Recordaron a sus muertos

Llevaron flores, comida y música a los panteones, más de 50 mil celayenses

Alma Bernabé y Ángel Galindo

  · viernes 2 de noviembre de 2018

Miles de personas visitaron a sus familiares en el panteón. / Foto: Alma Bernabé

CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Entre flores, comida y música fue como los más de 81 mil celayenses que acudieron a los distintos panteones celebraron y recordaron a sus difuntos el Día de Muertos; mientras que la Cruz Roja y Protección Civil reportaron cero incidencias durante los dos días festivos.


Nos quedamos buen rato con ellos, tenemos que estar unidos en este día que es especial porque mis papas fueron personas que amamos mucho y hoy en este día tan especial no podíamos faltar

María Guadalupe Ledesma. Visita a sus difuntos padres.


Desde el jueves los panteones Norte, Sur y el de Villas de la Esperanza comenzaron a llenarse de personas que acudieron para llevarles una ofrenda a los niños y jóvenes que perdieron la vida.

Las tumbas de los niños fueron adornadas con juguetes, flores y querubines, quienes se dice que son quienes los cuidan y guían hasta el cielo.

Desde temprana hora del viernes, miles de personas comenzaron a instalarse en las tumbas de sus difuntos para comenzar a limpiarlas y posteriormente decorarlas con flores de cempasúchil, papel picado y aserrín.

Tal es el caso de María Guadalupe Ledesma quien lleva 26 años acudiendo a visitar la tumba de su papá y este año también visitó por primera vez a su mamá.

“Hoy es el día que venimos a visitar a nuestros muertos, es un día muy especial, pero tenemos que estar aquí todos unidos como familia”. María acude junto con sus hijas y sus nietos, quienes le ayudan a llevar flores y pintura para decorar la tumba de sus padres.

“Nos quedamos buen rato con ellos, tenemos que estar unidos en este día que es especial porque mis papas fueron personas que amamos mucho y hoy en este día tan especial no podíamos faltar, mientras tengamos vida vamos a seguir viniendo porque si no ellos se sentirían tristes si no viniéramos a visitarlos”.

De la misma forma, la familia Arriaga se reúne para pasar el Día de Muertos con el jefe de la familia, recordando las tardes en las que se reunían a comer en familia. “Desde hace ocho años venimos a ver a mi papá y a un sobrino, tratamos de estar aquí desde temprano y ya retirarnos noche porque no todo el tiempo nos juntamos toda la familia como en este día”.

La señora Anel le reza y platica con su esposo, ya que es el día del año en donde puede venir a visitarlo, ya que los padecimientos que tiene en las piernas no le permiten acudir más días. “Yo le digo que esté en calma, que no esté ansioso porque para allá vamos a acompañarlo. Ya se sabe que ellos ya no oyen ni sienten, pero es la costumbre y la tradición de siempre venir a visitarlos y acompañarlos”.

Durante el año los siete hijos del señor Arriaga acuden para saludarlo o llevarle flores, sin embargo, el Día de Muertos acuden durante todo el día los hijos, nietos y demás familiares para visitarlo.

“Ellos quieren ponerle una lápida, pero yo les digo que se esperen porque a mí ya me falta poquito para juntarme con mi esposo y ahora si ya van a poder ponerle lo que quieran”.