/ miércoles 6 de abril de 2022

Una Mirada a tus Ojos

SÍNTOMAS

Cuando algún órgano del cuerpo humano deja de funcionar debidamente, se generan molestias las que se conocen como síntomas.

Hay que tomar en cuenta que las molestias a veces son pasajeras porque la alteración del órgano es igualmente pasajera, situación que en ocasiones es causa de confusión en la persona que resiente la molestia porque normalmente nos vamos por el camino más fácil, nos gusta pensar que sola se va a quitar y por ello no le damos mayor importancia.

Esta actitud en términos generales no es buena. “Como llegó se va…” o “conozco mis dolores…” se escuchar decir, pero si como decimos ésta es una actitud general, en materia de la visión no es permitido aceptarlo. Cuando el ojo avisa, hay que hacerle caso.

Los síntomas en materia de visión son claros: vista borrosa, manchones en la visión, irritaciones de los ojos, inflamaciones en párpados, secreción constante de lágrima, costras serosas en las pestañas la que en ocasiones provoca que se peguen éstas entre sí, comezón y otras alteraciones del mismo orden.

Sin embargo debemos recordar que hay algunas enfermedades de los ojos que no avisan, no presentan síntomas y cuando la persona se percata de irregularidades es porque la enfermedad ya llegó como es el caso del glaucoma.

De allí la necesidad de la revisión periódica de su vista, permanentemente recomendada. Es más importante prever que curar.

Desde que descubra un primer síntoma en su visión, ponga cuidado a su problema, no pierda tiempo, la velocidad en la que se desarrollan las enfermedades de los ojos es variable. Tome también en cuenta que conocer el origen de la alteración y definir la situación del enfermo, requiere en ocasiones de estudios complementarios. De principio, no se automedique, recurra cuanto antes a su oftalmólogo.

Síntomas como vista borrosa e inflamaciones de párpados, son regularmente atendidos por no soportar el paciente las molestias que causan, pero hay otras como ver “mosquitas” o “culebritas” en el campo visual son a veces soportables y no se les hace caso, indebidamente, ya que pueden ser avisos de una afectación del vítreo que si se descuida puede tener consecuencias graves.

Si bien es cierto que la edad o enfermedades como la diabetes pueden generar daños a la vista que en ocasiones son esperados, no por eso deben desatenderse ya que prevenirlos o atacarse a tiempo, son actitudes positivas que pueden hacer más lento el desarrollo de una enfermedad y en ocasiones curarla.

Las molestias, pues, son síntomas. Hagámosles caso

Una recomendación: consulte a su oftalmólogo cuando menos una vez al año. No se automedique: cada paciente tiene requerimientos particulares.

Dios mediante hasta la próxima...mi correo: rich_ir @ hot mail.com

SÍNTOMAS

Cuando algún órgano del cuerpo humano deja de funcionar debidamente, se generan molestias las que se conocen como síntomas.

Hay que tomar en cuenta que las molestias a veces son pasajeras porque la alteración del órgano es igualmente pasajera, situación que en ocasiones es causa de confusión en la persona que resiente la molestia porque normalmente nos vamos por el camino más fácil, nos gusta pensar que sola se va a quitar y por ello no le damos mayor importancia.

Esta actitud en términos generales no es buena. “Como llegó se va…” o “conozco mis dolores…” se escuchar decir, pero si como decimos ésta es una actitud general, en materia de la visión no es permitido aceptarlo. Cuando el ojo avisa, hay que hacerle caso.

Los síntomas en materia de visión son claros: vista borrosa, manchones en la visión, irritaciones de los ojos, inflamaciones en párpados, secreción constante de lágrima, costras serosas en las pestañas la que en ocasiones provoca que se peguen éstas entre sí, comezón y otras alteraciones del mismo orden.

Sin embargo debemos recordar que hay algunas enfermedades de los ojos que no avisan, no presentan síntomas y cuando la persona se percata de irregularidades es porque la enfermedad ya llegó como es el caso del glaucoma.

De allí la necesidad de la revisión periódica de su vista, permanentemente recomendada. Es más importante prever que curar.

Desde que descubra un primer síntoma en su visión, ponga cuidado a su problema, no pierda tiempo, la velocidad en la que se desarrollan las enfermedades de los ojos es variable. Tome también en cuenta que conocer el origen de la alteración y definir la situación del enfermo, requiere en ocasiones de estudios complementarios. De principio, no se automedique, recurra cuanto antes a su oftalmólogo.

Síntomas como vista borrosa e inflamaciones de párpados, son regularmente atendidos por no soportar el paciente las molestias que causan, pero hay otras como ver “mosquitas” o “culebritas” en el campo visual son a veces soportables y no se les hace caso, indebidamente, ya que pueden ser avisos de una afectación del vítreo que si se descuida puede tener consecuencias graves.

Si bien es cierto que la edad o enfermedades como la diabetes pueden generar daños a la vista que en ocasiones son esperados, no por eso deben desatenderse ya que prevenirlos o atacarse a tiempo, son actitudes positivas que pueden hacer más lento el desarrollo de una enfermedad y en ocasiones curarla.

Las molestias, pues, son síntomas. Hagámosles caso

Una recomendación: consulte a su oftalmólogo cuando menos una vez al año. No se automedique: cada paciente tiene requerimientos particulares.

Dios mediante hasta la próxima...mi correo: rich_ir @ hot mail.com