/ lunes 27 de abril de 2020

Medidas contracíclicas, ¿enemigas del gobierno?

“Quienes más sufren en una crisis son quienes no jugaron ningún rol en crearla”. J. Stiglitz.

Dentro de la teoría económica existen distintas corrientes de pensamiento, unas nos dicen que en tiempos de crisis lo mejor es apechugar y esperar, hay otras que nos hablan de una intervención mínima y equilibrada entre los agentes privados y el gobierno y, por último, nos encontramos con el Keynesianismo, teoría desarrollada por Keynes la cual nos dice que en tiempos de crisis el estado (gobierno) deberá de aumentar en gran medida su gasto para poder sustituir en parte a los agentes privados que han dejado de gastar.

¿Cuál es la finalidad de que el gobierno gaste más? Esta medida tiene como objetivo poder generar un dinamismo en la economía, es decir, activarla mediante el gasto. ¿Qué sucede con esta medida? Se genera una reacción en cadena: el gobierno paga 10 pesos a quien haga un hoyo y 10 pesos a quien lo tape, estos a su vez acudirán al mercado a comprar bienes y servicios, por ende, esos negocios comprarán insumos y contratarán mano de obra, misma que deberá consumir a otras empresas y así es sucesivamente. Pero ¿cómo puede gastar más el gobierno cuando sus ingresos bajan? Deuda. Quizás este sea el motivo que orilla a AMLO a evitar a toda costa aplicar medidas contracíclicas y más cuando esto fue promesa y estandarte durante su campaña electoral (que al parecer nadie le ha dicho que su mandato ya inició) o, probablemente se podría pensar que es parte de una estrategia político electoral la cual estaría enfocada en tronar la economía y generar una base clientelar (que sobreviva gracias a los programas sociales) rumbo a las elecciones intermedias, sin embargo, esto último sería muy maquiavélico, cosa que dudo mucho alguien sea capaz de hacer con tal de ganar unas elecciones, habrá quien piense distinto y se respeta.

Ahora bien, siendo muy objetivos ¿endeudarse está mal? La respuesta es no, debemos de saber que existe deuda buena y deuda mala, existe deuda que se puede considerar como inversión y aquella que únicamente es despilfarro. Tratemos de escalarlo a nivel personal; utilizar un crédito personal, de nómina, una tarjeta bancaria o cualquier otro instrumento cuya finalidad sea la de comprarnos un jersey de algún equipo de futbol por mero capricho, se podrá catalogar como deuda mala, ¿es necesaria esa prenda? No, y lo peor de todo, nos endeudamos para poder adquirirla, pésima decisión (y más en tiempos de crisis). En contraste, ¿qué pasa si utilizamos un crédito personal, nuestras tarjetas bancarias o cualquier otro instrumento para poder solventar el pago del último semestre de nuestra universidad? Evidentemente será catalogado como inversión ya que lo esperado es que gracias a ello tendremos más y mejores oportunidades de empleo en un futuro, ergo, tendrá un impacto positivo en nuestros ingresos, mismo que justificará nuestro endeudamiento en el pasado.

¿Dos Bocas y el tren maya son inversión? Si y no, ¿por qué? Estos dos proyectos podrían ser un claro ejemplo de una acción cuya finalidad sea la de reactivar la economía. En ambos proyectos se van a ejercer miles de millones de pesos en obras, contratos y más conceptos necesarios, pero, el problema es que estas obras (hablando de la construcción de los proyectos) son realizadas por las fuerzas armadas, cosa que no tiene sentido, el gobierno le paga al gobierno para hacer proyectos, ¿dónde quedan los privados? ¿por qué no utilizar a las constructoras aún sabiendo que el sector de la construcción es un detonante económico? Sólo AMLO y Dios saben…

Para concluir, sí, el gobierno ha llevado a cabo acciones, sin embargo, estas han sido insuficientes y tardías (7 mil y 25 mil pesos de crédito a empresas que cumplan con una gran lista de requisitos) en comparación con las medidas aplicadas en otros países, tal es el caso de los Estados Unidos y Alemania, cuyos gobiernos han decidido inyectar sus economías capital que asciende al 15 y 20%, respectivamente, con la finalidad de reactivar la economía. Sin embargo, dependerá de cada gobierno las acciones que tomen, ¿endeudarse o perecer ante esta crisis? Yo soy de la idea de contratar gente para hacer hoyos y después contratar a otros para taparlos, suena absurdo sí, pero como diría Keynes, es mejor eso a tener gente desocupada.

