/ jueves 28 de mayo de 2020

Ingenioso Hidalgo

Gobierno de México comete Genocidio: COVID 19

Con conocimiento de causa y argumentos, se acusa formalmente al Gobierno de México por actos de Genocidio. El Genocidio (Del griego γένος génos “estirpe”; y el latín -cidio, apofonía de caedere “matar”) es un delito internacional que comprende cualquiera de los actos perpetrados con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso como tal. Estos actos comprenden la matanza y lesión grave a la integridad física o mental de los miembros del grupo, sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o parcial. El término fue acuñado y definido por primera vez por el jurista judeo-polaco Raphael Lemkin, que en 1939 había huido del holocausto y encontrado asilo en Estados Unidos.

Con la autorización del Gobierno de México de la “Guía Bioética para Asignación de Recursos Limitados de Medicina Crítica en Situación de Emergencia”, se acredita el Genocidio en este gobierno y deberá de ser sancionado el Presidente de México, su gabinete y los integrantes del Consejo de Salubridad General, así como solidariamente el personal médico y de la salud, que lleven a cabo el seguimiento de dicha disposición. Esta guía se elaboró para hacer frente a la pandemia de Covid-19. La Covid-19 es una enfermedad viral infecciosa nueva, causada por el virus SARS-CoV-2, que tiene manifestaciones clínicas muy severas en aproximadamente el 5% del total de la población que la contrae.

Actualmente no existe tratamiento profiláctico ni curativo para este virus. Dice este documento “En la práctica médica cotidiana uno de los principios de justicia que se utiliza para asignar dichos recursos escasos es el de orden de llegada. Como su nombre lo indica, se compara la fecha y hora en la que un(a) paciente solicita cierto recurso escaso contra la fecha y hora en la que otro paciente solicita el mismo recurso, y se elige a la o el paciente que primero solicitó el recurso. Lo que aquí se contrasta es cuánto tiempo las y los pacientes han estado esperando para recibir el recurso. El principio de orden de llegada se ha justificado en términos de que es eficiente, transparente, se mantiene neutro respecto a las cualidades personales y sociales de las y los pacientes, y les trata de manera equitativa”.

Entonces si llego temprano “puedo vivir”. Otra justificación del Genocidio del Gobierno de México: “Un segundo principio de justicia que se utiliza para asignar recursos escasos de medicina crítica es el principio de necesidad médica. Este principio mantiene que aquél paciente cuya salud está más deteriorada es quien debe recibir el recurso escaso, pero solo si recibir ese tratamiento no será útil”. Si estoy enfermo “entonces mi vida no vale nada, es legal que no se me aplique tratamiento”. Otro elemento más para la acreditación de este supuesto normativo: “Si la salud pública tiene el objetivo de cuidar y mejorar la salud de la población y cada persona dentro de ella tiene igual valor y dignidad, esto nos lleva a concluir, en un primer momento, que el objetivo de la salud pública durante una emergencia de esta naturaleza es doble: tratar al mayor número de pacientes y salvar la mayor cantidad de vidas. Salvar la mayor cantidad de vidas requiere evaluar: i) la probabilidad de que un paciente mejore y sobreviva, y ii) el tiempo que dicho paciente utilizará los recursos escasos que pueden reutilizarse”. Arbitrariamente justificar diciendo que salvarán el mayor número de vidas, o sea si morirán otros.

Finalmente, la cereza del pastel “Tratamiento clínico para pacientes que no califican para recibir cuidados críticos. Las y los pacientes que no califican para recibir cuidados críticos deben continuar recibiendo atención hospitalaria dirigida especialmente al manejo de síntomas (por ejemplo: fiebre, delirio y, sobre todo disnea que sería el síntoma que más angustia podría causar). Se buscará que las y los pacientes tengan el mejor final de vida posible, de preferencia atendidos por personal de cuidados paliativos. De no ser esto posible, entonces la atención será provista por el personal de salud disponible, que deberá estar informado de las recomendaciones de las y los expertos en cuidados paliativos. Es sumamente importante aliviar los síntomas de pacientes que requieren ventilación y no la reciben. Si la medicación no es suficiente para aliviar los síntomas se debe considerar la sedación, no con la intención de provocar la muerte, pero sí con la intención de que el paciente termine su vida sin sufrimiento. La sedación paliativa en pacientes hipóxicos, con progresión de la enfermedad no subsidiaria al tratamiento, es considerada como una expresión de buena práctica clínica y debe seguir las recomendaciones existentes”. Como no fui calificado para vivir por el Estado Mexicano, manténgame sedado y mitiguen el dolor hasta morir.

Verdaderamente es indignante que esto suceda en nuestro país y la gente que no sabe deje morir a sus familiares y amigos, peor que perros en la calle. Hagamos algo, juntos podemos salvar vidas. Los Derechos Humanos no son negociables y NO se pueden perder vidas por una mala gobernanza pública. ¿Se puede prevenir?, SI, con mayor recurso destinado a salvar vidas y no a la construcción del tren maya. Sin ninguna militancia política, es de acusarse a Andrés Manuel López Obrador, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, su gabinete, el Consejo de Salubridad Nacional, personal médico y de servicio a la salud, que serán responsables de Genocidio. Sin embargo, la acusación que sería desvirtuada seguramente por el poder político, no rescatará la perdida de la vida de muchas personas inocentes. Enterados de lo anterior, el siguiente paso es ¿Qué vamos a hacer como sociedad para evitar esto? No esperemos a que se mueran nuestras familias y por supuesto, aunque no sean nuestros familiares, seamos solidarios con la humanidad. Tal vez el gobierno actual es partidario de lo que alguna vez dijo Don José Alfredo Jiménez “la vida no vale nada”.

