SALVATIERRA, Gto.- Se requiere un orden para evitar que continué la sobreexplotación y contaminación del yacimiento natural de agua que se encuentra en la entrada a la colonia Victoria Malváez, lugar conocido como La Angostura, debido a que no se tiene un control ni registro de las especies en peligro que ahí habitan.

➡️Suscríbete a nuestra edición digital

El director del área de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, arquitecto Everardo Sámano informó que el ojo de agua de La Angostura es muy antiguo, el cual perteneció a la ex hacienda de Guadalupe, siendo actualmente propiedad Federal.

“Muchas personas acuden a cargar agua con pipas, camionetas con tinacos o tambos, mientras que algunos otros acuden a bañarse o a lavar su ropa y vehículos mientras que algunas otras personas lo toman como centro de diversión para nadar y convivir con familia”, comentó.

Mencionó que en cierto punto el agua que emerge del subsuelo es aprovechada por las pipas que cargan el agua y la llevan a colonias y comunidades donde carecen de la red de agua, además de que muchas familias utilizan como balneario, sin embargo, se requiere un orden y control para evitar la contaminación del agua y preservar la vida acuática que brinda el manantial.

“Cabe mencionar que no se tiene un registro de la fauna que habita el yacimiento natural de agua, a simple vista podemos observar que algunas especies de peces se encuentran ahí nadando, asimismo se han observado tortugas y cangrejos, pero estaría bien realizar un estudio para proteger la vida acuática”, refirió.

Everardo Sámano dijo que la mayor parte del agua que emerge de manera natural no es aprovechable porque se va hacia un canal sin tener un destino ya que no se ha conformado un estudio para tener un provecho como tal del agua limpia que pudiera tener un mejor aprovechamiento para el municipio y las familias.

“En algunas ocasiones se había pensado la manera de integrarlos a la red municipal de agua ya que puede servir de respaldo cuando hay carencia del vital líquido en el municipio, sin embargo no se han hecho los proyectos pertinentes ni se han hecho estudios como tal”, expresó el director.

Refirió que se espera que no suceda lo que ha pasado en otros casos en Salvatierra que terminan por secarse los yacimientos naturales como el caso de los pocitos en la colonia Álvaro Obregón que dotaban de agua a decenas de familias hace algunos años.

Finalmente explicó que actualmente no se sabe con exactitud a quién le pertenece esa propiedad ya que durante muchos años se han peleado entre las colonias Victoria Malváez, el señor Pablo Rosillo y los ejidatarios de Urireo, sin embargo quien pudiera tener el control es CONAGUA debido a que manejan todas las aguas subterráneas y superficiales.