/ jueves 6 de agosto de 2020

Ingenioso Hidalgo

Venganza: Forma de actuar de los cobardes (Cervantes)

La venganza en Don Quijote fue hacía la opresión, la desigualdad, la injusticia, la falta de misericordia, el abuso del poder, la ignorancia y haciendo esa reflexión ¿realmente sería venganza? ¿una venganza en justicia, es venganza? al pensar quizá una manera de darle lo suyo a cada quien. Se entiende como venganza, una forma de castigo que es aplicada por una persona que ha recibido maltratos, insultos o cualquier acción que se considere dañina para la integridad del otro; la víctima luego de haber recibido la agresión tras sentirse afectado, decide tomar represalias en contra de su agresor realizando a su vez actos que lo perjudiquen. Las personas que practiquen la venganza por medio de este camino buscan la compensación por los daños que han sido efectuados contra él; muchas veces se entiende como venganza (en un distorsionado sentido) como sinónimo de justicia, sin embargo, este concepto se direcciona más al sentido injurioso a nivel personal, qué agradable para una población completa. La necesidad de efectuar una acción malsana en contra de la persona que ha causado daño se conoce como “deseo de venganza”, este sentimiento tiene un propósito bien determinado: hacer sentir en carne propia lo que el agredido sintió; con estas acciones la víctima quiere estar seguro de que su agresor haya sentido su mismo dolor y con esto evitar que lo siga cometiendo con las demás personas. Muchas veces la venganza puede ser aplicada a la misma persona o por medio de terceros cercanos a ellos, por ejemplo: un policía que asesinó a un hermano de un delincuente y dicho delincuente luego asesinó al hermano del policía, esta es una venganza que involucró a terceros que estaban por fuera del conflicto personal. La acción de venganza posee una ejecución desde hace muchos años atrás, sobre todo eran aplicados en aquellas sociedades que posean un sistema judicial distorsionado o débil; el ejemplo más común era que se permitía a la familia del asesinado matar al homicida, pero si ambas familias (de la víctima y el agresor) estaban en desacuerdo con la acción cometida, llegarían a un convenio en donde se planificaba una pelea con mucha sangre entre ellos. Estas peleas eran conocidas por los integrantes de la población como “vendettas” y eran riñas consideradas como legales bajo los ojos del estado en mandato; esta medida fue parte de muchas sociedades de diferentes culturas, por ejemplo: En Japón cada familia poseía un samurái, el cual estaba preparado en las artes marciales y era el encargado de proteger el honor de su familia, si afectaba a alguno de los suyos tendría que enfrentarse contra él. Recordemos el Código de Hammurabi en la Ley del Talíon: Ojo por ojo, diente por diente. Edmond Dantès esperó hasta veinticuatro años antes de cumplir con su plan de venganza, bajo la falsa identidad del Conde de Montecristo, y sólo entonces se sintió finalmente en paz. La venganza es un instinto profundo que casi todos nosotros experimentamos a lo largo de nuestras vidas, a menudo, la consideramos una manera de restablecer la justicia o asegurarnos que las personas no vuelvan a dañarnos en el futuro. Finalmente comentar que en el ensayo ‘Las consecuencias paradójicas de la venganza’ publicado en 2007 por el Journal of Personality and Social Psychology se argumentaba que las personas que buscan la venganza se centran principalmente en la ira, lo que aumenta la sensación de frustración, ya que el vengativo entra en un círculo vicioso marcado por las emociones negativas. Por lo tanto, según esta interpretación, la venganza no sería dañina solo para quien la recibe, sino que, sobre todo, para quien la pone en práctica. Ésta es también la visión más compartida en psicología. La venganza es de gente que necesita atención médica urgente al dedicar tiempo para dañar a otras personas, no tienen vida propia y el karma siempre regresa. “No importa cuántas veces las personas traten de criticarte, la mejor venganza es demostrarles que están equivocados, Zayn Malik”.

