¡Despierta Ciudadano!
En un “gobierno federal” de contradicciones, incluso, garrafales en ciertos momentos, su exponente más álgido, hace gala cada mañana de giros que antes, eran inconcebibles en un sujeto sentado en la silla mayor, hoy se van tornando como “naturales”. No falta quienes lo atribuyen al cumplimiento de predicciones y profecías apocalípticas. Lo que, parecer sólo el contorno, o la parte superficial.
Mencioné en colaboraciones pasadas, el hecho de que en plena plaza pública como resulta el jardín principal de nuestra azotada ciudad, estaba –y sigue- una mesa para recabar firmas en razón de que se contabilicen para ver si se hace la Consulta para la Revocación del Mandato, pero que en su lona promocional, invitaba a la “ratificación”, así como en folletos diversos. Además, de que dan “asesoría” sobre otros problemas que aquejan a los ciudadanos y éstos piensan que ahí pueden ser de alguna manera, escuchados. Y claro, todo es aprovechado para convencer sobre el punto principal en favor de AMLO. Pues sucede, que ya sobrepusieron una cinta hecha a mano, para que diga revocación, en lugar de ratificación –con letra pequeña-. Vale. Por una parte, ahorran dinero o no lo tienen para comprar otra “lona”, y luego, aunque de manera rústica, componen la mala propaganda. Aunque, la verdad, el problema de fondo, es otro.
Como ya deben saber, estimados lectores, el presidente de México, no desaprovecha cualquier ladrillo para lanzarlo al INE y esta vez, los acusa de simuladores de la democracia, cuando es evidente que gracias al dicho Instituto, tenemos algo de lo que se requiere para que haya democracia. Primero, son atacados, luego, se les recorta el presupuesto, se ha llegado al colmo de difundir una noticia falsa: Qué el ejército había tomado el control del INE y no es difícil entender desde donde viene el palo (de ciego, por supuesto). El punto, es que los funcionarios del dicho Instituto autónomo, no tienen los recursos para solventar una Consulta de tal magnitud, mientras AMLO se solaza en sus ataques, porque es claro que teme el resultado: No habrá consulta, y si la hay, será otro fracaso en su efecto y alcances. Ya preparan al “culpable”. Eso está a la vista. No se necesita ser adivino.
Otra contradicción, es el asunto del combate a la delincuencia mayor, que en días pasados, vimos intervenir al gobierno gringo: Recompensa millonaria –en dólares, claro- para quienes den información efectiva para detener a cuatro de los hijos del Chapo, y que sale el presidente AMLO a decir ¡No! Esa es nuestra chamba. Y para remate la fiscalía de Sinaloa, señaló que “no hay denuncias” contra los susodichos. El punto álgido es que no se hace gran cosa en México, y una ayudadita no cae mal. Más allá de que vayamos a ser “invadidos” por los EUA. ¿Entonces, para que el consorcio sobre Seguridad, con dichos vecinos, y tan exaltado por Ebrard? Demanda intervención contra el tráfico de armas –tanto, legal, como ilegal- a los EU y ahora, AMLO dice que “cada chango a su mecate”.
LA CONDICIÓN SINE QUA NON: No queda otra que enfatizar los dislates del “Tlatoani”, aunque para muchos ya es aburrido. ¿Cómo dejar correr a quien a cada momento rompe el pacto Constitucional? Encima, quiere hacer una “nueva” Carta Magna, claro está, que sería a su gusto y modos. La ciudadanía debe cuidar y poner un dique. ¿De verdad, merecemos ése tipo de gobernantes? Mientras, un 60% de los electores, duerme el sueño de lo injusto, les llaman abstencionistas, aunque les queda más el calificativo de irresponsables. Cuídense mucho mis estimados lectores.
