CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Previo a la erección canónica de la Diócesis de Celaya, un 17 de marzo de 1973 fue erigida la Parroquia de la Asunción por parte del entonces obispo de Morelia, Estanislao Alcaraz Figueroa. Este año se celebra el 50 aniversario y dentro de este contexto el padre Crisanto Rico Argote, párroco de dicha Parroquia, busca avanzar en la dignificación de este espacio icónico con la rehabilitación del frente del templo, la creación de una bodega pequeña, un confesionario, un pequeño nicho que, de vista y presentación al atrio y al templo mismo, además de que continuará impulsando la restauración del mural de la Fundación.
El sacerdote mencionó que en estos 50 años la parroquia ha tenido 10 párrocos, de los cuales cinco ya fallecieron. “Tenemos un detalle muy especial, el primer párroco fue el ahora cardenal Alberto Suárez Inda”, el cual acudió este domingo al lugar para concelebrar la sagrada eucaristía para comenzar con la celebración de este medio siglo, donde en su mensaje principal pidió a los fieles “llenarse de esa agua viva que es Jesús, para poder llevar amor, esperanza y la buena nueva a todos quienes lo necesitan”.
En los últimos años, recordó el padre Crisanto, se han realizado los trabajos de restauración en la capilla del Señor de la Clemencia en su primera y segunda etapa, además de que se ha restaurado la Columna de la Fundación, todo esto en conjunto con las administraciones de Celaya y el gobierno del estado.
“También se va a dignificar el frente del templo quitando el techo que está de estructura y haciéndolo bien con unos arcos, en la parte de afuera se hará una bodega pequeña, el confesionario y un pequeño nicho que le de vista y presentación al atrio y al templo mismo. Además, se va a impulsar la restauración del Mural de la Fundación que se encuentra en la parte del jardín”.
Cabe señalar que el atrio y donde están los dos templos es propiedad federal, mientras que la parte del jardín pertenece a la parroquia, esto lo aclaró ya que dijo, son aspectos que a veces la gente no alcanza a distinguir.
“La capilla del Señor de la Clemencia y la Columna de la Fundación están catalogados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Para intervenir y construir se tiene la autorización de las instancias correspondientes, en este caso la arquitecta Ana Paulina es la responsable y con ella nos estamos acompañando para buscar otras estancias y recursos, porque éstos se requieren para lo que todavía necesitamos”.
LA HISTORIA Y LA FE DE LOS CELAYENSES NACIERON JUNTAS
En la parte espiritual mencionó que “somos afortunados de tener toda una historia, es decir, si queremos hablar de la historia de Celaya y la fe, prácticamente nacieron juntas. Antes de fundarse la Villa de Nuestra Señora de la Concepción de Zalaya se considera que en este lugar se encontraba el pueblo de Nuestra Señora de la Asunción desde 1560 o 1562 aproximadamente, casi 10 años antes de fundarse y desde ese momento está la devoción a la Virgen María en su asunción”.
El punto de referencia de fe y espiritualidad, dijo, se encuentra en el Barrio del Zapote con el Señor de la Clemencia, que por más de tres siglos se llamó el Señor del Zapote, debido a que la imagen de Cristo fue encontrada debajo de un zapote entre San Miguel de Allende y Comonfort, se entiende que, en la parte del río, pero tiempo después se le cambió el nombre.
“Es una imagen de mucha devoción en la parroquia y la ciudad de Celaya, dentro de este aniversario hemos buscado promover la devoción de la Virgen María y el Señor de la Clemencia”. Por otro lado, refirió que en la parte apostólica cuentan con grupos y movimientos comprometidos en todas las pastorales de profética, litúrgica, social, familia, comunicación, jóvenes, entre otras y, aunque es una parroquia pequeña en la cuestión del territorio y población, aseguró que es muy rica y diversa.
Recordó que el 10 de abril de 1973 a las 18:00 horas y en una solemnidad se leyó públicamente en el templo de la Asunción el decreto de erección de la parroquia y se hizo el nombramiento del Vicario Ecónomo, el padre Alberto Suárez Inda.
ES UNA BENDICIÓN CELEBRAR 50 AÑOS
“Para nosotros es una bendición poder celebrar los 50 años, ya que implica reconocer el esfuerzo de aquellos que iniciaron y continuaron el proyecto de la parroquia, sin duda, es una gran bendición y un punto de encuentro para los fieles. Aquí en esta comunidad tenemos dos templos pequeños y tenemos un atrio bastante amplio que nos permite realizar las actividades aquí mismo”.
Para celebrar este aniversario el jueves 16 se realizó una misa a las 19:00 horas y al finalizar se llevó a cabo una procesión con el Santísimo Sacramento, con quien hizo una bendición especial. Para el viernes a las 7:00 horas habrá una celebración eucarística y un Te Deum.
A las 12:00 horas se celebrarán primeras comuniones, de 14:00 a 17:00 horas se presentará “Voces Versátiles”, a las 17:00 horas se presentarán danzas artísticas y folclóricas en el atrio de la parroquia y a las 16:00 horas se rezará el Santo Rosario.
A las 19:00 horas se concelebrará la eucaristía encabezada por el Obispo de la Diócesis de Celaya, Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, “esta misa es muy especial, porque vienen algunos sacerdotes para acompañarnos, entre ellos los que han estado como párrocos”, al finalizar, habrá una cena, mientras ameniza el “Mariachi Comonfort”.
El padre Crisanto destacó que “aquí las fiestas son con mucha discreción, no hay fuegos artificiales, no hay grupos musicales de renombre, siempre se busca acompañar a la comunidad y en esa alegría de la fe poder celebrar nuestras fiestas religiosas, de manera especial, este 50 aniversario”.
“De manera personal, puedo agradecer a los que estuvieron antes, a los párrocos, vicarios, a los sacerdotes que han prestado algún servicio en la parroquia, a los consagrados, religiosas y a los laicos por su compromiso y por ir construyendo esta comunidad en la parte espiritual, en las estructuras de grupos y en la parte material. Ahora a nosotros nos toca recoger todos los frutos de esos esfuerzos”.
Aunque no hay registro de que se haya aparecido la Virgen de la Asunción en la zona, mencionó que la devoción a ella es muy antigua, más de 50 años, sin embargo, lo que pudo asegurar es que “Celaya es un pueblo mariano y prueba de ello es que cuando se fundó la ciudad fue encomendada a la Purísima Concepción”.