Twitter @ArellanoRabiela

Gobierno de México comete Genocidio: COVID 19

Con conocimiento de causa y argumentos, se acusa formalmente al Gobierno de México por actos de Genocidio. El Genocidio (Del griego γένος génos “estirpe”; y el latín -cidio, apofonía de caedere “matar”) es un delito internacional que comprende cualquiera de los actos perpetrados con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso como tal. Estos actos comprenden la matanza y lesión grave a la integridad física o mental de los miembros del grupo, sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o parcial. El término fue acuñado y definido por primera vez por el jurista judeo-polaco Raphael Lemkin, que en 1939 había huido del holocausto y encontrado asilo en Estados Unidos.

Con la autorización del Gobierno de México de la “Guía Bioética para Asignación de Recursos Limitados de Medicina Crítica en Situación de Emergencia”, se acredita el Genocidio en este gobierno y deberá de ser sancionado el Presidente de México, su gabinete y los integrantes del Consejo de Salubridad General, así como solidariamente el personal médico y de la salud, que lleven a cabo el seguimiento de dicha disposición. Esta guía se elaboró para hacer frente a la pandemia de Covid-19. La Covid-19 es una enfermedad viral infecciosa nueva, causada por el virus SARS-CoV-2, que tiene manifestaciones clínicas muy severas en aproximadamente el 5% del total de la población que la contrae.

Actualmente no existe tratamiento profiláctico ni curativo para este virus. Dice este documento “En la práctica médica cotidiana uno de los principios de justicia que se utiliza para asignar dichos recursos escasos es el de orden de llegada. Como su nombre lo indica, se compara la fecha y hora en la que un(a) paciente solicita cierto recurso escaso contra la fecha y hora en la que otro paciente solicita el mismo recurso, y se elige a la o el paciente que primero solicitó el recurso. Lo que aquí se contrasta es cuánto tiempo las y los pacientes han estado esperando para recibir el recurso. El principio de orden de llegada se ha justificado en términos de que es eficiente, transparente, se mantiene neutro respecto a las cualidades personales y sociales de las y los pacientes, y les trata de manera equitativa”.

Entonces si llego temprano “puedo vivir”. Otra justificación del Genocidio del Gobierno de México: “Un segundo principio de justicia que se utiliza para asignar recursos escasos de medicina crítica es el principio de necesidad médica. Este principio mantiene que aquél paciente cuya salud está más deteriorada es quien debe recibir el recurso escaso, pero solo si recibir ese tratamiento no será útil”. Si estoy enfermo “entonces mi vida no vale nada, es legal que no se me aplique tratamiento”. Otro elemento más para la acreditación de este supuesto normativo: “Si la salud pública tiene el objetivo de cuidar y mejorar la salud de la población y cada persona dentro de ella tiene igual valor y dignidad, esto nos lleva a concluir, en un primer momento, que el objetivo de la salud pública durante una emergencia de esta naturaleza es doble: tratar al mayor número de pacientes y salvar la mayor cantidad de vidas. Salvar la mayor cantidad de vidas requiere evaluar: i) la probabilidad de que un paciente mejore y sobreviva, y ii) el tiempo que dicho paciente utilizará los recursos escasos que pueden reutilizarse”. Arbitrariamente justificar diciendo que salvarán el mayor número de vidas, o sea si morirán otros.

Finalmente, la cereza del pastel “Tratamiento clínico para pacientes que no califican para recibir cuidados críticos. Las y los pacientes que no califican para recibir cuidados críticos deben continuar recibiendo atención hospitalaria dirigida especialmente al manejo de síntomas (por ejemplo: fiebre, delirio y, sobre todo disnea que sería el síntoma que más angustia podría causar). Se buscará que las y los pacientes tengan el mejor final de vida posible, de preferencia atendidos por personal de cuidados paliativos. De no ser esto posible, entonces la atención será provista por el personal de salud disponible, que deberá estar informado de las recomendaciones de las y los expertos en cuidados paliativos. Es sumamente importante aliviar los síntomas de pacientes que requieren ventilación y no la reciben. Si la medicación no es suficiente para aliviar los síntomas se debe considerar la sedación, no con la intención de provocar la muerte, pero sí con la intención de que el paciente termine su vida sin sufrimiento. La sedación paliativa en pacientes hipóxicos, con progresión de la enfermedad no subsidiaria al tratamiento, es considerada como una expresión de buena práctica clínica y debe seguir las recomendaciones existentes”. Como no fui calificado para vivir por el Estado Mexicano, manténgame sedado y mitiguen el dolor hasta morir.

Verdaderamente es indignante que esto suceda en nuestro país y la gente que no sabe deje morir a sus familiares y amigos, peor que perros en la calle. Hagamos algo, juntos podemos salvar vidas. Los Derechos Humanos no son negociables y NO se pueden perder vidas por una mala gobernanza pública. ¿Se puede prevenir?, SI, con mayor recurso destinado a salvar vidas y no a la construcción del tren maya. Sin ninguna militancia política, es de acusarse a Andrés Manuel López Obrador, Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, su gabinete, el Consejo de Salubridad Nacional, personal médico y de servicio a la salud, que serán responsables de Genocidio. Sin embargo, la acusación que sería desvirtuada seguramente por el poder político, no rescatará la perdida de la vida de muchas personas inocentes. Enterados de lo anterior, el siguiente paso es ¿Qué vamos a hacer como sociedad para evitar esto? No esperemos a que se mueran nuestras familias y por supuesto, aunque no sean nuestros familiares, seamos solidarios con la humanidad. Tal vez el gobierno actual es partidario de lo que alguna vez dijo Don José Alfredo Jiménez “la vida no vale nada”.

Twitter @ArellanoRabiela