/ miércoles 12 de agosto de 2020

Autoconstrucción ¿Solución o Problema?

Aún en medio de la pandemia, por cierto menos plana que cualquier cerro que nadie puedo ver en Santa Lucía, el eterno estudiante, nunca profesionista, López Obrador nos sigue convocando a hacer uso de la sabiduría ancestral, dejando a un lado estudios profesionales en temas que hasta antes de su sexenio requerían un estudio previo para tener resultados como su nombre lo indica profesionales.

Fue en mayo cuando nuestro tlatoani encabezando la misa de gallo en palacio nacional, dio un sermón muy similar a su pensamiento de pueblo bueno y es que según él, no es necesario de los profesionistas para hacer lo que los profesionales hace, si así es, así de incongruente suena, pero así es la política de la ya famosa, no por sus aciertos, 4t.

Hemos tenido ya cátedras magistrales sobre la facilidad que es extraer petróleo, la rapidez en que los caminos se pueden hacer y el trabajo periodista que cualquiera pudiera hacer sin ser un profesional del periodismo. A esos expertos, los puede sustituir sin mayor problema el siempre bueno y recientemente sabio pueblo. Quizá por eso PEMEX tiene las peores perdidas en su historia, a lo mejor por eso las gotitas que utiliza su gabinete detendrá el coronavirus que hasta esta semana lleva más de 40 mil muertos. No López así no, el profesionalismo no va de la mano con la corrupción.

Les traigo a colación esta información ya que hace unas semanas existió un esfuerzo por parte de la SEDATU y aliado con CEMEX crearon un manual de autoconstrucción y la verdad es que es un documento completo, digo si quisiéramos resumir 5 años de ingeniería civil o arquitectura, pues aquellos que estamos titulados, nos lo hubieran presentado mucho antes y nos ahorrábamos una lana.

Aunque pareciera chiste, es anécdota, en México, según el último censo del INEGI muestra que por lo menos el 25% de la vivienda es de tipo autoconstrucción, es decir que ningún profesionista intervino en el proceso de la creación de la casa, o como diría John Ackerman, casas en plural. El problema no es sólo para abordarlo con los memes que rondan Facebook o twitter, sobre escaleras que no llegan a ningún lado o baños que quedaron a mitad del comedor. La autoconstrucción también tiene ejemplos como la escuela Rébsamen en el último temblor en la ciudad de México. Es decir la falta de un profesionista, no sólo se traduce en la perdida de dinero o mejores condiciones de vida, sino puede ser tan peligroso como las pérdidas de vidas.

Si bien también existe una falta de vivienda en México y quizá el método de que cada quién construya su casa en los esquemas de menor acceso económico es momentáneamente viable, lo que nos está diciendo esta política pública es que en este país no se necesita de la técnica, el estudio, la ciencia o el profesionalismo. Temo que nos esperan años de oscurantismo para hacer el territorio de todos.

Aún en medio de la pandemia, por cierto menos plana que cualquier cerro que nadie puedo ver en Santa Lucía, el eterno estudiante, nunca profesionista, López Obrador nos sigue convocando a hacer uso de la sabiduría ancestral, dejando a un lado estudios profesionales en temas que hasta antes de su sexenio requerían un estudio previo para tener resultados como su nombre lo indica profesionales.

Fue en mayo cuando nuestro tlatoani encabezando la misa de gallo en palacio nacional, dio un sermón muy similar a su pensamiento de pueblo bueno y es que según él, no es necesario de los profesionistas para hacer lo que los profesionales hace, si así es, así de incongruente suena, pero así es la política de la ya famosa, no por sus aciertos, 4t.

Hemos tenido ya cátedras magistrales sobre la facilidad que es extraer petróleo, la rapidez en que los caminos se pueden hacer y el trabajo periodista que cualquiera pudiera hacer sin ser un profesional del periodismo. A esos expertos, los puede sustituir sin mayor problema el siempre bueno y recientemente sabio pueblo. Quizá por eso PEMEX tiene las peores perdidas en su historia, a lo mejor por eso las gotitas que utiliza su gabinete detendrá el coronavirus que hasta esta semana lleva más de 40 mil muertos. No López así no, el profesionalismo no va de la mano con la corrupción.

Les traigo a colación esta información ya que hace unas semanas existió un esfuerzo por parte de la SEDATU y aliado con CEMEX crearon un manual de autoconstrucción y la verdad es que es un documento completo, digo si quisiéramos resumir 5 años de ingeniería civil o arquitectura, pues aquellos que estamos titulados, nos lo hubieran presentado mucho antes y nos ahorrábamos una lana.

Aunque pareciera chiste, es anécdota, en México, según el último censo del INEGI muestra que por lo menos el 25% de la vivienda es de tipo autoconstrucción, es decir que ningún profesionista intervino en el proceso de la creación de la casa, o como diría John Ackerman, casas en plural. El problema no es sólo para abordarlo con los memes que rondan Facebook o twitter, sobre escaleras que no llegan a ningún lado o baños que quedaron a mitad del comedor. La autoconstrucción también tiene ejemplos como la escuela Rébsamen en el último temblor en la ciudad de México. Es decir la falta de un profesionista, no sólo se traduce en la perdida de dinero o mejores condiciones de vida, sino puede ser tan peligroso como las pérdidas de vidas.

Si bien también existe una falta de vivienda en México y quizá el método de que cada quién construya su casa en los esquemas de menor acceso económico es momentáneamente viable, lo que nos está diciendo esta política pública es que en este país no se necesita de la técnica, el estudio, la ciencia o el profesionalismo. Temo que nos esperan años de oscurantismo para hacer el territorio de todos.