CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Debido a que debe pagar las terapias de su esposa quien sufrió una embolia hace dos años, juntar para los gastos del hogar, la canasta básica y al no contar con apoyos gubernamentales, el señor Benedicto Ramírez Hernández de 64 años, oriundo de Rincón de Centeno, continúa saliendo a trabajar recolectando y vendiendo fierro, así como otros artículos viejos, pese a que se encuentra en una situación vulnerable de contagio por Covid-19.
Desde hace 20 años me dedico a recolectar fierro viejo, colchones, tambores, televisores y cualquier cosa usada que la gente no necesite, dijo.Benedicto Ramírez Hernández
Expresó que al ser decretada la emergencia sanitaria por el Covid-19 las ganancias pasaron de 250 o 300 pesos al día, a 100 o 200 pesos, hecho que lo tiene angustiado porque tiene muchos gastos, debe dinero y al no haber tenido hijos, no tiene quien lo apoye económicamente, por lo que, la necesidad económica es lo que lo mantiene en las calles sin poder cumplir con la cuarentena.
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“Desde hace 20 años me dedico a recolectar fierro viejo, colchones, tambores, televisores y cualquier cosa usada que la gente no necesite. Hay veces que las personas me los regalan y en otras yo debo comprarlas desde un peso hasta 50 pesos lo más caro, para luego ir a los depósitos a venderlos”.
“Con el Coronavirus ha disminuido el trabajo mucho, no siempre me alcanza para pagar mis deudas, la canasta básica, ni para ir a Juventino Rosas a las terapias de mi esposa. Nosotros vamos y venimos y nos gastamos mucho, por ejemplo, gastamos entre los dos 30 pesos de Rincón de Centeno a Celaya, 120 pesos por los dos para ir a Juventino Rosas, 30 pesos por la consulta y otros 120 y 30 pesos para regresar a nuestra casa, todo esto sin comprar comida ni agua en el camino”.
Finalmente expresó que no está dentro de ningún programa del gobierno federal, estatal, ni municipal, vive al día y a pesar de que sabe que es población en riesgo, no le queda más que salir a trabajar.
