/ sábado 2 de noviembre de 2019

Territorio de todos

Acupuntura Urbana

No es necesario ahondar en detalles sobre el tema delincuencial de la semana pasada, quejarse no soluciona nada, defender o no la institución presidencial, escribir un tweet a favor o en contra de una persona no hará ninguna diferencia. Es por eso que en esta columna quisiera abordar el tema de la inseguridad, de manera propositiva, desde mi área de expertiz, desde el diseño de nuestras ciudades y territorios que eventualmente se convierte en el diseño de la sociedad.

El caso de Culiacán se suma ya a lo acontecido en diferentes partes del país, incluyendo el bajío, si bien existen estrategias y ataques frontales desde las áreas de seguridad, de inteligencia, de fiscalización y de trabajo social, la inseguridad se puede tratar también desde el ámbito urbanístico, el cuál algunos estados han adoptado mejor que otros, pero hace falta que los municipios comprendan esta estrategia. El entuerto de la inseguridad no se arregla de la noche a la mañana y el urbanismo no busca ser el salvador en esta transformación social que vivimos, sin embargo si es la piedra angular que junto con un trabajo transversal puede lograr cambiar sociedades y su modo de vida. Dentro de las muchas excusas que escuché sobre lo acontecido sobre los hechos en Michoacán, Guerrero y Culiacán se menciona el tejido social, gran paradoja, es este el que busca atacar el urbanismo.

Acupuntura urbana, este fue el término que utilizaron algunos urbanistas y que lo llevaron a la práctica en Colombia después de 1991, que fue abatido el capo Pablo Escobar. Medellín había sido una ciudad bajo el yugo de la violencia y del narcotráfico, con una tasa de homicidios de 266 habitantes por cada 100 mil en ese año, ha disminuido hasta sólo 22 por cada 100 mil, transformando la vida y la estructura social de este país. Si bien el promedio nacional en el primer semestre del 2019, concluye que tenemos una tasa del 11.8, en nuestro estado nos encontramos con una tasa de 23.4 homicidios por cada 100 mil habitantes. Los números nos dan una idea, que aunque no hemos llegado a tener escenarios como el de Medellín si podemos reducir considerablemente las muertes en nuestro entorno.

Vale la pena googlear “Acupuntura Urbana” y podrán encontrar diferentes ejemplos, la mayoría de ellos en Colombia, dónde sencillamente se llevaban las mejores obras de infraestructura a los territorios donde más se necesitaba. Una idea de volver a colonizar los espacios que la delincuencia había arrebatado al gobierno, la sociedad y al estado de derecho.

@marcosornelasm

marcosornelasm@gmail.com

Acupuntura Urbana

No es necesario ahondar en detalles sobre el tema delincuencial de la semana pasada, quejarse no soluciona nada, defender o no la institución presidencial, escribir un tweet a favor o en contra de una persona no hará ninguna diferencia. Es por eso que en esta columna quisiera abordar el tema de la inseguridad, de manera propositiva, desde mi área de expertiz, desde el diseño de nuestras ciudades y territorios que eventualmente se convierte en el diseño de la sociedad.

El caso de Culiacán se suma ya a lo acontecido en diferentes partes del país, incluyendo el bajío, si bien existen estrategias y ataques frontales desde las áreas de seguridad, de inteligencia, de fiscalización y de trabajo social, la inseguridad se puede tratar también desde el ámbito urbanístico, el cuál algunos estados han adoptado mejor que otros, pero hace falta que los municipios comprendan esta estrategia. El entuerto de la inseguridad no se arregla de la noche a la mañana y el urbanismo no busca ser el salvador en esta transformación social que vivimos, sin embargo si es la piedra angular que junto con un trabajo transversal puede lograr cambiar sociedades y su modo de vida. Dentro de las muchas excusas que escuché sobre lo acontecido sobre los hechos en Michoacán, Guerrero y Culiacán se menciona el tejido social, gran paradoja, es este el que busca atacar el urbanismo.

Acupuntura urbana, este fue el término que utilizaron algunos urbanistas y que lo llevaron a la práctica en Colombia después de 1991, que fue abatido el capo Pablo Escobar. Medellín había sido una ciudad bajo el yugo de la violencia y del narcotráfico, con una tasa de homicidios de 266 habitantes por cada 100 mil en ese año, ha disminuido hasta sólo 22 por cada 100 mil, transformando la vida y la estructura social de este país. Si bien el promedio nacional en el primer semestre del 2019, concluye que tenemos una tasa del 11.8, en nuestro estado nos encontramos con una tasa de 23.4 homicidios por cada 100 mil habitantes. Los números nos dan una idea, que aunque no hemos llegado a tener escenarios como el de Medellín si podemos reducir considerablemente las muertes en nuestro entorno.

Vale la pena googlear “Acupuntura Urbana” y podrán encontrar diferentes ejemplos, la mayoría de ellos en Colombia, dónde sencillamente se llevaban las mejores obras de infraestructura a los territorios donde más se necesitaba. Una idea de volver a colonizar los espacios que la delincuencia había arrebatado al gobierno, la sociedad y al estado de derecho.

@marcosornelasm

marcosornelasm@gmail.com