CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Aun cuando no hay gasolina en el 90% de las estaciones de la ciudad y no se les garantice la llegada de pipas para el abasto, miles de celayenses hacen largas filas con la esperanza de que puedan obtener el combustible, sin importar que tengan que esperar horas o quedarse a dormir en sus vehículos, pasar frío, hambre y hasta faltar al trabajo.
Las autoridades del estado, por su parte, hacen las gestiones necesarias para que las autoridades federales normalicen la situación, abriendo el ducto Salamanca-León, mientras se replantea la estrategia de distribución por pipas y así evitar los problemas y las pérdidas que se han suscitado.
Por su parte la fracción del PAN en el Congreso de la Unión, diputados y senadores, a través de su coordinador parlamentario, Juan Carlos Romero Hicks, urgieron al gobierno federal a solucionar el problema y a sostener una reunión con los funcionarios de Hacienda y Pemex, el próximo lunes para que les informen que el problema ya se solucionó y se replantee la estrategia contra el huachicol y el abasto de combustibles a los estados del centro del país.
No queda de otra, más que esperar
Mientras tanto, la situación que se vivió ayer en Celaya fue preocupante, pues de las 19 gasolineras visitadas, únicamente la de Costco tenía servicio y en consecuencia una larga fila en espera; mientras que en la Mobil de 12 de Octubre y San José de Guanajuato había una larga fila de automovilistas, quienes confían en que tendrán más pronto el combustible al no venir éste de Pemex.
Brenda Lisbeth Prieto Saldaña comentó que ella permaneció en la estación desde las 16:00 horas del martes: “nos vamos a esperar, porque ya no tenemos nada de gasolina en el carro, ya no lo podemos mover de aquí; además de que no he ido a mi trabajo y no puedo avisar, porque ya se me apago el teléfono y los números los tengo aquí”.
Entre la fila también se encontró Jesús Molina, empleado de una funeraria, quien mencionó que llevaba dos horas en espera, además de señalar que, el servicio de las funerarias, al igual que el de muchos otros, se ha visto afectados. “Este vehículo es muy necesario, debido a que tenemos que entregar los cuerpos a tiempo y más si los tenemos que trasladar a lugares fuera de la ciudad, se va a presentar una mayor incidencia”.
La mayoría de los entrevistados en la fila coincidieron en que contaban con unos seis litros o menos en el taque, como fue el caso del señor Felipe Marcial, quien dijo que eso sólo le alcanzaba la ida y vuelta de su trabajo que se localiza en el municipio de Villagrán, por lo que inclusive apagó su camioneta durante la espera y mejor la fue empujando conforme avanzaba la fila. Mencionó: “llegue desde las 5:30 de las mañana, me tocó pasando el Parque Xochipilli y en este lapso del recorrido disminuyó la poca gasolina que me quedaba, por lo que mejor la empecé a empujar”.
Juan Cachola Merino resaltó que tienen cuatro camionetas y dos carros detenidos en la empresa para la que labora, por lo que esperaría hasta ser atendido, porque ninguna de las unidades de la empresa tiene disponible para laborar.
Por su parte, Arturo Prado, empleado de una tienda de construcción para el hogar, dijo: “yo estoy en horario de trabajo, pero si requiero quedarme más tiempo lo haría, para tener como trabajar el día de mañana”.
La mayoría de las personas que estaban en la fila sólo contaban con un cuarto o menos en su tanque de gasolina, por lo que J. Merced Velázquez externó que el ultimo día que cargó fue en sábado y domingo, pero su negocio requiere de gasolina constantemente, y sólo contaba con un cuarto de tanque en el vehículo.
“El último día que cargué gasolina fue el día sábado y ahorita sólo me queda un cuarto, pero me voy a tardar lo que sea necesario para obtenerla”, dijo Francisco Javier Estefanía.
Mientras tanto, René Jamaica, Luis Noé Maldonado y Humberto Robles enfatizaron que llegaron desde muy temprano a buscar combustible, sin embargo, “no habrá el día de hoy (ayer) gasolina, vamos a quedarnos aquí, estábamos viendo mis amigos y yo sin nos movíamos a otros lados, pero vamos a perder nuestros lugares, por eso es que nos quedaremos aquí hasta abastecer nuestros vehículos; inclusive estamos pasando hambre”.
El Sol del Bajío, en su recorrido por 19 estaciones de distintos puntos de la ciudad, constató que en algunas continuaban las largas filas aunque no hubiera gasolina. La única que tenía combustible en existencia fue la tienda de autoservicio Costco, de tal manera que aunque no fueran clientes con membresía podían obtener este benéfico de autoservicio sólo con pagos con tarjeta de crédito o débito.
Mientras que por la tarde, alrededor de las 17:30 horas, se tuvo conocimiento de que a la estación de G500, ubicada en la salida a Apaseo el Grande, donde ya esperaba una larga fila de automovilistas, llegó una pipa para llenar las bombas de combustible.
La encargada de una gasolinera externó que ya optaron por no dar fecha de llegada del combustible a los clientes, para no quedar mal con la hora de llegada, porque luego falla; asimismo, comentó que en la T-Mobil de 12 de Octubre se limitó la venta a sólo a 300 pesos por automóvil y esta medida fue tomada después de que al principio estaban llenaban el tanque y dos garrafas de plástico.
Dijo que el martes recibieron una pipa de 40 mil litros a las 14:00 horas y se terminó el combustible a las 20:30 horas; por lo que la gente que estaba a punto de ser atendido o formada en la fila se molestó, porque ya no se les atendió; también comentó que no estarán vendiendo el combustible en garrafas de plástico reciclado, de algunos productos de limpieza o de garrafones de agua.