CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Los migrantes en Estados Unidos son quienes no han perdido la tradición de mandar una tarjeta postal para desear a los familiares guanajuatenses una feliz Navidad y un próspero Año Nuevo; y debido al alto nivel adquisitivo que tienen los paisanos, suelen mandar dichas postales acompañadas de un paquete, por lo que al día están llegando entre 30 y 40 postales con un regalo.
Así lo informó Fernando Paz Franco, titular de la Oficina Postal de Celaya, quien comentó que en este mes de diciembre se podría estar recibiendo unas mil 200 postales con sus respectivos paquetes, en donde vienen tenis, ropa, muñecos, cosméticos, perfumes, libros, hasta artículos de cocina y de aseo para el hogar.
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Ahondó que se espera que los celayenses también estén enviando entre 200 a 300 postales de los lugares turísticos de Celaya, como el mural de Ocampo en la presidencia municipal, la Bola del Agua, la Columna de la Independencia y el Templo de El Carmen, entre otros.
“A pesar del internet y los teléfonos celulares, en Celaya se mantiene viva la tradición de mandar tarjetas de Navidad y Año Nuevo, así como postales de paisajes turísticos del municipio; pero destacan los migrantes, los que más envían a Celaya”.
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Por su parte, Ramiro Hilarión Chávez González, presidente del Club Filatélico Celaya, comentó que sí se ha venido perdiendo esa tradición que llenaba de gratos recuerdos como era el envío de las tarjetas de Navidad, en las cuales se expresaban los mejores deseos para Navidad y Año Nuevo a familiares y amigos, mismas que adornaban el árbol de Navidad y servía para unirse en la distancia con todas aquellas personas que no se podía abrazar.
“Los invito a no dejar a un lado nuestras tradiciones navideñas, como son la puesta del Nacimiento, salir a pedir posada, cantar los villancicos tradicionales, degustar de un rico ponche, romper la piñata, arrullar al Niño Dios, abrir una bolsa llena de dulces y fruta de aguinaldo, pero lo más importante, el no dejar de reunir a la familia alrededor de una mesa que esté llena de alegría y esperanza por un mejor año”, concluyó.