/ domingo 18 de junio de 2023

Papás ejemplares celebran el Día del Padre

Papá, es una palabra muy corta pero con un gran significado, y como dice la frase padre no es el que engendra si no el que cría y da amor

CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Valentín Morales y Julio López, son papás ejemplares que han logrado sacar adelante a sus hijos pese a las adversidades, malos ratos y difíciles experiencias, pues la vida les puso el más grande de los restos ser papá y mamá.

Papá, es una palabra muy corta pero con un gran significado, y como dice la frase padre no es el que engendra si no el que cría y da amor, pero ¿qué pasa cuando un hombre además de engendrar y criar debe desempeñar el rol de mamá?, estos son los casos Valentín y Julio, a quienes la vida les tenía preparado un gran reto y aunque esté acompañado de dolor, lograron salir adelante.

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ESTAMOS INCOMPLETOS: JULIO ALBERTO

Julio Alberto López Ramírez, de 35 años de edad, en 2019 perdió a su esposa luego de que hombres armados ingresaron a su casa y asesinaron, frente a su hijo de entonces cinco años de edad, a su esposa Ana Lilia, quien se desempeñaba como enfermera de la clínica del ISSSTE.

Desde ese día y pese a lo devastador de los acontecimientos, Julio Alberto debió ocuparse y sacar adelante a su hijo Mateo, tomando el papel de padre y madre, además de luchar con una insuficiencia renal crónica.

Es una experiencia que no se le desea a nadie, dijo, pero con la ayuda de su familia ha logrado sacar adelante día a día a Mateo, quien ahora tiene nueve años de edad.

“Es difícil está situación, pero el motor para seguir es él, mi hijo, quien todos los días, con una sonrisa y su fuerza, me ayuda a seguir y no caer”.

Gracias al apoyo que tuvo de sus padres, pudo llevar a su hijo al psicólogo durante dos años, pues lo que vivió no fue nada fácil, pero gracias a esa ayuda profesional ha calmado sus miedos y el trauma que generó la experiencia, ahora es un niño muy inteligente y maduro para su edad.

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“Me sorprende la madurez que tiene a pesar de su edad, lo admiro mucho y nos hemos apoyado, además de ser padre e hijo, nos hemos vuelto amigos, nos apoyamos y no nos dejamos caer, él me ve mal y me hecha porras y yo igual, esta comunicación que tenemos es lo mejor, porque pese a estar incompletos seguiremos echándole ganas”.

En la parte económica no ha sido difícil, pues Julio siempre trabajó y lo sigue haciendo, desde que se casó, junto con su difunta esposa se prepararon para no sufrir por la enfermedad, sacando seguros y fideicomisos, entre otras cosas, para que su hijo no sufriera, además de que él aprendió de ella a cocinar y repartir los labores en casa, lo que en este momento a él le ha ayudado bastante, pues ya que le gusta cocinar.

“Yo pedí apoyo en el trabajo para que me cambiaran en la mañana, por ello cuando él (su hijo) entra a la escuela, yo trabajo, por eso en la tarde convivimos y hacemos varias actividades”.

Esta es una prueba de que ser papá viudo es una gran responsabilidad, pero también se logra hacer un trabajo importante, solo es querer y luchar por los hijos que son el motor de la vida.

EL RETO, FORMAR NIÑOS DE BIEN

Por su parte, Valentín Morales, elemento de la Policía Municipal de Apaseo el Grande, sufrió la desaparición de su esposa el 20 de agosto del 2020, sin que hasta el momento se sepa de ella. Desde ese día, se hizo cargo de su pequeña Alexa Guadalupe, de ocho años de edad.

“Desde ese tiempo a la fecha me hago cargo de ella, aunque ha sido difícil, porque uno no está preparado para sufrir estos cambios y ahora hacerse cargo de manera total de mi hija, ha sido un aprendizaje"

Pese a que él tenía ya hijos más grandes con su primer matrimonio, nunca había pasado por una situación así, y lo que hoy en día le tocó vivir es una prueba grande de fortaleza y valor.

