CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Agrupaciones campesinas están haciendo frente común para exigir el reconocimiento y respeto de las organizaciones de la sociedad civil por parte del gobierno federal y sus instituciones; aún no entran en vigor los acuerdos del TEC-MEC y la firma trae ya los efectos de baja en los precios de los granos que se producen en México, como lo es el caso del maíz, señalaron Erasto Patiño Soto y Ma. Cristina Herrera Ramírez, líderes estatales de la CONSUCC y AMIDA.
Los representantes campesinos indicaron que lo anterior es de la mayor importancia porque a través de la reducción de los precios se incide en una baja sensible del nivel del ingreso de los productores agrícolas y esto es más evidente cuando se compara con el comportamiento de la inflación y se muestra la pérdida del poder adquisitivo de los productores agrícolas.
También hemos sabido de congresos locales de varias entidades federativas que han hecho sus respetuosos exhortos al Congreso dela Unión y a la Secretaría de Relaciones exteriores para desde el ámbito desde sus respectivas competencias y en el ejercicio de sus atribuciones defiendan en esta nueva versión del Tratado de Libre Comercio donde se obliga a México a entrar al convenio de la Unión Internacional para protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV) 91, que es una acción en la que prácticamente se despoja de la riqueza ancestral a los campesinos ya los mexicanos para que las empresas trasnacionales se adueñen y privaticen la diversidad genética del país, siendo el maíz reconocida como semilla originaria de nuestro país
Patiño y Herrera
Explicaron que con estas medidas, las empresas se beneficiarán apoderándose, despojando y privatizando nuestra semilla por medio de patentes denominadas “Derechos de Obtentor” para que posteriormente se requiera una autorización del obtentor (mejorador de variedades vegetales), de los derechos de siembra, el cultivo, la posesión, venta o cualquier forma de comercialización, importación, exportación o acción que involucre el manejo de la variedad protegida.
Subrayaron que son tantos los ejemplos que los representantes de las diferentes organizaciones en el país tenemos que hacer saber al gobierno federal, indicaron, para que se logren también regular las importaciones y con esto se lleve a cabo una planeación de la agricultura.
Nuestro análisis nos lleva a recomendaciones y exigencias de la reorientación de las políticas públicas del campo y para el campo del gobierno federal, en esta reorientación se deben considerar alternativas de rápida acción al desarrollo de la estructura económica e impulso a la producción y productividad en la actualidad y en el futuro; son muchos los factores estructurales que es necesario que se atiendan para que se puedan mejorar los niveles de poblaciónPatiño y Herrera
