CELAYA, Gto.- Afortunadamente ha desaparecido el acto salvaje de arrojar agua a la gente para celebrar el Sábado de Gloria, porque representaba no sólo el mal uso del vital líquido, sino porque era un insulto e invasión a la integridad de la gente.
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Así lo informó el cronista Fernando Amate, mientras que la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (JUMAPA), hizo un llamado a no incurrir a este tipo de tradiciones de desperdiciar agua.
“Es bueno que se haya perdido esa tradición de arrojar agua a la gente en Sábado de Gloria, porque más allá de que se molesta a la gente, se invade su integridad, Celaya tiene estrés hídrico, y andar desperdiciando agua es una manera tan estúpida porque no conmemora nada, sólo conmemora la imbecilidad”, afirmó.
Dijo que afortunadamente no se ha visto dicha tradición de tirar agua a la gente, y ha ido desapareciendo, por lo que espera que desaparezca de forma permanente porque el agua debe ser cuidada en todos los sentidos.
Por su parte, la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Celaya (JUMAPA) invita de manera permanente a los usuarios y ciudadanía en general a cuidar el agua, a partir de evitar el desperdicio y aplicar buenas prácticas en el hogar.
Para el Organismo Operador del Agua, todos los días se debe tener un uso racional con el vital líquido, para evitar una crisis por falta de agua.
“En esta época de estiaje y calor, tenemos que cuidar aún más el agua, hacer un uso racional; si bien en Celaya aun no estamos en situaciones extremas como en otras ciudades, gracias a que se ha trabajado y se cuenta con infraestructura, debemos continuar trabajando sociedad y gobierno en lo que a cada quien nos toca; a las familias cuidando el agua y la administración ejecutando estrategias que nos permita recuperar el agua que se pierde en el proceso de llevarla a las casas”, indicó el director general de JUMAPA, Roberto Castañeda Tejeda.
De manera puntual, agregó que hoy la sociedad es cada vez más consciente del cuidado del agua y que es una responsabilidad de todos los días cuidarla para preservarla.
Un ejemplo, son los alcances que se tiene con el programa de cultura del agua que encabeza la JUMAPA, en donde no sólo se brindan pláticas y talleres a diversos sectores sociales, en donde cada vez es más activa la participación de los niños y jóvenes, que incluso permitió a Celaya instituir un premio municipal para aquellas escuelas que realizan buenas prácticas para el ahorro del agua.
Por último, contextualizó que tan sólo con la participación de nueve escuelas que hoy en Celaya están certificadas como escuelas ahorradoras, se registraron ahorros de 900 mil litros de agua anuales a partir de estas buenas prácticas.
