Sanjuana, es el nombre de miedo...
Los tengo grabados a todos… la frase lapidaria que la, hasta hoy, directora de la agencia de noticias Notimex dijo ante sus colegas de los medios de comunicación a propósito de la manera como se resolvería la crisis provocada por la decisión del presidente de cerrar la agencia de noticias.
Le explico un poco, estimado lector; desde que inició el actual sexenio, uno de los primeros conflictos internos al gobierno mexicano se generó en la agencia de noticias mexicana NOTIMEX, la agencia que se fundó a propósito de los juegos olímpicos de 1968 para dar servicios informativos al mundo sobre los acontecimientos de aquel magnífico momento del deporte en el mundo. Se puede decir fácil, son 55 años de historia, siempre dependió de la Secretaría de Gobernación, después de una reforma de sus estatutos en 2006 se convirtió en la agencia de noticias del estado mexicano, es decir, hacía lo mismo, pero con la autonomía que le permite una junta de gobierno integrada por representantes del estado mexicano... ya no solo del enlace con el secretario de gobernación en turno.
La agencia ha estado ahí, haciendo periodismo desde el gobierno mexicano, han pasado 18 directores en más de cincuenta años, dudo que la señora Martínez haya pensado en ser la encargada de liquidar la institución, una periodista regiomontana apasionada del periodismo de investigación, con una larga lista de reconocimientos tomó posesión de la agencia en marzo de 2019 y en febrero de 2020 estalló la huelga en protesta por los cambios al contrato colectivo propuestos por la directora Sanjuana Martínez.
Para febrero de 2024, la agencia y su crisis ha pasado a segundo plano, ya no es importante para los actores de la crisis, si se cierra en definitiva esta agencia de noticias; después de cuatro años de huelga, con emplazamiento y toma de nota por la Secretaría del Trabajo, con el desaliento de los trabajadores que se quedaron sin sus fuentes de empleo, con la polémica al día, porque la agencia de noticias dejó de ser el referente de la opinión gubernamental sobre los acontecimientos que reportaron sus periodistas.
Sanjuana era el prototipo de periodista deseable en la mente del presidente, no se cansó de elogiar su historia como periodista, como profesional de la comunicación, había quitado de en medio una piedra que estorbaba a los contenidos de los disparates de todas las mañanas.
Por fin, después de una faena de cuatro años se dieron las instrucciones para que se liquidaran a los empleados, terminar la relación laboral y finiquitar la relación con la respectiva liquidación en dinero a cada uno de los trabajadores.
Fueron convocados en la sede de la Secretaría del Trabajo y ante la generosa liquidación y despejado todo obstáculo para evitar que aquello tuviera algún efecto negativo en el proceso, se encontraron ante los documentos de los finiquitos con una “pequeña” salvedad: la liquidación considera la generosa donación de los trabajadores por el equivalente del 20% de sus respectivas liquidaciones para “colaborar” en los gastos de campaña de la señora Claudia Sheinbaum.
Involucrados en el protocolo de este “generoso donativo” están el secretario del trabajo, la secretaria de gobernación y los funcionarios respectivos para hacer las gestiones de entrega de finiquitos y descuento de los donativos (¿se imaginará estimado lector, que después de cuatro años de huelga, los trabajadores estarían deseosos de donar a la campaña de la señora Sheinbaum?)
Amenazada de muerte, como ella misma ha declarado, la señora Sanjuana confrontó a su contraparte diciendo la frase lapidaria: los tengo grabados a todos... parece que no le creyeron y dio a conocer el primero de los audios donde el comunicólogo del presidente, Jesús Ramírez, está dando instrucciones de cómo proceder en el proceso de liquidación y ofreciendo que él se encarga de arreglar el expediente y de ayudarle con la Fiscalía… así como se escribe, así se escucha la grabación.
Repentinamente se hizo el silencio, las tímidas declaraciones de la candidata oficialista fue lo último que se escuchó…. Pero resulta que hay grabaciones por todos lados, el presidente activó todos los recursos para investigar a sus enemigos, de adentro y de afuera del sistema político mexicano. Por qué habría de extrañarnos que reaparezcan los documentos de guacamaya, más grabaciones de Loret y de otros, lo que está por venir parece de pronóstico reservado…
Si Sanjuana dice que tiene una fonoteca y que les podría costar una candidata… prefiero pensar que tiene una fonoteca y que seguirán saliendo audios y videos que corroboran que estamos ante el gobierno más corrupto de México, que no nos debería de extrañar y que la descomposición que viene hacia dentro del oficialismo gubernamental será un factor clave para cambiar el sentido de los votos de quienes aún creen que pueden seguir con la estrategia populista, la del engaño, la de miento; luego existo.
El caso Notimex es solo una más de las secuelas que dejará el clan donde se ha saqueado tanto como su imaginación ha dado y han destrozado tanto como han tenido a su alcance en cualquier área de las responsabilidades constitucionales que le obligan al jefe del estado en turno.
No estamos hablando de conflictos u objeciones cede conciencia, simplemente estamos ante un clan de bandidos dispuestos a “cargar” con todo lo que se pueda y desde luego, seguir en el proceso de una dictadura populista.
Hasta la próxima en PROSPECTIVA.
José Gerardo Mosqueda Martínez, Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato
gmg@gerardomosqueda.com.mx
