superan las que van a Santiago Compostela en Galicia, en el noroeste de la península ibérica.
En lo que toca a nuestra virgen de Guadalupe, el nombre proviene del náhuatl “coatlalloper” que significa la que aplasta una serpiente. Hago notar que en mi trabajo de voluntario con la Fundación Internacional de los Clubes de Leones tuve la oportunidad de viajar a prácticamente todos los países de Latinoamérica y en todos los templos que visité, lo mismo que en los Estados Unidos, invariablemente encontré un altar o una imagen de nuestra virgen de Guadalupe y en cambio, en España, jamás vi a la virgen morena del Tepeyac.
Sea como fuere, la virgen morena del Tepeyac es y será la patrona de México y de las Américas.
flokay33@gmail.com