Julio López y su pequeño Mateo disfrutan los momentos. | Foto: Cortesía

Agregó que su hija de 20 años actualmente lo apoya en algunas cosas, pero él siempre tiene que estar ahí para su hija, hacerla de mamá y papá. “Se tornó complicado, pues sientes que el mundo se cae, pero se acomoda tu vida acorde a la necesidades de ellos.

Te empiezas a hacer mil preguntas, ahora qué voy a hacer, cómo voy a hacer ese papel de mamá, porque no es lo mismo tener ese matrimonio consolidado, de ambas figuras mamá y papá, y de repente uno desaparece, si es como que el mundo se va para abajo, pero al verlos no puedes”.

En esta situación tuvo que modificar su manera y ritmo de vivir, para llevarla a la escuela, peinarla, darle consejos y ver sus necesidades

Para Valentín, la pandemia fue algo bueno, porque el confinamiento le ayudó a que su hija estuviera en casa con una nana, mientras él trabajaba, ahí fue más fácil.

Después de este proceso ya uno se acomoda, de una manera en que se pueda darle la atención a la pequeña, a veces si es complicado y se apoyan de la familia, pero lo más importante es coordinarse, y aunque lo más difícil es dejarla un rato sola, por los horarios de trabajo, se ha sabido sobrellevar.

“A veces me cuesta mucho trabajo porque yo tengo turnos de 24 por 48, tengo que buscar quién la recoja en la escuela y la lleve a casa para después darle sus vueltas, pues tengo que cuidarla de alguna manera, pero eso ha ayudado a que sea una niña muy independiente”.

Lo más difícil de la situación es cuando ella pregunta por su mamá, pues no le tiene que decir mentiras, y se ha tenido que decir lo que ha sucedido, pero siempre con cautela, lo más complicado es salir a la calle y que las personas te observen feo, o te critiquen e incluso en la escuela el sufrir de bullying por sus compañeros; tema que ha tenido que tratar con ella para que entienda y no caiga en esas provocaciones.

“Lo más difícil es mi situación, porque cuando sabes que una persona falleció, es más fácil decirlo, pero en mi caso, cómo explicarle que su mamá desapareció. No ha sido fácil, pero se tiene que buscar la manera de no lastimarla, ni hacerla sentir mal, y que no te hagan más preguntas porque no sabes qué decirle”.

Valentín y Romina conviven en su tiempo libre. | Foto: Cortesía

Aunque la situación siempre ha sido complicada, se busca la manera de verlos bien y cada día mejorar por ellos, por darles una buena calidad de vida y que la ausencia de su madre no se note, pero señaló que son batallas que les tocó vivir y sobrevivir y que su reto es formar niños y jóvenes de bien.

“Ella me ha dado lecciones de vida y fuerza, aunque ella es pequeña, es muy inteligente, sabe ser independiente y salir adelante dejando a un lado las críticas de la sociedad”.

En los temas de mujeres a Valentín le tocado esa parte complicada, pero señaló que ha tomado la técnica de hablar y nombrar las cosas como son y con su nombre, además de prepararla para lo que viene en un futuro, los cambios en su cuerpo y los cuidados que debe tener, se ha podido ilustrar en esos temas y hasta conocerlos para darle una inducción correcta.


VALORAN EL TRABAJO DE LAS MUJERES

Finalmente Valentín Morales y Julio López dijeron que es muy bonito tener un motor en su vida y una pequeña personita por quién vivir y cada día salir adelante para que la ausencia de su madre no sea tan difícil, ahora comentan que valoran el trabajo que hacen las mujeres como madres, pues ahora en esta vida les tocó hacer ese papel tan difícil

Dos padres con situaciones distintas, pero a la vez similares, pues debido a la violencia que se vive en el país, perdieron una gran parte de su familia y les tocó valorar el papel que hace una madre, pero aunado a su papel de padres.

