¿Cuántas veces al día piensas en positivo?, es decir, ¿cuántas veces agradeces, felicitas, motivas o admiras?. Hace algunos días, una de mis profesoras de la maestría me decía que por cada emoción negativa al menos requieres 3 positivas para mediar un poco la situación. Quizás y puede ser un juicio, nos cuesta trabajo pensar en positivo, y esto es solamente de práctica, es decir si todos los días al despertar agradeces un día más, o te das el tiempo de asomarte por la ventana y admirar el amanecer, el paisaje, el sonido de las aves, esto es practicar los pensamientos positivos, adicional te quiero compartir otro ejemplo, si al llegar a tu lugar de trabajo, das los buenos días, si te interesas de manera genuina por los compañeros, por tu equipo de trabajo, si te das el tiempo de escuchar sus situaciones personales, si les dedicas tiempo de calidad, y buscas su bienestar también promoverás los pensamientos positivos.
Es muy fácil, que, si algo sale negativamente o a lo largo del día tienes una experiencia no positiva, te ancles ahí y esta situación venga a tu mente con frecuencia y sigamos dándole vueltas al tema, es importante hacerlo consciente y traer pensamientos positivos a nuestra mente y que estos sean los que de manera repetitiva estén a lo largo del día. Es tan interesante el cerebro humano y tan predecible en algunas ocasiones la manera en la que pensamos y dialogamos, pero cuando lo traes a tu realidad será muy fácil poder pensar de manera positiva y moverte en este sentido.
El pensamiento positivo no significa que ignores las situaciones menos agradables de la vida. El pensamiento positivo solo significa que enfrentes lo desagradable de una manera más positiva y productiva. Piensas en posibilidades reales sobre lo que será mejor. El pensamiento positivo debería comenzar con el diálogo interior que frecuentemente tenemos, es este diálogo que tenemos todos los días con el ir y venir de la información en nuestro cerebro. Estos pensamientos automáticos habitualmente se dan en base a nuestra experiencia sobre las situaciones cotidianas, este puede hacerse hacia la lógica y la razón. Otra parte puede surgir de las ideas erróneas que creas por falta de información o expectativas consecuentes de ideas preconcebidas de lo que podría suceder, los famosos paradigmas o las historias que nos queremos contar, si los pensamientos que te pasan por la cabeza son en su mayoría negativos, es más probable que tu perspectiva de la vida sea pesimista. Si tus pensamientos son mayormente positivos, es probable que seas un optimista, alguien que practica el pensamiento positivo es aquel que tendrá la posibilidad de ser un líder positivo. Se una persona feliz, ten pensamientos positivos, siéntete satisfecho y ten claro tu propósito de vida, se una persona que conecta con tus emociones e identifica lo que haces y porqué lo haces, siente, ríe y también llora. Aprende a decir no, arriésgate a romper paradigmas, a ser disruptivo, a hacer para lograr y no por hacer. Nos leemos.
