Dermatitis en el Párpado
La dermatitis es inflamación de la piel. Cuando hablamos de dermatitis en el párpado o dermatitis palpebral, nos estamos refiriendo a la inflamación del párpado.
Por naturaleza, la piel del párpado es sumamente delicada ya que en su función de distribuir la lágrima sobre la superficie del globo ocular, lo que hace en cada parpadeo, se extiende y recoge miles de veces al día lo que sólo una piel fina y flexible puede soportar.
La inflamación del párpado puede darse por muchas causas, van desde una reacción provocada por la aplicación de un cosmético hasta el trato rudo que significa estarse tallando el párpado constantemente y por mucho tiempo a causa de molestia generada por una comezón.
Se reconocen tres tipos de dermatitis: la sencilla o inicial, la aguda y la crónica.
La primera se presenta en sus inicios de inflamación. Es en este momento cuando debiera tratarse ya que su curación sería fácil, pero con mucha frecuencia la persona no le hace mayor caso, la molestia es aguantable y se espera a que se quite sola no pensando en que es molestia transitoria.
Cuando el paciente comienza a sentir que la molestia es cada vez mayor por haberse desarrollado ya la inflamación y la piel toma un tono rojizo, hasta entonces se decide consultar a su oftalmólogo.
Si la inflamación puede detenerse tal vez nos encontremos con un caso sencillo para su cura, pero si la situación es ya una dermatitis aguda se verá que en la piel del párpado se hacen presentes unas bolsitas de líquido que al reventarse forman costras. Independientemente de la molestia, al aspecto estético de la persona se afea. Esperar para su atención, es darle tiempo a la enfermedad para que se desarrolle y agrave.
El tercer caso, la dermatitis crónica, tiene como consecuencia el engrosamiento de la piel del párpado debido a que el estarse tallando el ojo se convierte en un reflejo natural de la persona debido a la permanente comezón que afecta al órgano. Obviamente el enrojecimiento del párpado será constante generando efectos estéticos no deseados en la persona.
Los síntomas de la dermatitis palpebral son la sensación de ardor por piel quemada o picores fuertes en la piel del párpado. Es el momento de atenderse, no se deje.
Podemos agregar a las causas que pueden provocar una inflamación del párpado, las alergias y algunas sustancias químicas como aerosoles, lacas para las uñas y perfumes de alta concentración.
La dermatitis palpebral es curable y, como todas las enfermedades, si se atacan en sus inicios el tratamiento será más sencillo. No se descuide.
Una recomendación: consulte a su oftalmólogo cuando menos una vez al año. No se automedique: cada paciente tiene requerimientos particulares.
Dios mediante hasta el próximo lunes…..mi correo: rich_ir @ hot mail.com