CELAYA, Gto.- (OEM-Informex).- Valentín Morales y Julio López, son papás ejemplares que han logrado sacar adelante a sus hijos pese a las adversidades, malos ratos y difíciles experiencias, pues la vida les puso el más grande de los restos ser papá y mamá.

Papá, es una palabra muy corta pero con un gran significado, y como dice la frase padre no es el que engendra si no el que cría y da amor, pero ¿qué pasa cuando un hombre además de engendrar y criar debe desempeñar el rol de mamá?, estos son los casos Valentín y Julio, a quienes la vida les tenía preparado un gran reto y aunque esté acompañado de dolor, lograron salir adelante.

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ESTAMOS INCOMPLETOS: JULIO ALBERTO

Julio Alberto López Ramírez, de 35 años de edad, en 2019 perdió a su esposa luego de que hombres armados ingresaron a su casa y asesinaron, frente a su hijo de entonces cinco años de edad, a su esposa Ana Lilia, quien se desempeñaba como enfermera de la clínica del ISSSTE.

Desde ese día y pese a lo devastador de los acontecimientos, Julio Alberto debió ocuparse y sacar adelante a su hijo Mateo, tomando el papel de padre y madre, además de luchar con una insuficiencia renal crónica.

Es una experiencia que no se le desea a nadie, dijo, pero con la ayuda de su familia ha logrado sacar adelante día a día a Mateo, quien ahora tiene nueve años de edad.

“Es difícil está situación, pero el motor para seguir es él, mi hijo, quien todos los días, con una sonrisa y su fuerza, me ayuda a seguir y no caer”.

Gracias al apoyo que tuvo de sus padres, pudo llevar a su hijo al psicólogo durante dos años, pues lo que vivió no fue nada fácil, pero gracias a esa ayuda profesional ha calmado sus miedos y el trauma que generó la experiencia, ahora es un niño muy inteligente y maduro para su edad.

Te puede interesar ➡ Listos comerciantes en panteones por el Día del Padre

“Me sorprende la madurez que tiene a pesar de su edad, lo admiro mucho y nos hemos apoyado, además de ser padre e hijo, nos hemos vuelto amigos, nos apoyamos y no nos dejamos caer, él me ve mal y me hecha porras y yo igual, esta comunicación que tenemos es lo mejor, porque pese a estar incompletos seguiremos echándole ganas”.

En la parte económica no ha sido difícil, pues Julio siempre trabajó y lo sigue haciendo, desde que se casó, junto con su difunta esposa se prepararon para no sufrir por la enfermedad, sacando seguros y fideicomisos, entre otras cosas, para que su hijo no sufriera, además de que él aprendió de ella a cocinar y repartir los labores en casa, lo que en este momento a él le ha ayudado bastante, pues ya que le gusta cocinar.

“Yo pedí apoyo en el trabajo para que me cambiaran en la mañana, por ello cuando él (su hijo) entra a la escuela, yo trabajo, por eso en la tarde convivimos y hacemos varias actividades”.

Esta es una prueba de que ser papá viudo es una gran responsabilidad, pero también se logra hacer un trabajo importante, solo es querer y luchar por los hijos que son el motor de la vida.

EL RETO, FORMAR NIÑOS DE BIEN

Por su parte, Valentín Morales, elemento de la Policía Municipal de Apaseo el Grande, sufrió la desaparición de su esposa el 20 de agosto del 2020, sin que hasta el momento se sepa de ella. Desde ese día, se hizo cargo de su pequeña Alexa Guadalupe, de ocho años de edad.

“Desde ese tiempo a la fecha me hago cargo de ella, aunque ha sido difícil, porque uno no está preparado para sufrir estos cambios y ahora hacerse cargo de manera total de mi hija, ha sido un aprendizaje"

Pese a que él tenía ya hijos más grandes con su primer matrimonio, nunca había pasado por una situación así, y lo que hoy en día le tocó vivir es una prueba grande de fortaleza y valor.

