CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Necesitamos educarnos en la libertad, como Cristo nos enseña; debemos tomar decisiones aunque nos cueste, por amor, en pleno ejercicio de nuestra libertad; ojalá entendamos qué significa libertad y libertinaje, porque el asesinato del líder sindical y el de muchos otros, así como el robo y sacrilegio ocurrido en templo de la Virgen de San Juan, en Cortazar, son actos de libertinaje y una cobardía, aseveró Monseñor Benjamín Castillo Plascencia, Obispo de la Diócesis de Celaya.
Indicó que el robo o sacrilegio cometido en el templo es signo de que ya no se respeta nada, indicando que, en muchas ocasiones se piensa que este tipo de actos los cometen las personas drogadas, pero no descartó que también los efectúen en su sano juicio, lo cual mencionó, es muy grave.Monseñor Benjamín Castillo Plascencia
El prelado de Celaya lamentó el asesinato de Mauricio García Flores, secretario general del Sindicato de Trabajadores de Instituto de Seguridad y Servicios Sociales del Estado de Guanajuato (ISSEG), así como el sacrilegio que los ladrones realizaron en el templo, en el que robaron varios artículos y destrozaron una imagen.
En cuanto al asesinato del líder sindical, manifestó que al hacer el mal no ejerció su libertad, sino el libertinaje, lo cual dijo: “es una cobardía, porque él tenía un arma y el otro no, ojalá entendamos esto profundamente, no hay que quitar la vida a nadie, porque Dios nos va a cobrar. Necesitamos valorar la libertad con medida, no hay libertad para quitar la vida a alguien, la libertad tienen límites y los límites son los derechos de los demás”.
Resaltó que la libertad bien entendida es para amar, servir, precisando que, el Evangelio habla que Cristo tomó la decisión de subir a Jerusalén para dar la vida por la humanidad, lo cual fue una decisión difícil, pero dentro de su ejercicio de libertad en plenitud.
“A veces tomar decisiones es costoso para nosotros, no es un ejercicio para hacer lo que nos dé la gana y nadie puede decir nada porque soy libre; somos libres, pero debemos ser responsables y si no se ejerce bien la libertad atrae consecuencias; no podemos hacer en nombre de la libertad lo que nos pegue la gana, como estos hechos”.
Comentó que, muchas veces la libertad cuesta porque se debe tomar una decisión y sostenerla, dando como ejemplo la elección de su vocación, así como el que elige casarse, refiriendo que en este segundo caso, el hombre casado ya no podrá estar con otras y debe ejercer su libertad como la planeó, con la persona elegida; mientras que, si decide estar con otras mujeres, lo que estaría ejerciendo es el libertinaje, lo cual no le está permitido.