Mientras el infalible tiempo de este año se nos escurre ya entre las manos las agencias noticiosas y publicaciones periodísticas comienzan a hacer “el recuento de los daños” de los últimos “trescientos sesenta y algo” días. Una de las publicaciones más prestigiosas a nivel internacional, la revista “Time”, publica ya por estos días su edición especial “Persona del año”.
La distinción que la revista hace desde los años veintes del siglo pasado y que ha incluido a personajes como Mahatma Gandhi (1930), Winston Churchill (1940), la reina Elizabeth II (1952), John F. Kennedy (1961), Lech Walesa (1981), los papas Juan Pablo II y Francisco (1994, 2013,) y el año pasado a las víctimas de acoso sexual que rompieron el silencio y provocaron el movimiento “me too”, develó este año como “Persona del año” a los “Guardianes en la guerra por la verdad”.
En un año en que la desinformación ha estado a la orden del día no sólo en las redes sociales sino también en la prensa y es parte ya de la “psique” social influenciada por ambas, es importante volver a reconocer a los héroes en esta guerra por la verdad.
La revista hace hincapié en cuatro entes periodísticos. El fallecido periodista americano de origen saudita del periódico “Washington Post”, Jamal Khashoggi, quien fue asesinado dentro de la embajada saudita en Yemen y volteó los ojos del mundo al conflicto en ese país y a reevaluar la imagen del príncipe/rey de Arabia Saudita.
La periodista María Ressa, del sitio de noticias “Rappler”,quien ha sido acosada legalmente por su labor periodística por el régimen del presidente filipino Rodrigo Duterte es mencionada también en la revista. De igual forma los periodistas Wa Lone y Kyaw Soe Oo, quienes han estado encarcelados por casi una década en Myanmar por sacar a la luz el genocidio de los musulmanes de Rohingya.
También reconoce la revista al equipo del periódico norteamericano “Capital Gazzete” quienes no cesaron sus actividades periodísticas y publicaron su edición al día siguiente de que un desajustado mental abrió fuego en sus instalaciones matando a varios colegas reporteros.
“Times magazine” hace hincapié en el sacrificio que han hecho estos periodistas para que la sociedad pueda estar informada con la verdad. La labor periodística elevada a su máxima expresión pagando cuotas personales que van desde la libertad hasta la vida misma en aras de que usted y yo podamos estar informados.
En una época en que la labor periodística ha sido atacada por la oficina del otrora líder del mundo occidental, que ha llamado a la prensa que no está de acuerdo con sus ideas “el enemigo del pueblo”, es importante valorar los sacrificios que muchos periodistas hacen día a día para comunicar las noticias y brindarnos su opinión para que así la sociedad podamos crear una opinión propia de lo que pasa en el mundo.
Cuatro son los casos que presenta la publicación americana, pero miles son las yemas de los dedos que teclean hora con hora, día con día, semana tras semana y año con año la información que se imprime en el papel periódico, que se lee en los noticieros televisivos y radiofónicos, miles son las lentes de cámaras de video y fotografía que llevan hasta nuestros ojos la imagen de lo que pasa en el mundo. Somos muchos quienes luchamos todos los días por plasmar la verdad. Sin embargo casos como los de “las personas del año”, como los de otros periodistas difamados y encarcelados, como la alarmante cantidad de colegas desaparecidos en México, son ellos quienes han hecho el último sacrificio, quienes han dejado en el desamparo a hijos y cónyuges, a padres y hermanos, quienes cayeron luchando por la verdad, por la libertad, para que yo pueda escribir estas líneas, para que usted las pueda leer.
Mi más sincero reconocimiento para los guardianes de la verdad.
luisesparz@gmail.com