Julio López y su pequeño Mateo disfrutan los momentos. | Foto: Cortesía

Agregó que su hija de 20 años actualmente lo apoya en algunas cosas, pero él siempre tiene que estar ahí para su hija, hacerla de mamá y papá. “Se tornó complicado, pues sientes que el mundo se cae, pero se acomoda tu vida acorde a la necesidades de ellos.

Te empiezas a hacer mil preguntas, ahora qué voy a hacer, cómo voy a hacer ese papel de mamá, porque no es lo mismo tener ese matrimonio consolidado, de ambas figuras mamá y papá, y de repente uno desaparece, si es como que el mundo se va para abajo, pero al verlos no puedes”.

En esta situación tuvo que modificar su manera y ritmo de vivir, para llevarla a la escuela, peinarla, darle consejos y ver sus necesidades

Para Valentín, la pandemia fue algo bueno, porque el confinamiento le ayudó a que su hija estuviera en casa con una nana, mientras él trabajaba, ahí fue más fácil.

Después de este proceso ya uno se acomoda, de una manera en que se pueda darle la atención a la pequeña, a veces si es complicado y se apoyan de la familia, pero lo más importante es coordinarse, y aunque lo más difícil es dejarla un rato sola, por los horarios de trabajo, se ha sabido sobrellevar.

“A veces me cuesta mucho trabajo porque yo tengo turnos de 24 por 48, tengo que buscar quién la recoja en la escuela y la lleve a casa para después darle sus vueltas, pues tengo que cuidarla de alguna manera, pero eso ha ayudado a que sea una niña muy independiente”.

Lo más difícil de la situación es cuando ella pregunta por su mamá, pues no le tiene que decir mentiras, y se ha tenido que decir lo que ha sucedido, pero siempre con cautela, lo más complicado es salir a la calle y que las personas te observen feo, o te critiquen e incluso en la escuela el sufrir de bullying por sus compañeros; tema que ha tenido que tratar con ella para que entienda y no caiga en esas provocaciones.

“Lo más difícil es mi situación, porque cuando sabes que una persona falleció, es más fácil decirlo, pero en mi caso, cómo explicarle que su mamá desapareció. No ha sido fácil, pero se tiene que buscar la manera de no lastimarla, ni hacerla sentir mal, y que no te hagan más preguntas porque no sabes qué decirle”.

Valentín y Romina conviven en su tiempo libre. | Foto: Cortesía

Aunque la situación siempre ha sido complicada, se busca la manera de verlos bien y cada día mejorar por ellos, por darles una buena calidad de vida y que la ausencia de su madre no se note, pero señaló que son batallas que les tocó vivir y sobrevivir y que su reto es formar niños y jóvenes de bien.

“Ella me ha dado lecciones de vida y fuerza, aunque ella es pequeña, es muy inteligente, sabe ser independiente y salir adelante dejando a un lado las críticas de la sociedad”.

En los temas de mujeres a Valentín le tocado esa parte complicada, pero señaló que ha tomado la técnica de hablar y nombrar las cosas como son y con su nombre, además de prepararla para lo que viene en un futuro, los cambios en su cuerpo y los cuidados que debe tener, se ha podido ilustrar en esos temas y hasta conocerlos para darle una inducción correcta.


VALORAN EL TRABAJO DE LAS MUJERES

Finalmente Valentín Morales y Julio López dijeron que es muy bonito tener un motor en su vida y una pequeña personita por quién vivir y cada día salir adelante para que la ausencia de su madre no sea tan difícil, ahora comentan que valoran el trabajo que hacen las mujeres como madres, pues ahora en esta vida les tocó hacer ese papel tan difícil

Dos padres con situaciones distintas, pero a la vez similares, pues debido a la violencia que se vive en el país, perdieron una gran parte de su familia y les tocó valorar el papel que hace una madre, pero aunado a su papel de padres.

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