CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Como propuesta de las asociaciones animalistas y con la finalidad de recordar con cariño a las mascotas que ya murieron, este 27 de octubre fueron colocados algunos altares de muertos en su honor, sin embargo, a decir del padre Israel Hernández Carmona, Vicario de Pastoral de la Diócesis de Celaya, aunque esta nueva tradición no la promueve la Iglesia, sí la respeta y recomienda no realizar los rituales que algunas personas sugieren, ya que pueden caer en la superstición.
Esta tradición surgió en 2019 cuando una empresa de servicios funerarios para mascotas propuso celebrar la fecha. Las asociaciones animalistas aceptaron la idea y fue que se decidió colocar una ofrenda en el altar de muertos para recordarlos.
Y es que recuerdan, las tradiciones mexicanas reconocen desde hace siglos, de manera especial, a los perros Xoloitzcuintle y los Xólotl como los animales que acompañan las almas de las personas hacia su descanso eterno.
Sobre este tema, el padre Israel Hernández mencionó que esta tradición o costumbre se va fijando en el sentir de las personas, ya que las mascotas se convierten en una parte importante para la familia, sobre todo, para aquellas que se encuentran en soledad, por lo que suelen significarlo todo.
“La Iglesia celebra la conmemoración de los fieles difuntos que son por las personas que han sido redimidas y de las cuáles se espera la resurrección como se profesa en el credo, porque tienen un nivel de dignidad y semejanza de Dios”.
“El resto de la creación que son las plantas y animales tienen otra forma de trascender, por lo tanto, esta tradición no la promueve como tal la Iglesia, pero la respeta, se le da su lugar al sentir de las personas, sus sentimientos, su posición referente al lugar que ocupan las mascotas delante de ellas, pero no se promueve esa tradición de ponerles un altar”.
En las redes sociales se puede observar que incluso existen rituales que deben realizarse para honrar a las mascotas que ya no se encuentran en este mundo, ante esta situación, el sacerdote recomienda no hacerlas, ya que las personas pueden caer en la superstición, la cual se superpone al poder de Dios, “hay que tener cuidado con ese tipo de prácticas cuando se ocupan para algún tipo de manifestación, porque no es cristiana, ni católica”.
Mencionó que las tradiciones que dan sentido a la fe y la dignidad a la vida humana se celebran el 1 de noviembre en que se recuerda a los santos y el 2 de noviembre a los fieles difuntos, sin embargo, dijo:
“Si para alguien tiene sentido en su imaginario, en sus sentimientos, lo puede hacer sin problema, algunos piden intenciones en las misas por sus mascotas y se respeta porque lo son todo para ellas, a lo mejor no han tenido el apoyo o cariño de una persona, pero sí lo han recibido de su mascota”.
Finalmente, reiteró que, aunque la iglesia no promueve esta nueva tradición, la ve con respeto por algunas personas en particular, debido a que las mascotas son sus únicas compañeras de vida.