CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Mientras la mayoría de la población festejó el Año Nuevo, y continuó descansando ayer miércoles, 1 de enero, y disfrutando en familia el recalentado, los elementos de Bomberos de la Estación Pípila y Ciudad Industrial trabajaron toda la noche y la mañana, cumpliendo su deber en los volantes de las máquinas y atentos para el rescate de personas en cualquier incendio.
Reconoció que sí se extraña a la familia, padres y hermanos, pero la mejor manera de festejar la Navidad o el Año Nuevo, es trabajando para los demás; y el controlar el fuego y salvar vidas ese es su mejor pago.
Laura Cabrera
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Jesús Santos Cervantes, así como Laura Cabrera, Saúl Martínez, Adrián Fernández y Miguel Martínez, fueron un equipo que tanto en Navidad como en Año Nuevo dejaron a sus familias en casa para concentrarse en las estaciones de Bomberos, en donde llegaron a realizar casi 20 servicios por turno en cada uno de estos dos días.
Santos Cervantes llegó a Bomberos a los 12 años de edad, y debido a su edad sólo se le permitía aprender todo lo de radio operador, pero también iba aprendiendo sobre presiones de agua y el uso de las mangueras; pero a los 18 años de edad fue nombrado formalmente bombero.
“Ya en otros años he estado en Navidad y en Año Nuevo, que son las noches más raras, porque sí se extraña a la familia, pero en mi caso, mi esposa y mi hijo comprenden mi trabajo, así como mis padres y hermanos, y saben que es un acto noble cumplir con mi misión de cuidar a la gente, controlando incendios”, dijo tras concluir su turno de la noche de Año Nuevo.
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Por su parte, Laura Cabrera, con cinco años en Bomberos, dijo que su esposo también es bombero, y mientras él se encuentra en una estación, ella se encuentra en otra, ambos cumpliendo con su misión.
Para Saúl Martínez, Adrián Fernández y Miguel Martínez, también el trabajo es la mejor recompensa, y aseguraron todos que no importa pasar la Noche Buena, la Navidad y el Año Nuevo en la estación de Bomberos, porque entre todos los compañeros también son familia.
