Como ya lo habíamos platicado, hoy comenzaremos hablando sobre el primer atributo que de acuerdo con John Maxwell en su libro “El talento nunca es suficiente”, habla sobre el creer eleva el talento, es decir lo importante que resulta el creérnosla y no a manera de habladuría o de “sentirse mucho”, desde la humildad; es decir, reconociendo que no sabemos todo, pero que definitivamente creemos en nuestro talento.
Ya lo hemos conversado en otras oportunidades, vivimos en una sociedad con cierta idiosincrasia, en donde desde chicos nos han enseñado que creérnosla o decir lo bueno que somos para tal o cual cosa es malo, porque es un signo de arrogancia o de soberbia, sin embargo un servidor siempre ha pensado de una manera diferente, es indispensable reconocer el talento, y es válido decir que somos buenos con alguna habilidad o en algún conocimiento, porque de ahí nace, al menos en mi caso, mi propósito de vida, de poder otorgar ese talento a los que me rodean, pareciera que es muy romántico, pero en realidad es el camino para formar personas plenas y felices.
La falta de confianza en sí mismos, es sin duda alguna el principal obstáculo para alcanzar el éxito, se convierte en una barrera que no permite incluso que busques recursos para desarrollar el talento, y todo comienza desde casa, el cómo fuimos educados, pero sobre todo cómo estamos educando a nuestros hijos. Existen estudios en donde se detalla que en el logro escolar o académico existe una correlación más grande entre la confianza en sí mismos y el logro que entre el coeficiente intelectual y el logro. Dice Maxwell “No conozco tu talento, pero lo que sí sé es esto: no podrás explotarlo a todo su potencial a menos que también creas en ti mismo. El talento por sí solo nunca es suficiente. Si quieres ser el mejor necesitas creer que eres el mejor”. En varias ocasiones este tema hace que las personas no puedan desarrollar al máximo su talento, incluso algunos autores mencionan que logran no más de un 10 por ciento de su potencial, con el solo hecho de no creer en ellos mismos; esto conlleva incluso, a no lograr una promoción laboral o bien a no tomar riesgos. Recuerda que tus creencias controlan todo lo que haces, es por esto por lo que deben de empezar a creer en positivo, es decir no busques lo negativo en las cosas que pasan a tu alrededor y esto de asocia a que creas en tu propósito, es decir creer en lo que estás haciendo, como un camino o mecanismo para llegar a donde te lo propusiste, pero a manera de buscar la trascendencia en esta vida. Esto no se trata de una receta de cocina, pero existen varios ejercicios que puedes llevar a cabo para comenzar a creer en ti, primero identifica tus talentos a título personal y después puedes preguntar a quién te rodea, identifica aquello que te apasiona, crea una imagen personal, es decir qué te identifica, piensa qué oportunidades pudieras tener y trabaja en ellas, y ponte objetivos a corto, mediano y largo plazo a nivel personal y recuerda enfócate en lo verdaderamente importante, te deseo todo el éxito, nos leemos la próxima semana, sígueme en mis redes sociales.