CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Como hace 50 años, cuando ofreció su Cantamisa, el padre franciscano Raúl Trigueros volvió a colocarse ante el altar del templo de San Francisco para ofrecer la homilía y con ella dar gracias a cientos de feligreses que lo han acompañado a través de la oración y seguir el camino como pastor de Cristo.
Ante familiares, amigos, conocidos y feligreses que han seguido el peregrinar del padre Raúl Trigueros, habló sobre su infancia, y refirió momentos de cuando iba a la escuela, pasaba por el Jardín Principal y frente al templo de San Francisco, con la ilusión de ser sacerdote.
También expuso sobre su trabajo en El Paso, Texas, en donde actualmente está a cargo de la parroquia de San Pedro y San Pablo, por lo que dijo que es una coincidencia el hecho de que dio su Cantamisa en el día de San Pedro y San Pablo, y después se fue hacer cargo de la parroquia con el mismo nombre.
Reconoció que volvió a Celaya, a oficiar su misa de 50 años de sacerdote, porque en este municipio están sus raíces, su familia, sus recuerdos de infancia y juventud, un tesoro que lleva en el corazón.
Mandó un saludo a los feligreses de su parroquia en El Paso, Texas, de los Estados Unidos, y comentó que es su segundo hogar, en donde ha tenido el apoyo de los laicos que asisten a misa y formar grupos de pastoral.
Resaltó que su vida sacerdotal le ha dado la paz y tranquilidad por haber y seguir sirviendo a Dios, y que continuará haciéndolo con el mismo fervor y fe como cuando empezó hace 50 años.
Agradeció la asistencia de familiares que llegaron de Querétaro, de la Ciudad de México, de Celaya mismo, entre ellos hermanos y primos, a quienes les dijo que siempre los recuerda en sus oraciones.