CELAYA, Gto.- (OEM-Informex):- Productores maiceros guanajuatenses estiman que para finales del ciclo Primavera-Verano 2019, se verá mermada la producción de esta gramínea, debido a la presencia de lluvias atípicas. Se calcula que anualmente la producción, en condiciones normales, asciende a 1.3 millones de toneladas de maíz, pero los temporales vienen muy atrasados; va a mermar la producción y se calcula que podría llegar la producción estatal un poco arriba del millón de toneladas.
José Ramírez Arredondo, representante del Sistema Producto Maíz en el estado de Guanajuato, indicó que otro que elemento que confluye en la baja de la producción es la presencia de granizadas y, al inicio del ciclo agrícola, lo fue la falta de humedad; ahora ya ha llovido.
Sobre el tema de los precios, recordó que para la producción de maíz en riego no se aplica a los precios de garantía; esto es solamente para los temporaleros. Ellos alcanzarán alrededor de cinco mil pesos la tonelada. En el caso del riego se basará en lo que se llama el ingreso objetivo y que actualmente anda el precio por tonelada en tres mil 950 pesos, que no se encuentra autorizado aún, expresó al momento de la entrevista.
El ingreso objetivo
El Programa de Ingreso Objetivo, instrumentado desde el 2003, pretende garantizar a los productores nacionales un nivel mínimo de precio, establecido en pesos por tonelada, de manera que, si el precio de mercado está por debajo del Ingreso Objetivo, el gobierno les complementa la diferencia.
En un inicio eran siete productos beneficiados por el programa: maíz, trigo panificable y cristalino, sorgo, algodón, soya y arroz; sin embargo, en el 2011 se incluyeron también cártamo, canola y girasol. Este mismo programa opera en Estados Unidos, como parte de su Ley Agrícola.
Los productores beneficiarios son los que salen al canal comercial, que representan entre el 35% y el 40% de la producción nacional. Desde hace algunos años el programa es exclusivo para aquellos que participan en Agricultura por Contrato, siempre y cuando el esquema esté disponible para su cultivo, como es el caso del maíz, sorgo, trigo y soya.
Para el resto de los productos participantes sólo hay que comprobar la comercialización. A partir de los niveles establecidos en el 2003, el Ingreso de Objetivo ha tenido seis actualizaciones, la última anunciada este mes de abril, aún pendiente de publicación, que respondió a presiones de productores, principalmente de maíz en Sinaloa, que argumentaron mayor costo de insumos para la producción, por lo que el ajuste, en el nivel de Ingreso Objetivo, fue el de la inflación general nacional de 2018 de 4.8%. También se anunció un cambio en cuanto a la participación, de manera que sólo serán elegibles aquellos productores con una superficie máxima de 100 hectáreas de temporal o 50 hectáreas de riego.
Por su parte, el maíz y sorgo han tenido incrementos de 152% y 197% desde el 2003 hasta la fecha durante el periodo.
Encarecimiento de producción. Generaría bajas utilidades
Sobre la producción normal de maíz de riego por hectárea, el representante del Sistema Producto Maíz en el estado de Guanajuato, indicó que es de aproximadamente 12 toneladas, siempre y cuando el clima favorezca. Si no favorece, los rendimientos por hectárea pueden oscilar entre las seis y 7 toneladas por hectárea.
Aunado a esto, se estima que los gastos de inversión por hectárea cultivada de maíz llegan a los 35 mil pesos en riego. Se calcula que en condiciones normales, los cultivos maiceros darían por hectárea utilidades del orden del 25 al 30 por ciento. Pero si la producción se encarece, esta llegaría hasta un 10 por ciento más en la generación de utilidades.
Ante la situación de incertidumbre, de apoyos que se otorgaban los campesinos, dijo que debe efectuarse un análisis profundo. En realidad, tanto en el clima y costos. En los gastos, todo se estima en dólares y el tipo de cambio nos afecta. Ese análisis debe realizarse en costo de producción.
Se nos ha dicho que la oficina de ASERCA que está en Guanajuato ya nos la quieren mover hasta Jalisco, expresó, reconoció que afecta a los campesinos del Bajío.