CELAYA, Gto.- Con motivo a la celebración del Grito de Independencia, la ley seca en Celaya se hará efectiva a partir de las 5:00 de la tarde del domingo 15, en los casos de puntos de venta, mientras que para restaurantes será a partir de las 10:00 de la noche; y termina el lunes 16 a las 13:00 horas, en todos los casos.
➡️ Suscríbete a nuestra edición digital
Así lo informó Jorge Gámez Campos, secretario del Ayuntamiento, quien expuso que con motivo a los actos y ceremonias del Grito de Independencia fue aprobada la ley seca, y a partir de hoy sábado se publica en redes sociales del municipio el decreto de dicha disposición.
Precisó que todas las tiendas, centros comerciales de autoservicio, establecimientos, supermercados y licorerías dejarán de vender todo tipo de bebidas alcohólicas a partir de las 5:00 de la tarde de este domingo, por lo que las familias no podrán adquirir dichas bebidas en sus distintas presentaciones durante la tarde noche del domingo, y todavía hasta después de las 13:00 horas del lunes.
“Los dueños y encargados de restaurantes, bares y establecimientos comprendieron la disposición de la ley seca, además que no habrá ninguna otra consideración para el tema de la ley seca”, advirtió.
Detalló que las multas serán dependiendo de la situación, pero van en el orden de las 100 a las 150 UMAS, y comprendió que hay restaurantes y bares que sus mejores ventas son sábado y domingo, precisamente los días en que se establece la ley seca, pero las personas encargadas o dueños de dichos negocios comprenden que es por el bien de la población, para que puedan celebrar en familia los eventos y actos cívicos con motivo al Grito de Independencia, así como el desfile del lunes 16.
Al respecto, el encargado de la licorería de la zona centro, comentó que normalmente la gente se previene para esos días, ya sean cervezas o botellas de licor, las compran durante el sábado o el domingo por la mañana, para así tener sus bebidas y celebrar en casa.
Recomendó que, en caso de beber sea en casa, no manejar en estado de ebriedad, porque ello genera un peligro tanto para la persona que conduce como para terceros.
