El futbol volvió a servir como el escenario idóneo para levantar la voz. Curioso que en un país como Qatar, otros países de índole islámico hayan usado las tribunas para luchar por los derechos de la mujer y para manifestarse en contra del régimen. Irán fue uno solo: en su país, fuera de él, en las tribunas y también en la cancha.

Fue justamente la Selección de Irán la que más dio de qué hablar. Durante el Himno Nacional se negaron a entonarlo, ante esto, sus familiares recibieron amenazas de muerte, pero la lucha ya había comenzado por todos los frentes.

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Al respecto, el internacionalista Alejandro Martínez expresó que cantar el Himno Nacional durante el último partido es un reflejo de la represión que se vive en el país, además de que en el futuro cercano no se vislumbra un cambio.

“La selección iraní buscó protestas no cantando su himno en los partidos que tuvo en la fase de grupos del mundial de Qatar, pero fue algo que provocó amenazas para sus familiares que viven en Irán y en el último partido sí cantaron el himno, lo cual refleja el nivel de represión que se vive en ese país”, expresó en entrevista con ESTO.

“El futuro en Irán al parecer no cambiará mucho. Ya que las autoridades gubernamentales que rigen en la vida política y religiosa no ven como una opción la apertura a la libertad por parte de la sociedad iraní”, agregó.

Hace un par de días la FIFpro mostró su repudio contra la condena de muerte que enfrentaría el futbolista Amir Nasr-Azadani por su lucha en pro de los derechos de la mujer. El especialista explicó un poco acerca del porqué existe esta sentencia en Irán.

“Existe la pena de muerte en Irán por faltas gravísimas en contra del Weradiy del islam. Hay una condena internacional en contra de la muerte de Amini y a favor de la libertad de las mujeres en Irán.

"Desafortunadamente, esta condena no ha generado ninguna reacción a favor de las mujeres en Irán. Antes del inicio del Mundial, incluso se llegó a proponer por algunas ONG defensoras de derechos humanos que se excluyera a Irán del evento como sanción en contra de estas medidas de represión”, relató.

¿Cuál es la situación que se vive en Irán?

Alejandro Martínez narró para el Diario de los Deportistas el contexto que vive el país islámico, es por ello que fue necesario regresar a finales de los años 70 para entender el actual contexto.

“En 1979 una revuelta popular de tintes religiosos expulsó al monarca Reza Palevi y se establece en Irán una República Islámica. Si bien es cierto que los iraníes acuden a las urnas para elegir a sus gobernantes, existe un liderazgo religioso que define la forma de ejercicio religioso, a ese liderazgo se le denomina Ayatolá. Incluso como parte de la estructura del gobierno hay una guardia republicana que cuida el tema clerical de la nación”, mencionó el docente de la UNAM.

“El Islam no tiene líderes religiosos de carácter mundial, como otras religiones: catolicismo o budismo. Por ello, los líderes religiosos, locales o nacionales determinan la forma cómo se interpreta el Corán (libro sagrado) o la Sharia (normas de comportamiento social). En el caso de Irán luego de la revolución, el islam se ha aplicado en forma rigurosa y con expresiones de fundamentalismo, es decir, tratar de alcanzar los fundamentos de esa religión”, agregó.

Acerca de las protestas que se desencadenaron en los últimos dos meses, Martínez explicó que todo se derivó del arresto y fallecimiento de Mahsa Amini, así como otras muertes durante los reclamos contra el gobierno.

“Las recientes protestas se deben a que Mahsa Amini (2000, Saqaz) fue detenida el pasado 13 de septiembre por la Policía de la Moral por no llevar bien puesto el velo islámico. La joven entró en coma unas horas después de llegar a la comisaría y tres días más tarde se notificó su fallecimiento.

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Este hecho ha generado protestas públicas ante el exceso de violencia policíaca y la falta de libertad de las mujeres en Irán”, sentenció.