CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Debido a que la tortilla sube de precio y el maíz no tiene incrementos, Paulo Bañuelos, titular de la Secretaría de Desarrollo Agroalimentario hizo un llamado a la Profeco para que se ponga a trabajar y regule el precio de uno de los alimentos básicos de los mexicanos como es la tortilla.
“Resulta que el maíz está barato, y la tortilla sube y sube, y dicen los tortilleros que no les queda. Entonces a quién le queda el dinero. Hay que ser equitativo en ese tema, porque tenemos que estar viendo que no se quede el recurso únicamente con los tortilleros”, expuso.
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Reconoció el titular de la Secretaría de Agricultura en Guanajuato que siempre al productor le dan en la torre, y eso lo tiene que ver Profeco.
“Que se pongan a trabajar, precisamente el titular de la Profeco que se ponga a trabajar. Que venga y se ensucie los zapatos como nosotros, como la gente del campo. Es importante que estén regulando eso”, enfatizó.
Dijo que todos los instrumentos de medición en los centros de acopio públicos están mal, porque los productores llevan 18 toneladas en su camión, pero resulta que a la hora de pesarlo son 16 toneladas.
“No se vale. Se tiene que estar regulando las humedades, las impurezas. Y nosotros estamos haciendo nuestra parte, estamos capacitando a todos y cada uno de los centros de acopio público de cereales para que estén revisando eso, pero con otra mentalidad, y no de fregar al productor”, expuso.
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Dijo que los productores están organizados, y el precio de kilo de maíz está a siete pesos, pero lo que se tiene que hacer es buscar otras estrategias, por ejemplo, venderles directamente a las tortillerías, pero el grano ya limpio y listo para moler, y así lo pueden pagar hasta 9 o 10 pesos.
“Eso es lo que vamos hacer, con la directora de comercialización. Tenemos que cambiar, capacitar, y se les cambie de idea, y no únicamente estar recibiendo el maíz con alta humedad, impurezas, sino que cada quien haga la parte que corresponde”, explicó.
Cabe señalar que el maíz ha estado subiendo en los últimos dos años, y de 12 o 14 pesos el kilo, actualmente se encuentra en 19 y hasta 20 pesos el kilo.
Al respecto, Bañuelos Rosales expuso que el problema es que a los tortilleros se les ha incrementado el costo de energía, el costo de gas, y no sólo la materia prima.
Reconoció que la energía de luz y gas ha subido en su precio, pero el pueblo, los productores y agrícolas, así como los tortilleros, no puede estar pagando lo que le corresponde al gobierno federal.
“Que el gobierno federal se ponga a trabajar, y que den dinero para las unidades de producción, pero en el tema productivo. Y no hay dinero para los programas de concurrencia, para el uso eficiente del agua. Al rato vamos a estar llorando porque no vamos a tener agua”, concluyó.