CELAYA, Gto. (OEM-Informex).- Continuando con el relato de las Batallas de Celaya, Rafael Soldara Luna, historiador y coordinador del Museo de Celaya Historia Regional, contó que el segundo combate entre los convencionistas y los constitucionalistas abanderados por Francisco Villa y Álvaro Obregón respectivamente, se llevó a cabo los días 13, 14 y 15 de abril de 1915, donde se fueron a desbandada los villistas, además de que hubo muchos muertos, heridos, presos y fusilados.
SEGUNDA BATALLA
FECHA: 13 DE ABRIL DE 1915
El historiador mencionó que para el 13 de abril Álvaro Obregón acompañado de su Estado Mayor, avista desde la azotea de la fábrica La Internacional, los movimientos del enemigo, el cual hizo un alto en la estación de Crespo.
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Dijo que más tarde al encontrarse se abrió el fuego de fusilería por parte del frente constitucionalista “y casi enseguida el de artillería, generalizándose en breve de uno y otro lado. Los villistas se acercan con grande arrojo a las posiciones enemigas. El combate se torna muy reñido”.
FECHA: 14 DE ABRIL DE 1915
Contó que el 14 de abril siguieron combatiendo encarnizadamente sin descansar ni dormir, ya que querían derrotar a su adversario, es por lo que, el general Villa dictó órdenes de fusilamiento contra los prisioneros capturados o contra quienes no cumplen con lo que les ordena.
Durante la batalla “los vecinos de Celaya sufren algunos perjuicios como consecuencia de la metralla convencionista, siendo unos heridos y otros muertos por las balas que han llovido en medio de los disparos de la artillería”.
FECHA: 15 DE ABRIL DE 1915
Refirió que el 15 de abril “se agudizó la pelea con los villistas atacando la retaguardia de los constitucionalistas, por ello que Obregón ordene a su jefe del Estado Mayor, Francisco R. Serrano, que marche con el 10 Batallón para dar alcance a los villistas que se retiran por el rumbo de Trojes y les da alcance en la hacienda de Jofre, donde se le incorpora el general Laveaga con su escolta y el 15 Batallón”.
“Mientras el enemigo continúa siendo arrollado, dejando en el camino el armamento. Gran parte de la derecha del villismo se retira hacia el cerro de La Gavia y busca por allí el camino de Salamanca a Irapuato. Villa ha logrado rescatar y ordenar algunas tropas, con las que resuelve la retirada”.