“Quienes más sufren en una crisis son quienes no jugaron ningún rol en crearla”. J. Stiglitz.

Dentro de la teoría económica existen distintas corrientes de pensamiento, unas nos dicen que en tiempos de crisis lo mejor es apechugar y esperar, hay otras que nos hablan de una intervención mínima y equilibrada entre los agentes privados y el gobierno y, por último, nos encontramos con el Keynesianismo, teoría desarrollada por Keynes la cual nos dice que en tiempos de crisis el estado (gobierno) deberá de aumentar en gran medida su gasto para poder sustituir en parte a los agentes privados que han dejado de gastar.

¿Cuál es la finalidad de que el gobierno gaste más? Esta medida tiene como objetivo poder generar un dinamismo en la economía, es decir, activarla mediante el gasto. ¿Qué sucede con esta medida? Se genera una reacción en cadena: el gobierno paga 10 pesos a quien haga un hoyo y 10 pesos a quien lo tape, estos a su vez acudirán al mercado a comprar bienes y servicios, por ende, esos negocios comprarán insumos y contratarán mano de obra, misma que deberá consumir a otras empresas y así es sucesivamente. Pero ¿cómo puede gastar más el gobierno cuando sus ingresos bajan? Deuda. Quizás este sea el motivo que orilla a AMLO a evitar a toda costa aplicar medidas contracíclicas y más cuando esto fue promesa y estandarte durante su campaña electoral (que al parecer nadie le ha dicho que su mandato ya inició) o, probablemente se podría pensar que es parte de una estrategia político electoral la cual estaría enfocada en tronar la economía y generar una base clientelar (que sobreviva gracias a los programas sociales) rumbo a las elecciones intermedias, sin embargo, esto último sería muy maquiavélico, cosa que dudo mucho alguien sea capaz de hacer con tal de ganar unas elecciones, habrá quien piense distinto y se respeta.

Ahora bien, siendo muy objetivos ¿endeudarse está mal? La respuesta es no, debemos de saber que existe deuda buena y deuda mala, existe deuda que se puede considerar como inversión y aquella que únicamente es despilfarro. Tratemos de escalarlo a nivel personal; utilizar un crédito personal, de nómina, una tarjeta bancaria o cualquier otro instrumento cuya finalidad sea la de comprarnos un jersey de algún equipo de futbol por mero capricho, se podrá catalogar como deuda mala, ¿es necesaria esa prenda? No, y lo peor de todo, nos endeudamos para poder adquirirla, pésima decisión (y más en tiempos de crisis). En contraste, ¿qué pasa si utilizamos un crédito personal, nuestras tarjetas bancarias o cualquier otro instrumento para poder solventar el pago del último semestre de nuestra universidad? Evidentemente será catalogado como inversión ya que lo esperado es que gracias a ello tendremos más y mejores oportunidades de empleo en un futuro, ergo, tendrá un impacto positivo en nuestros ingresos, mismo que justificará nuestro endeudamiento en el pasado.

¿Dos Bocas y el tren maya son inversión? Si y no, ¿por qué? Estos dos proyectos podrían ser un claro ejemplo de una acción cuya finalidad sea la de reactivar la economía. En ambos proyectos se van a ejercer miles de millones de pesos en obras, contratos y más conceptos necesarios, pero, el problema es que estas obras (hablando de la construcción de los proyectos) son realizadas por las fuerzas armadas, cosa que no tiene sentido, el gobierno le paga al gobierno para hacer proyectos, ¿dónde quedan los privados? ¿por qué no utilizar a las constructoras aún sabiendo que el sector de la construcción es un detonante económico? Sólo AMLO y Dios saben…

Para concluir, sí, el gobierno ha llevado a cabo acciones, sin embargo, estas han sido insuficientes y tardías (7 mil y 25 mil pesos de crédito a empresas que cumplan con una gran lista de requisitos) en comparación con las medidas aplicadas en otros países, tal es el caso de los Estados Unidos y Alemania, cuyos gobiernos han decidido inyectar sus economías capital que asciende al 15 y 20%, respectivamente, con la finalidad de reactivar la economía. Sin embargo, dependerá de cada gobierno las acciones que tomen, ¿endeudarse o perecer ante esta crisis? Yo soy de la idea de contratar gente para hacer hoyos y después contratar a otros para taparlos, suena absurdo sí, pero como diría Keynes, es mejor eso a tener gente desocupada.