/ viernes 8 de julio de 2022

Una Mirada a tus Ojos

ADICIONES EN LA GRADUACION

En nuestros comentarios de la semana pasada hablamos de la presbicia, conocida también con el nombre de vista cansada, que es la incapacidad para ver con definición los objetos cercanos.

La rehabilitación visual para definir objetos cercanos puede ser de dos formas: procedimientos no quirúrgicos y procedimientos quirúrgicos.

En los primeros se encuentra la graduación de lentes.

Para proceder a la graduación se requiere que el oftalmólogo realice una revisión al órgano visual de la persona y determine el grado de afectación de la vista el que puede ser distinto entre un ojo y el otro.

Si el paciente ve bien los objetos lejanos y el problema es sólo de presbicia, esto es, de visión de objetos cercanos, la graduación se retrae a este sólo punto. Se ordenarán “lentes para ver de cerca”, con la graduación requerida para cada ojo.

En el mercado convencional existen anteojos que se ofrecen a precios muy económicos como “lentes para ver de cerca” pero con el inconveniente de que ambos ojos tienen la misma adición cuando la realidad es que cada ojo necesita la propia, distinta una a la del otro.

Lo cierto es que lo que se ofrece son lupas cuyo uso a la larga son perjudiciales para la visión ya que se incentiva la vista con igual potencia en ambos ojos aunque uno de ellos no lo requiera. Lo menos que puede pasar es que la persona padezca dolor de cabeza constante.

Si la persona registra problemas en su visión tanto lejana como cercana, la receta será para lentes “bifocales”, esto es, una graduación para ver de lejos en una parte de la mica y una adición de dioptrías para ver de cerca, en la otra parte. La mica se verá con estas dos graduaciones.

Los adelantos tecnológicos nos ofrecen ya lentes de contacto bifocales, que eliminan la montadura de las micas en armazones.

Por lo que respecta al procedimiento quirúrgico, en éste se procede a reemplazar el cristalino por un lente intraocular, operación llamada facoemulsificación, sobre la que ya hemos hablado cuando hemos visto la extirpación de la catarata.

La operación es ambulatoria, esto es, el paciente descansa un rato después de la intervención que es breve y regresa a su casa para su convalecencia.

Una recomendación: consulte a su oftalmólogo cuando menos una vez al año. No se automedique: cada paciente tiene requerimientos particulares.

Dios mediante hasta la próxima...mi correo: rich_ir @ hot mail.com

ADICIONES EN LA GRADUACION

En nuestros comentarios de la semana pasada hablamos de la presbicia, conocida también con el nombre de vista cansada, que es la incapacidad para ver con definición los objetos cercanos.

La rehabilitación visual para definir objetos cercanos puede ser de dos formas: procedimientos no quirúrgicos y procedimientos quirúrgicos.

En los primeros se encuentra la graduación de lentes.

Para proceder a la graduación se requiere que el oftalmólogo realice una revisión al órgano visual de la persona y determine el grado de afectación de la vista el que puede ser distinto entre un ojo y el otro.

Si el paciente ve bien los objetos lejanos y el problema es sólo de presbicia, esto es, de visión de objetos cercanos, la graduación se retrae a este sólo punto. Se ordenarán “lentes para ver de cerca”, con la graduación requerida para cada ojo.

En el mercado convencional existen anteojos que se ofrecen a precios muy económicos como “lentes para ver de cerca” pero con el inconveniente de que ambos ojos tienen la misma adición cuando la realidad es que cada ojo necesita la propia, distinta una a la del otro.

Lo cierto es que lo que se ofrece son lupas cuyo uso a la larga son perjudiciales para la visión ya que se incentiva la vista con igual potencia en ambos ojos aunque uno de ellos no lo requiera. Lo menos que puede pasar es que la persona padezca dolor de cabeza constante.

Si la persona registra problemas en su visión tanto lejana como cercana, la receta será para lentes “bifocales”, esto es, una graduación para ver de lejos en una parte de la mica y una adición de dioptrías para ver de cerca, en la otra parte. La mica se verá con estas dos graduaciones.

Los adelantos tecnológicos nos ofrecen ya lentes de contacto bifocales, que eliminan la montadura de las micas en armazones.

Por lo que respecta al procedimiento quirúrgico, en éste se procede a reemplazar el cristalino por un lente intraocular, operación llamada facoemulsificación, sobre la que ya hemos hablado cuando hemos visto la extirpación de la catarata.

La operación es ambulatoria, esto es, el paciente descansa un rato después de la intervención que es breve y regresa a su casa para su convalecencia.

Una recomendación: consulte a su oftalmólogo cuando menos una vez al año. No se automedique: cada paciente tiene requerimientos particulares.

Dios mediante hasta la próxima...mi correo: rich_ir @ hot mail.com