/ jueves 30 de mayo de 2019

Una Mirada a tus Ojos

La Extracción de la Catarata

Hoy terminamos la serie de comentarios sobre la catarata. Hablaremos de otros tipos que existen además de los ya vistos y el procedimiento quirúrgico para extraerla.

La catarata DIABÉTICA es la más frecuente, dado que la diabetes es una enfermedad que ha ganado mucho terreno en el mundo médico-paciente.

Las personas que padecen la enfermedad de la diabetes están expuestas a una serie de consecuencias por mismo daño, entre ellas la alteración del órgano visual.

La catarata diabética se origina por una sobrehidratación del cristalino y se presenta con opacidades laterales en torno del mismo, como puntos blancos. Su maduración se puede registrar en poco tiempo.

Cuando el factor hereditario incide en la presencia de la catarata, ésta se llama catarata CONGÉNITA.

Estos casos son ajenos al metabolismo y alteraciones sistémicas de la persona ya que la presencia hereditaria es dominante, además de que la morfología de la opacidad del cristalino es muy semejante entre padres e hijos.

La catarata también se clasifica de acuerdo a su desarrollo en: INMADURA, MADURA, HIPERMADURA e INTUMESCENTE.

La catarata madura es aquella en la que el córtex o sea la corteza del cristalino, es totalmente opaco.

La catarata inmadura es aquella que presenta opacidades dispersas dejando entre ellas zonas claras.

La catarata intumescente se presenta cuando el cristalino se hincha por contener más agua de la normal.

En cualquier momento de su desarrollo la catarata puede ser extraída y sólo el oftalmólogo podrá decidir el momento clave para operar.

Para extraer la catarata existen varios métodos, pero el más recomendable es el de facoemulsificación, operación que dura aproximadamente 15 minutos y posteriormente, tras un breve descanso del paciente, permite que éste regrese a su casa para su recuperación.

El método consiste en extraer la catarata y colocar en su lugar un lente intraocular.

Por una incisión milimétrica realizada en la córnea, el cirujano introduce una sonda por la cual pulveriza el cristalino enfermo y simultáneamente extrae los residuos dejando limpio el hueco que recibirá al lente intraocular.

Extraído el cristalino se introduce el lente intraocular en forma de “taco” el que se coloca en su lugar detrás del iris, donde el mismo lente se desdobla y se acomoda. El ocasiones el cirujano podrá ayudar al lente en el proceso de su acomodo.

La catarata no tiene cura, pero sí control y en su momento tendrá que venir como única manera de curarla, la intervención quirúrgica.

Una recomendación: consulte a su oftalmólogo cuando menos una vez al año. No se automedique: cada paciente tiene requerimientos particulares.

Dios mediante hasta el próximo lunes…..mi correo: rich_ir @ hot mail.com

La Extracción de la Catarata

Hoy terminamos la serie de comentarios sobre la catarata. Hablaremos de otros tipos que existen además de los ya vistos y el procedimiento quirúrgico para extraerla.

La catarata DIABÉTICA es la más frecuente, dado que la diabetes es una enfermedad que ha ganado mucho terreno en el mundo médico-paciente.

Las personas que padecen la enfermedad de la diabetes están expuestas a una serie de consecuencias por mismo daño, entre ellas la alteración del órgano visual.

La catarata diabética se origina por una sobrehidratación del cristalino y se presenta con opacidades laterales en torno del mismo, como puntos blancos. Su maduración se puede registrar en poco tiempo.

Cuando el factor hereditario incide en la presencia de la catarata, ésta se llama catarata CONGÉNITA.

Estos casos son ajenos al metabolismo y alteraciones sistémicas de la persona ya que la presencia hereditaria es dominante, además de que la morfología de la opacidad del cristalino es muy semejante entre padres e hijos.

La catarata también se clasifica de acuerdo a su desarrollo en: INMADURA, MADURA, HIPERMADURA e INTUMESCENTE.

La catarata madura es aquella en la que el córtex o sea la corteza del cristalino, es totalmente opaco.

La catarata inmadura es aquella que presenta opacidades dispersas dejando entre ellas zonas claras.

La catarata intumescente se presenta cuando el cristalino se hincha por contener más agua de la normal.

En cualquier momento de su desarrollo la catarata puede ser extraída y sólo el oftalmólogo podrá decidir el momento clave para operar.

Para extraer la catarata existen varios métodos, pero el más recomendable es el de facoemulsificación, operación que dura aproximadamente 15 minutos y posteriormente, tras un breve descanso del paciente, permite que éste regrese a su casa para su recuperación.

El método consiste en extraer la catarata y colocar en su lugar un lente intraocular.

Por una incisión milimétrica realizada en la córnea, el cirujano introduce una sonda por la cual pulveriza el cristalino enfermo y simultáneamente extrae los residuos dejando limpio el hueco que recibirá al lente intraocular.

Extraído el cristalino se introduce el lente intraocular en forma de “taco” el que se coloca en su lugar detrás del iris, donde el mismo lente se desdobla y se acomoda. El ocasiones el cirujano podrá ayudar al lente en el proceso de su acomodo.

La catarata no tiene cura, pero sí control y en su momento tendrá que venir como única manera de curarla, la intervención quirúrgica.

Una recomendación: consulte a su oftalmólogo cuando menos una vez al año. No se automedique: cada paciente tiene requerimientos particulares.

Dios mediante hasta el próximo lunes…..mi correo: rich_ir @ hot mail.com