CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Ver la cuaresma como clave de conversión, volverse a Dios y a los hermanos, ya que hoy más que nunca urge esa conversión en la línea de restaurar el tejido social tan roto, es el mensaje de Cuaresma que dirige a la comunidad, Monseñor Benjamín Castillo Plascencia, Obispo de la Diócesis de Celaya.
Comprometamos nuestra vida en la superación de tantos problemas, es un momento privilegiado, la Cuaresma. Ojalá entendamos pues, esa Cuaresma vivida en clave de conversión. Como en la primera lectura que se realizó el miércoles de ceniza, nos invita a un cambio fuerte, siempre muy relacionado a la historia
Benjamín Castillo Plascencia
Monseñor Benjamín, indicó que no es una mera costumbre hacer penitencia, ni cumplir con la Cuaresma, además de que encuentra contradicción en el carnaval, ya que muchas veces se despiden de los vicios o los acentúan para luego ver si se convierten.
Hay que ver la Cuaresma en esa clave de conversión, de volvernos a Dios y volvernos a los hermanos, hoy más que nunca urge esa conversión en la línea de restaurar el tejido social tan roto, nos quejamos mucho de él, nos fijamos en el crimen, pero en el fondo está precisamente que muchas veces nos olvidamos de Dios, nos olvidamos también del hermano
Benjamín Castillo Plascencia
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De igual manera, comentó que para reconstruir el tejido social, una de las actitudes que se debe tener es no quedarse en costumbres externas, volverse a la justicia, es decir, hacer lo que Dios quiere, ser justos, tener un cambio de actitud en orden a expresar el amor a Dios y al hermano.
¿Con qué actitudes podemos contribuir para que se reconstruya el tejido social? comenzando con actitudes personales, pero que resuenen en mi familia, invitar a mi familia a que también entre en esa actitud de conversión a Dios y a los demás, vayamos transformando nuestra sociedad, comenzando con relaciones de entendimiento, diálogo, de ir viendo el punto de vista de los demás, de no fijarme en lo que me gusta, sino en cuánto contribuyo a un mundo más justo, fraterno, solidario
Benjamín Castillo Plascencia
Asimismo, indicó que esto debe encaminar a una renovación pascual, en donde Dios llama a participar en su vida, vivirla en esa clave de servicio, entrega, fraternidad, resaltando que el amor a los hermanos se debe manifestar en las obras.