/ domingo 10 de octubre de 2021

Dependencia O Tecnología

El pasado martes el mundo se paralizó sin el uso de las redes sociales; casi 7 horas en las que nos vimos afectados en distintas formas; la caída global de servicios de la empresa Facebook afectó a miles de personas al quedarse incomunicadas provocando un gran impacto en la bolsa, ocasionando grandes pérdidas en empresas y en miles de pequeños negocios que dependen del servicio de WhatsApp.

Circunstancia que nos hace flexionar sobre la dependencia que hemos desarrollado en el uso de tecnología y particularmente en la manera en que nos comunicamos, tanto en nuestra vida personal como laboral, haciendo de estas redes nuestro principal canal de comunicación. De acuerdo al Inegi, las principales actividades que realizan los usuarios de Internet en 2020 son comunicarse (93.8%), buscar información (91.0%) y acceder a redes sociales (89.0%). Escenario que pudimos confirmar al dejarnos inmovilizados ante tal situación, y obligando a muchos de nosotros a buscar nuevas alternativas de comunicación como Signal y Telegram, compañías que lograron un gran número de nuevos usuarios en sus plataformas; y en otros casos regresar a la comunicación por SMS o teléfono convencional con la finalidad de no perder la comunicación en ningún momento.

Si bien es fundamental una buena comunicación en nuestras vidas, debemos de analizar hasta dónde estamos evolucionando correctamente con la tecnología y cuándo ya hemos desarrollado una dependencia, identificando qué aspectos pueden interferir en la forma de relacionarnos afectando nuestro comportamiento emocional. Por otro lado, debemos de analizar que este suceso encendió las alertas de lo vulnerables que son las plataformas y lo expuestos que estamos a los ataques cibernéticos, siendo medios en donde se maneja información que puede comprometer nuestros negocios, clientes, proveedores y familia.

Lo que nos lleva a reflexionar en la importancia de un uso responsable de las redes, tanto en lo personal como en lo laboral, ¿cuántos de nosotros contestamos mensajes a colegas, clientes, proveedores fuera de un horario laboral? No dando a nuestros organismos el descanso necesario haciendo uso excesivo de las redes de comunicación y en muchas ocasiones interfiriendo en nuestras actividades en el entorno familiar. Lo crucial es no olvidar que tenemos el derecho de desconexión para bien de nuestro cuerpo y estado emocional.

Por lo anterior, me permito dejar algunas pequeñas practicas sencillas para evitar que un uso excesivo de las redes sociales y evitar así una dependencia:

*Abstenerse del uso del celular en momentos clave del día (desayuno, comida o cena).

*Establecer un tiempo mínimo de 15 minutos entre conexión y conexión.

*Deshabilitar las notificaciones automáticas.

*No utilizar el celular ni como reloj ni como despertador para evitar la tentación.

*Establecer momentos en el día para hacer actividades completamente desconectadas, practicar deporte, leer o escuchar música.

*Eliminar aplicaciones y abandonar grupos de WhatsApp prescindibles.

Fuente: https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/boletines/2021/OtrTemEcon/ENDUTIH_2020.pdf

Lilyat55@gmail.com

Facebook: Liliana Arredondo

El pasado martes el mundo se paralizó sin el uso de las redes sociales; casi 7 horas en las que nos vimos afectados en distintas formas; la caída global de servicios de la empresa Facebook afectó a miles de personas al quedarse incomunicadas provocando un gran impacto en la bolsa, ocasionando grandes pérdidas en empresas y en miles de pequeños negocios que dependen del servicio de WhatsApp.

Circunstancia que nos hace flexionar sobre la dependencia que hemos desarrollado en el uso de tecnología y particularmente en la manera en que nos comunicamos, tanto en nuestra vida personal como laboral, haciendo de estas redes nuestro principal canal de comunicación. De acuerdo al Inegi, las principales actividades que realizan los usuarios de Internet en 2020 son comunicarse (93.8%), buscar información (91.0%) y acceder a redes sociales (89.0%). Escenario que pudimos confirmar al dejarnos inmovilizados ante tal situación, y obligando a muchos de nosotros a buscar nuevas alternativas de comunicación como Signal y Telegram, compañías que lograron un gran número de nuevos usuarios en sus plataformas; y en otros casos regresar a la comunicación por SMS o teléfono convencional con la finalidad de no perder la comunicación en ningún momento.

Si bien es fundamental una buena comunicación en nuestras vidas, debemos de analizar hasta dónde estamos evolucionando correctamente con la tecnología y cuándo ya hemos desarrollado una dependencia, identificando qué aspectos pueden interferir en la forma de relacionarnos afectando nuestro comportamiento emocional. Por otro lado, debemos de analizar que este suceso encendió las alertas de lo vulnerables que son las plataformas y lo expuestos que estamos a los ataques cibernéticos, siendo medios en donde se maneja información que puede comprometer nuestros negocios, clientes, proveedores y familia.

Lo que nos lleva a reflexionar en la importancia de un uso responsable de las redes, tanto en lo personal como en lo laboral, ¿cuántos de nosotros contestamos mensajes a colegas, clientes, proveedores fuera de un horario laboral? No dando a nuestros organismos el descanso necesario haciendo uso excesivo de las redes de comunicación y en muchas ocasiones interfiriendo en nuestras actividades en el entorno familiar. Lo crucial es no olvidar que tenemos el derecho de desconexión para bien de nuestro cuerpo y estado emocional.

Por lo anterior, me permito dejar algunas pequeñas practicas sencillas para evitar que un uso excesivo de las redes sociales y evitar así una dependencia:

*Abstenerse del uso del celular en momentos clave del día (desayuno, comida o cena).

*Establecer un tiempo mínimo de 15 minutos entre conexión y conexión.

*Deshabilitar las notificaciones automáticas.

*No utilizar el celular ni como reloj ni como despertador para evitar la tentación.

*Establecer momentos en el día para hacer actividades completamente desconectadas, practicar deporte, leer o escuchar música.

*Eliminar aplicaciones y abandonar grupos de WhatsApp prescindibles.

Fuente: https://www.inegi.org.mx/contenidos/saladeprensa/boletines/2021/OtrTemEcon/ENDUTIH_2020.pdf

Lilyat55@gmail.com

Facebook: Liliana Arredondo