/ martes 16 de noviembre de 2021

Prospectiva

Marcha cívica por el cambio…

En lo que tengo la posibilidad de que me haga el favor de leer esta columna habrán pasado dos pruebas contundentes para la vida y futuro de la sociedad cubana; la propuesta de una marcha cívica por el cambio propuesta por el joven dramaturgo Yúnior García este domingo y el 15 N que ha despertado a toda la sociedad cubana bajo la sentida petición de los sacerdotes católicos de la isla: que nadie levante la mano contra su hermano.

Primero, hace dos meses, una bellísima canción que transmite la desesperación de la sociedad cubana porque han llegado al límite por el hambre y la amenaza de los contagios por la pandemia del COVID-19... en realidad pesa más en el ánimo de los ciudadanos cubanos la mano represora de un gobierno que se aferra al poder y después de siete décadas ha demostrado su incompetencia, la insuficiencia de una ideología que comunica amenazas de muerte a quien no se somete, un gobierno que pisa sobre la libertad de expresión de varias generaciones de ciudadanos cubanos pero también una reacción de coraje y rebeldía de nuevas generaciones de cubanos que nacieron con el gene de la libertad de conciencia, de expresión, de Ser.

Es verdad que no me refiero a las luchas históricas de los defensores de la libertad de un pueblo noble, no es un tema de efemérides... que por supuesto son ejemplares y son cimiento de las actuales batallas de libertad. Me refiero a la juventud cubana, la que se ha ilustrado, la que se identifica con los valores que están fincados en la visión de la Cuba Libre que soñaron sus padres y abuelos.

Tomarán las calles nuevamente, con signos libertarios, darán lecciones al mundo nuevamente.

¡La fuerza de las armas, el adoctrinamiento por generaciones, las estrategias de engaño, el control de todo lo que se dice, se escribe, se transmite por cualquier medio... ya no aguanta más!

Los maestros del engaño fracasaron ante la capacidad de comunicación que las nuevas generaciones tienen en sus manos, literalmente en sus manos...

La sociedad cubana ha sufrido por generaciones y los gobernantes de la Isla han disfrutado del poder, han dado lecciones a gobernantes de otros países del mundo, el fanatismo de izquierda está afectado, enloqueció, perdió el sentido de la realidad y como fiera herida se revuelca para no perder el disfrute de las ventajas del poder una vez que se ha perdido la confianza de la sociedad que reacciona ante la toma de conciencia por haberse reencontrado con la visión de la autodeterminación y ejercen su capacidad de discernir lo que quieren para su futuro.

¿Cambiarán de signo las expresiones de rebeldía también en otros países como Venezuela, Nicaragua, Bolivia, España, México donde los gobiernos se empeñan en la anquilosada agenda de manipulación desde el poder gubernamental, donde se siguen las mismas prácticas de manipulación y control político?

Hace falta esperar a ver cómo se cumple con la agenda de manipulación de los ciudadanos para caminar en sendas de pobreza y argumentos de reparto de dinero a los más pobres; que como efecto de las mismas políticas son cada vez más...

En esencia la vida democrática es contraria a la voluntad de un solo grupo en el poder, es contraria a la dictadura populista.

Pero hace falta que quienes logran el contrapeso a las arbitrariedades desde el poder asimile con humildad que se trata de sumar voluntades no de uniformar decisiones.

En el caso de nuestra nación los ciudadanos esperamos respuestas inteligentes desde la oposición, con liderazgos que obtienen su fuerza de la capacidad de sumar voluntades y propuestas de libertad a partir de conductas democráticas.

Hoy tenemos instituciones democráticas en el país que requieren mantener su autonomía y libertad de acción apegada a derecho porque es el respeto al derecho la fuerte de armonía y desarrollo de la nación pero en lo interno las instituciones opositoras al gobierno aprendiz de dictador, también se retroalimentan de su democracia con prácticas de consenso en sus decisiones.

Ser demócrata es esencial a la armonía y convivencia con respeto y crecimiento de la nación, no es un ensayo pragmático de gobierno.

Hasta la próxima PROSPECTIVA.