Twitter @ArellanoRabiela

Venganza: Forma de actuar de los cobardes (Cervantes)

La venganza en Don Quijote fue hacía la opresión, la desigualdad, la injusticia, la falta de misericordia, el abuso del poder, la ignorancia y haciendo esa reflexión ¿realmente sería venganza? ¿una venganza en justicia, es venganza? al pensar quizá una manera de darle lo suyo a cada quien. Se entiende como venganza, una forma de castigo que es aplicada por una persona que ha recibido maltratos, insultos o cualquier acción que se considere dañina para la integridad del otro; la víctima luego de haber recibido la agresión tras sentirse afectado, decide tomar represalias en contra de su agresor realizando a su vez actos que lo perjudiquen. Las personas que practiquen la venganza por medio de este camino buscan la compensación por los daños que han sido efectuados contra él; muchas veces se entiende como venganza (en un distorsionado sentido) como sinónimo de justicia, sin embargo, este concepto se direcciona más al sentido injurioso a nivel personal, qué agradable para una población completa. La necesidad de efectuar una acción malsana en contra de la persona que ha causado daño se conoce como “deseo de venganza”, este sentimiento tiene un propósito bien determinado: hacer sentir en carne propia lo que el agredido sintió; con estas acciones la víctima quiere estar seguro de que su agresor haya sentido su mismo dolor y con esto evitar que lo siga cometiendo con las demás personas. Muchas veces la venganza puede ser aplicada a la misma persona o por medio de terceros cercanos a ellos, por ejemplo: un policía que asesinó a un hermano de un delincuente y dicho delincuente luego asesinó al hermano del policía, esta es una venganza que involucró a terceros que estaban por fuera del conflicto personal. La acción de venganza posee una ejecución desde hace muchos años atrás, sobre todo eran aplicados en aquellas sociedades que posean un sistema judicial distorsionado o débil; el ejemplo más común era que se permitía a la familia del asesinado matar al homicida, pero si ambas familias (de la víctima y el agresor) estaban en desacuerdo con la acción cometida, llegarían a un convenio en donde se planificaba una pelea con mucha sangre entre ellos. Estas peleas eran conocidas por los integrantes de la población como “vendettas” y eran riñas consideradas como legales bajo los ojos del estado en mandato; esta medida fue parte de muchas sociedades de diferentes culturas, por ejemplo: En Japón cada familia poseía un samurái, el cual estaba preparado en las artes marciales y era el encargado de proteger el honor de su familia, si afectaba a alguno de los suyos tendría que enfrentarse contra él. Recordemos el Código de Hammurabi en la Ley del Talíon: Ojo por ojo, diente por diente. Edmond Dantès esperó hasta veinticuatro años antes de cumplir con su plan de venganza, bajo la falsa identidad del Conde de Montecristo, y sólo entonces se sintió finalmente en paz. La venganza es un instinto profundo que casi todos nosotros experimentamos a lo largo de nuestras vidas, a menudo, la consideramos una manera de restablecer la justicia o asegurarnos que las personas no vuelvan a dañarnos en el futuro. Finalmente comentar que en el ensayo ‘Las consecuencias paradójicas de la venganza’ publicado en 2007 por el Journal of Personality and Social Psychology se argumentaba que las personas que buscan la venganza se centran principalmente en la ira, lo que aumenta la sensación de frustración, ya que el vengativo entra en un círculo vicioso marcado por las emociones negativas. Por lo tanto, según esta interpretación, la venganza no sería dañina solo para quien la recibe, sino que, sobre todo, para quien la pone en práctica. Ésta es también la visión más compartida en psicología. La venganza es de gente que necesita atención médica urgente al dedicar tiempo para dañar a otras personas, no tienen vida propia y el karma siempre regresa. “No importa cuántas veces las personas traten de criticarte, la mejor venganza es demostrarles que están equivocados, Zayn Malik”.

Twitter @ArellanoRabiela