NO ES TIEMPO DE APATÍA
Arrancaron las campañas presidenciales y la cuenta regresiva para los relevos en las estructuras gubernamentales del país. Un asunto nada fácil de digerir si asumimos que la participación del presidente López es como un cuarto contrincante en la competencia presidencial.
Al inquilino del palacio nacional se le terminó el tiempo de su delirante y desconectada de la realidad, gestión presidencial. Se termina la fantasía de una transformación que nunca empezó pero que la estrategia de medios y redes del presidente ha logrado mantener en la memoria de los mexicanos, especialmente los que hoy están en las listas de los beneficiarios de los programas de gasto social.
Solo le quedan siete meses menos unos días, pero la atención de los mexicanos ya se encuentra en los contén-dientes del proceso electoral, es verdad, por más que le cueste trabajo aceptarlo... el presidente no estará en la boleta el día de las elecciones, pero en la estrategia de su partido siguen trabajando para que “la sombra de su caudillo” pese en el consciente y el subconsciente de los mexicanos en el momento de la elección.
La candidata del presidente está ocupada de comunicar que todo lo que ofrece a los mexicanos es continuar con lo que viene haciendo el presidente y no parece haber poder humano que le convenza que eso le está llevando a perder la elección, pero están en la lógica de los volúmenes de dinero que se está repartiendo, incluso por adelantado, lo que corresponde a los meses de duración de las campañas.
Hay pocos instrumentos confiables para saber si esta afirmación, la de la compra de voluntades para el día de la elección, surtirá el efecto deseado de garantizar la votación abrumadora en favor de la señora Sheinbaum, el hecho es que las mediciones de campo que existen dan razón de una diferencia de 17% de intención de voto (si hoy fuera la elección). Desde luego que es una estimación y como tal conviene tomarla. (En alguna colaboración posterior estaremos compartiendo una reflexión respecto a los instrumentos de medición del proceso electoral.)
Respecto al presidente López solo se puede decir que pierde aceptación y bajan sus calificaciones de aprobación cada semana y él desearía que tuviera el mayor número de polémicas posible... porque eso le daría justificación de seguir hablando del proceso, los candidatos, los contenidos de los medios que están hartos de transmitir noticias de un presidente que se distingue por sus discursos de odio a todo el que no piensa como él (afortunadamente cada día hay más mexicanos que expresan su hartazgo de los mensajes del presidente...) El problema entre ellos, los seguidores del proyecto del Morena, es que tampoco encuentran cómo decirle al presidente que ya deje de hablar de sí mismo y todos sus traumas con los que se victimiza.
Entonces pone a hablar a sus fanáticos seguidores, algunos miembros de su gabinete y otros cumpliendo las tareas de confrontación con los medios para diluir el daño que se deriva de sus necedades... como el caso de la titular del organismo regulador de las políticas de la ciencia y la tecnología de nuestro país, la Dra. Álvarez Buylla que acaba de presentar su renuncia a la Academia Mexicana de Ciencias porque “la academia es adversaria de la cuarta transformación…” (sic)
Pero por más barbaridades que escuchemos de los candidatos, por más disparates que nos compartan los estrategas de las campañas lo realmente importante es acudir a votar, no es tiempo de indiferencia, es verdad que un voto podría pasar desapercibido... pero no es un voto, podría ser el 30% de los casi cien millones de mexicanos con derecho a votar y con ello elegir a sus representantes en los poderes legislativos y en los poderes ejecutivos del país.
VOTAS y tienes la opción de cambiar la ruta de desastre que ha tomado la nación mexicana, tienes la oportunidad de contribuir a la recuperación del sistema de salud, desmantelado y decadente porque de ahí se han tomado los recursos para pagar el costo de los programas de gasto social, lamentablemente no hay cómo curar a los mexicanos que acuden al sector salud.
VOTAS y tienes la posibilidad de cambiar de dirección el miedo que tiene los mexicanos porque la seguridad es un desastre, como dice el senador Martínez: regresarles el miedo a los delincuentes.
VOTAS y es probable que cambien las prioridades en el sistema educativo que está más dañado que nunca pero que no tienen interés (el actual gobierno) de proponer una estrategia para reinsertar al sistema educativo a los niños y jóvenes que no fueron atendidos en la pandemia.
Es tiempo de PARTICIPAR en una elección donde se estará decidiendo la identidad del estado: la continuidad en el desastre (se elige a quien ofrece la continuidad), la propuesta del morena o el reencuentro con la democracia donde la propuesta es el México del progreso, de la libertad, de la democracia.
Cuando ya están en morena la gran mayoría de los que representaron al viejo sistema político mexicano, la vieja izquierda añorante de poder, los viejos políticos añorantes del pragmatismo pero todos con el común denominador de ser cómplices de la corrupción gubernamental que tanto daño han hecho al país, no hace falta convocarlos más, con las nuevas generación de políticos con vocación democrática la patria mexicana tiene una nueva oportunidad de reconstruir las estructuras que se han desmantelado para la vida democrática de los mexicanos.
Es tiempo de participar. SÍ VOTAS, MÉXICO SERÁ UN PAÍS DEMOCRÁTICO.
Hasta la próxima en PROSPECTIVA.
José Gerardo Mosqueda Martínez, Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato
gmg@gerardomosqueda.com.mx