José Gerardo Mosqueda Martínez,

Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato

gmg@gerardomosqueda.com.mx

FB gerardomosqueda

TW mosquedagerardo

Marcha cívica por el cambio…

En lo que tengo la posibilidad de que me haga el favor de leer esta columna habrán pasado dos pruebas contundentes para la vida y futuro de la sociedad cubana; la propuesta de una marcha cívica por el cambio propuesta por el joven dramaturgo Yúnior García este domingo y el 15 N que ha despertado a toda la sociedad cubana bajo la sentida petición de los sacerdotes católicos de la isla: que nadie levante la mano contra su hermano.

Primero, hace dos meses, una bellísima canción que transmite la desesperación de la sociedad cubana porque han llegado al límite por el hambre y la amenaza de los contagios por la pandemia del COVID-19... en realidad pesa más en el ánimo de los ciudadanos cubanos la mano represora de un gobierno que se aferra al poder y después de siete décadas ha demostrado su incompetencia, la insuficiencia de una ideología que comunica amenazas de muerte a quien no se somete, un gobierno que pisa sobre la libertad de expresión de varias generaciones de ciudadanos cubanos pero también una reacción de coraje y rebeldía de nuevas generaciones de cubanos que nacieron con el gene de la libertad de conciencia, de expresión, de Ser.

Es verdad que no me refiero a las luchas históricas de los defensores de la libertad de un pueblo noble, no es un tema de efemérides... que por supuesto son ejemplares y son cimiento de las actuales batallas de libertad. Me refiero a la juventud cubana, la que se ha ilustrado, la que se identifica con los valores que están fincados en la visión de la Cuba Libre que soñaron sus padres y abuelos.

Tomarán las calles nuevamente, con signos libertarios, darán lecciones al mundo nuevamente.

¡La fuerza de las armas, el adoctrinamiento por generaciones, las estrategias de engaño, el control de todo lo que se dice, se escribe, se transmite por cualquier medio... ya no aguanta más!

Los maestros del engaño fracasaron ante la capacidad de comunicación que las nuevas generaciones tienen en sus manos, literalmente en sus manos...

La sociedad cubana ha sufrido por generaciones y los gobernantes de la Isla han disfrutado del poder, han dado lecciones a gobernantes de otros países del mundo, el fanatismo de izquierda está afectado, enloqueció, perdió el sentido de la realidad y como fiera herida se revuelca para no perder el disfrute de las ventajas del poder una vez que se ha perdido la confianza de la sociedad que reacciona ante la toma de conciencia por haberse reencontrado con la visión de la autodeterminación y ejercen su capacidad de discernir lo que quieren para su futuro.

¿Cambiarán de signo las expresiones de rebeldía también en otros países como Venezuela, Nicaragua, Bolivia, España, México donde los gobiernos se empeñan en la anquilosada agenda de manipulación desde el poder gubernamental, donde se siguen las mismas prácticas de manipulación y control político?

Hace falta esperar a ver cómo se cumple con la agenda de manipulación de los ciudadanos para caminar en sendas de pobreza y argumentos de reparto de dinero a los más pobres; que como efecto de las mismas políticas son cada vez más...

En esencia la vida democrática es contraria a la voluntad de un solo grupo en el poder, es contraria a la dictadura populista.

Pero hace falta que quienes logran el contrapeso a las arbitrariedades desde el poder asimile con humildad que se trata de sumar voluntades no de uniformar decisiones.

En el caso de nuestra nación los ciudadanos esperamos respuestas inteligentes desde la oposición, con liderazgos que obtienen su fuerza de la capacidad de sumar voluntades y propuestas de libertad a partir de conductas democráticas.

Hoy tenemos instituciones democráticas en el país que requieren mantener su autonomía y libertad de acción apegada a derecho porque es el respeto al derecho la fuerte de armonía y desarrollo de la nación pero en lo interno las instituciones opositoras al gobierno aprendiz de dictador, también se retroalimentan de su democracia con prácticas de consenso en sus decisiones.

Ser demócrata es esencial a la armonía y convivencia con respeto y crecimiento de la nación, no es un ensayo pragmático de gobierno.

Hasta la próxima PROSPECTIVA.

José Gerardo Mosqueda Martínez,

Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato

gmg@gerardomosqueda.com.mx

FB gerardomosqueda

TW mosquedagerardo

ÚLTIMASCOLUMNAS