El grupo parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados exigió que la Auditoría Superior de la Federación emprenda una auditoría a la comisión Nacional del Agua (Conagua) por lo que llamó “el fracaso al mantenimiento del Sistema Cutzamala” y en el que se invirtieron 500 millones de pesos; gasto que presume Morena, es una erogación con olor a corrupción, toda vez señala que hay expertos que consideran que fue excesivo el costo del ducto alterno que se instaló y falló en el proceso de mantenimiento.
La diputada Leticia Díaz Aguilar a nombre del grupo parlamentario de Morena, señaló que, ante el fracaso de los trabajos de mantenimiento del Sistema Cutzamala, mismo que tiene una semana de retraso derivado de una falla por la instalación del ducto alterno que se pretendió instalar, y por ello, pedirá a la ASF una auditoría especial a Conagua que aclare la inversión en la compra del dicho ducto, “y que finalmente no sirvió, por lo que esta compra huele a corrupción”, dijo.
“Cuando decimos que huele a corrupción es porque de acuerdo con opiniones de algunos técnicos, es excesivo el precio de 500 millones de pesos en que se adquirió la pieza que sería sustituida, por lo que es necesario determinar responsabilidades ya sea de CONAGUA o las empresas contratadas para realizar los trabajos, porque a todas luces está plagada de irregularidades”, agregó.
La legisladora de Morena advirtió que esta solicitud a la ASF es principalmente porque está afectando directamente a más de 4 millones de habitantes de la Ciudad de México y genera gastos al gobierno y 13 alcaldías locales, así como 12 municipios del Estado de México.
La también secretaria de la Comisión de Recursos Hidráulicos, Agua Potable y Saneamiento advirtió que debe aclararse el procedimiento de adquisición y colocación de la denominada K invertida. “No podemos seguir tolerando casos de corrupción, como éste, o como otros añejos como el Túnel Emisor Oriente.
Se suponía que estos trabajos fueron programados con antelación, por lo que no es explicable la terrible falla que dejó sin el vital líquido a millones de personas y generó millonarias pérdidas a pequeños empresarios y comerciantes que tuvieron que cerrar sus negocios por la falta del vital líquido”, agregó.
Con esta fallida obra, el gobierno peñista concluye un sexenio de saqueos a la nación amparados en el tema del agua, como el haber concesionado la explotación de varias reservas hidrológicas y haber decretado la suspensión de vedas, para beneficio de las grandes empresas.