/ jueves 23 de junio de 2022

La Falsedad

Cantante desde hace tiempo, cargaba su guitarra bajo el brazo para hacer poesía de José Martí y otros que buscaron libertad con las palabras, esos pensamientos que se cocinan en las ideologías de los ratos sin trabajo, ciego por el régimen; se la sigue pasando sin ver las sandalias de sus hermanos al ponerse sus zapatos que le da el régimen, gente que en años no ha comido res, que se levanta temprano a las filas para las raciones (si no, no alcanzan, se acaban) no siente las migajas de salario mínimo que devengan sus mayorías, esas mayorías que solamente reciben de mil trescientos a mil quinientos pesos cubanos por mes; ciego que no siente las acciones de hambre como a niños destetados a los siete años dejan de surtirles leche porque hay solamente 19 productos de racionamiento, no tienen comercial mexicana, no existe Sorianas, menos otros que nosotros gozamos de empresas de EEUU; no hay pasta para los dientes menos existen salchichas, solamente en la basura lo que tiran los que reciben dólares de las remesas que los de Miami recortando envían; ya no exporta azúcar solamente tabaco de pinar del Río, no puedes sembrar otra cosa ni frijol ni arroz nada porque si no, eres hombre preso, si vendes sin permiso, las multas son de mil doscientos pesos. Todo es por decreto, trabajan para el estado como en las grandes haciendas antes de la revolución mexicana. ¿Se puede ser cantante sin ver?, sin sentir, sin palpar el sudor de esa Cuba, se puede ir de viaje a Ciudad de México a cantar versos que no demuestran los martirios de tu mismo país, hace falta mucha cara para cantar un rabo de nube si eres el último en los rabos del racionamiento que le mendigan al gobierno, SILVIO, eres el fraude del canto de trova cubana, eres tan falso porque tu pueblo encarcelado y condenado a diez años de prisión por gritar ¡LIBERTAD!, ¡ LIBERTAD!.

Cantante desde hace tiempo, cargaba su guitarra bajo el brazo para hacer poesía de José Martí y otros que buscaron libertad con las palabras, esos pensamientos que se cocinan en las ideologías de los ratos sin trabajo, ciego por el régimen; se la sigue pasando sin ver las sandalias de sus hermanos al ponerse sus zapatos que le da el régimen, gente que en años no ha comido res, que se levanta temprano a las filas para las raciones (si no, no alcanzan, se acaban) no siente las migajas de salario mínimo que devengan sus mayorías, esas mayorías que solamente reciben de mil trescientos a mil quinientos pesos cubanos por mes; ciego que no siente las acciones de hambre como a niños destetados a los siete años dejan de surtirles leche porque hay solamente 19 productos de racionamiento, no tienen comercial mexicana, no existe Sorianas, menos otros que nosotros gozamos de empresas de EEUU; no hay pasta para los dientes menos existen salchichas, solamente en la basura lo que tiran los que reciben dólares de las remesas que los de Miami recortando envían; ya no exporta azúcar solamente tabaco de pinar del Río, no puedes sembrar otra cosa ni frijol ni arroz nada porque si no, eres hombre preso, si vendes sin permiso, las multas son de mil doscientos pesos. Todo es por decreto, trabajan para el estado como en las grandes haciendas antes de la revolución mexicana. ¿Se puede ser cantante sin ver?, sin sentir, sin palpar el sudor de esa Cuba, se puede ir de viaje a Ciudad de México a cantar versos que no demuestran los martirios de tu mismo país, hace falta mucha cara para cantar un rabo de nube si eres el último en los rabos del racionamiento que le mendigan al gobierno, SILVIO, eres el fraude del canto de trova cubana, eres tan falso porque tu pueblo encarcelado y condenado a diez años de prisión por gritar ¡LIBERTAD!, ¡ LIBERTAD!.