/ viernes 13 de septiembre de 2019

 Una Mirada a tus Ojos

Previniendo el Glaucoma

Dejamos visto el martes pasado que el glaucoma, una de las enfermedades más graves del órgano visual, no se anuncia, no tiene síntomas y cuando se descubre es porque ya lo tenemos.

El glaucoma no tiene cura, pero si se descubre a tiempo se puede controlar su desarrollo. Surge entonces la pregunta: ¿cómo podemos detectarlo a tiempo si no tiene síntomas ni se anuncia?

Haremos algunos comentarios y sugerencias que pueden servir de ayuda para darnos cuenta de su probable existencia.

Sin duda, la principal causa en la hipertensión ocular. Detectando ésta debe iniciarse el control de la enfermedad de por vida.

El glaucoma no tiene edad para presentarse. Algunos científicos lo ligan al factor hereditario. Cuando algún familiar lo haya padecido debemos tener especial cuidado en la observación propia.

Desde la vida uterina, el bebé puede ser afectado por esta enfermedad y nacer con el daño en sus ojos.

Tal caso no es frecuente pero sí posible.

Otros factores de riesgo los podemos clasificar en: generales y vasculares.

En los generales juega un papel muy importante la edad de la persona. Los mayores de 40 años tienen mayor riesgo.

Enfermedades como la miopía o lesiones que haya sufrido el ojo de tal grado que hayan alterado su propia constitución, pueden ser causas del desarrollo del glaucoma.

En los factores vasculares podemos registrar la presencia alta de colesterol, el padecimiento de hipertensión arterial en cualquiera de sus formas, el padecimiento de diabetes, el hábito de fumar o la presencia constante de migrañas. Todos ellos pueden propiciar el glaucoma.

Algunos científicos han ligado también la presencia del glaucoma en personas que padecen arritmias y en general con padecimientos de circulación periférica como los desmayos continuos con o sin causa y la pérdida transitoria de la memoria.

Si usted se encuentra en cualquiera de las circunstancias descritas, es conveniente que se lo comente a su oftalmólogo ya que esto puede ayudarlo en su diagnóstico y en la decisión de qué acciones tomar

El tratamiento seguramente incluirá una auscultación más profunda auxiliada por estudios especializados.

No debemos olvidar que el glaucoma no se cura pero sí se puede controlar en su desarrollo. La alteración y los cuidados, son de por vida.

Una recomendación: consulte a su oftalmólogo cuando menos una vez al año. No se automedique: cada paciente tiene requerimientos particulares.

Dios mediante hasta el próximo lunes…..mi correo: rich_ir @ hot mail.com

Previniendo el Glaucoma

Dejamos visto el martes pasado que el glaucoma, una de las enfermedades más graves del órgano visual, no se anuncia, no tiene síntomas y cuando se descubre es porque ya lo tenemos.

El glaucoma no tiene cura, pero si se descubre a tiempo se puede controlar su desarrollo. Surge entonces la pregunta: ¿cómo podemos detectarlo a tiempo si no tiene síntomas ni se anuncia?

Haremos algunos comentarios y sugerencias que pueden servir de ayuda para darnos cuenta de su probable existencia.

Sin duda, la principal causa en la hipertensión ocular. Detectando ésta debe iniciarse el control de la enfermedad de por vida.

El glaucoma no tiene edad para presentarse. Algunos científicos lo ligan al factor hereditario. Cuando algún familiar lo haya padecido debemos tener especial cuidado en la observación propia.

Desde la vida uterina, el bebé puede ser afectado por esta enfermedad y nacer con el daño en sus ojos.

Tal caso no es frecuente pero sí posible.

Otros factores de riesgo los podemos clasificar en: generales y vasculares.

En los generales juega un papel muy importante la edad de la persona. Los mayores de 40 años tienen mayor riesgo.

Enfermedades como la miopía o lesiones que haya sufrido el ojo de tal grado que hayan alterado su propia constitución, pueden ser causas del desarrollo del glaucoma.

En los factores vasculares podemos registrar la presencia alta de colesterol, el padecimiento de hipertensión arterial en cualquiera de sus formas, el padecimiento de diabetes, el hábito de fumar o la presencia constante de migrañas. Todos ellos pueden propiciar el glaucoma.

Algunos científicos han ligado también la presencia del glaucoma en personas que padecen arritmias y en general con padecimientos de circulación periférica como los desmayos continuos con o sin causa y la pérdida transitoria de la memoria.

Si usted se encuentra en cualquiera de las circunstancias descritas, es conveniente que se lo comente a su oftalmólogo ya que esto puede ayudarlo en su diagnóstico y en la decisión de qué acciones tomar

El tratamiento seguramente incluirá una auscultación más profunda auxiliada por estudios especializados.

No debemos olvidar que el glaucoma no se cura pero sí se puede controlar en su desarrollo. La alteración y los cuidados, son de por vida.

Una recomendación: consulte a su oftalmólogo cuando menos una vez al año. No se automedique: cada paciente tiene requerimientos particulares.

Dios mediante hasta el próximo lunes…..mi correo: rich_ir @ hot mail.com