/ lunes 15 de junio de 2020

La Alianza CBO

“La libertad política es la condición previa del desarrollo económico y del cambio social.” John F. Kennedy.

El campo de la administración, así como la teoría económica y la práctica empresarial, han llevado los negocios a una nueva zona que ha tenido muchos beneficios tanto económicos como sociales: las alianzas y cooperaciones entre empresas / organizaciones y/o regiones. El aprovechamiento de las ventajas competitivas que se van desarrollando con el paso del tiempo y la práctica, así como las ventajas comparativas con las que ya se cuentan (ubicación geográfica, la pirámide poblacional, el clima, etc., son algunas de estas), han logrado un mejor desarrollo económico donde muchos son los beneficiados.

La Alianza Centro Bajío Occidente (CBO) integrada por los gobernadores de los estados de Aguascalientes, Guanajuato, Jalisco, Querétaro y San Luis Potosí, es un claro ejemplo de lo que menciono en el párrafo anterior. Ésta fue creada con la finalidad de fomentar el desarrollo económico de esta región, basada en la cooperación y alianzas estratégicas que tienen como principal impulsor la industria automotriz y aeroespacial, mismas que han generado cerca de 1 millón de empleos directos e indirectos en el país y que juntas representan cerca del 4.2% del Producto Interno Bruto (PIB) de nuestro país, números que sin lugar a duda deben ser cuidados a toda costa.

¿Qué ha hecho esta alianza? Primero, debemos mencionar que la Alianza CBO ha sido un fuerte opositor de la administración actual, muchos podrán pensar que son riñas políticas, sin embargo, tiene un factor más importante, el cuidado y desarrollo de la economía de las y los mexicanos, ya que, a diferencia de otras ramas de la economía, las industrias automotriz y aeroespacial tienen una profunda y compleja relación con otras industrias de la economía, es decir, su cadena de valor es muy robusta y tiene un efecto que beneficia a muchos más sectores, las Tecnologías de la Información, la industria del cuero, el acero y la construcción son varias de estas, por mencionar algunas.

De este modo, ante esta contingencia derivada del COVID-19 lo único claro es que esta seguirá por varios meses más, cuestión que pone en jaque a la mayoría de las economías y que, de continuar así, los daños serían catastróficos y cuantiosos, sin mencionar que el periodo de recuperación podría ser hasta de siete años. Así pues, los gobernadores que integran esta alianza han decidido emprender acciones que coadyuven a una reapertura comercial y económica de cada región, haciendo especial énfasis en aquellos sectores que tienen una cadena de valor mucho más grande, considerándolos esenciales para la reactivación económica dado el número de empleados que pertenecen a dicho sector y el efecto multiplicador que estos puedan tener.

Para finalizar, distintas opiniones podremos encontrar, desde aquellos que se quejan por la gente que regresa a la “normalidad” hasta de quienes entienden y comprenden las limitaciones económicas que presentan millones de mexicanos (si no hay trabajo un día, ese día no estará seguro el alimento). Mientras tanto, hagamos caso a las indicaciones de nuestras autoridades, si podemos quedarnos en casa hagámoslo, si tenemos que trabajar cuidémonos, pero, sobre todo, no juzguemos sin conocer las razones.

“La libertad política es la condición previa del desarrollo económico y del cambio social.” John F. Kennedy.

El campo de la administración, así como la teoría económica y la práctica empresarial, han llevado los negocios a una nueva zona que ha tenido muchos beneficios tanto económicos como sociales: las alianzas y cooperaciones entre empresas / organizaciones y/o regiones. El aprovechamiento de las ventajas competitivas que se van desarrollando con el paso del tiempo y la práctica, así como las ventajas comparativas con las que ya se cuentan (ubicación geográfica, la pirámide poblacional, el clima, etc., son algunas de estas), han logrado un mejor desarrollo económico donde muchos son los beneficiados.

La Alianza Centro Bajío Occidente (CBO) integrada por los gobernadores de los estados de Aguascalientes, Guanajuato, Jalisco, Querétaro y San Luis Potosí, es un claro ejemplo de lo que menciono en el párrafo anterior. Ésta fue creada con la finalidad de fomentar el desarrollo económico de esta región, basada en la cooperación y alianzas estratégicas que tienen como principal impulsor la industria automotriz y aeroespacial, mismas que han generado cerca de 1 millón de empleos directos e indirectos en el país y que juntas representan cerca del 4.2% del Producto Interno Bruto (PIB) de nuestro país, números que sin lugar a duda deben ser cuidados a toda costa.

¿Qué ha hecho esta alianza? Primero, debemos mencionar que la Alianza CBO ha sido un fuerte opositor de la administración actual, muchos podrán pensar que son riñas políticas, sin embargo, tiene un factor más importante, el cuidado y desarrollo de la economía de las y los mexicanos, ya que, a diferencia de otras ramas de la economía, las industrias automotriz y aeroespacial tienen una profunda y compleja relación con otras industrias de la economía, es decir, su cadena de valor es muy robusta y tiene un efecto que beneficia a muchos más sectores, las Tecnologías de la Información, la industria del cuero, el acero y la construcción son varias de estas, por mencionar algunas.

De este modo, ante esta contingencia derivada del COVID-19 lo único claro es que esta seguirá por varios meses más, cuestión que pone en jaque a la mayoría de las economías y que, de continuar así, los daños serían catastróficos y cuantiosos, sin mencionar que el periodo de recuperación podría ser hasta de siete años. Así pues, los gobernadores que integran esta alianza han decidido emprender acciones que coadyuven a una reapertura comercial y económica de cada región, haciendo especial énfasis en aquellos sectores que tienen una cadena de valor mucho más grande, considerándolos esenciales para la reactivación económica dado el número de empleados que pertenecen a dicho sector y el efecto multiplicador que estos puedan tener.

Para finalizar, distintas opiniones podremos encontrar, desde aquellos que se quejan por la gente que regresa a la “normalidad” hasta de quienes entienden y comprenden las limitaciones económicas que presentan millones de mexicanos (si no hay trabajo un día, ese día no estará seguro el alimento). Mientras tanto, hagamos caso a las indicaciones de nuestras autoridades, si podemos quedarnos en casa hagámoslo, si tenemos que trabajar cuidémonos, pero, sobre todo, no juzguemos sin conocer las razones.